La marinera en solitario más joven, alrededor del mundo a los 16 años| Laura Dekker | TEDxYouth@Auckland

A los 16 años, Laura Dekker se convirtió en la persona más joven en circunnavegar el globo sin ayuda. Durante su viaje de 518 días, Laura se enfrentó con olas de 6 metros de alto, clima extremo, arrecifes peligrosos, sueño perturbado, condiciones de vida estrechas, racionamiento de alimentos y soledad absoluta. También se mantuvo al tanto de su trabajo escolar. Ella habla de su viaje y nos anima a todos a seguir nuestros sueños.

Hola todos, mi nombre
es Laura Dekker, tengo 18 años.

Hace dos años me volví
la persona más joven

en circunnavegar el globo sin ayuda.

Como cualquiera de
estos jóvenes inspiradores hoy,

solo tenía un sueño y me lancé a él.

Comenzaré con un video corto para darles
una pequeña impresión de lo que hice.

(Video)

Fantástico, ¡salida de Ashes Bay!
Marineros...

Algunos peces se van
a meter a tus zapatos....

(Hace sonidos de animales)

¡Y ahora le voy a ofrecer
mis tortitas a Neptuno!

¡Oh, cayó en la cubierta!

(Música)

♪Pies apresurados♪

♪Un hombre poco convencional♪

♪Apenas si dejo una huella♪

♪Bailando tan rápido como puedo♪

Desde que tenía 6 años siempre he estado
en el agua y en botes viejos.

Para cuando tenía 7,
ya competía en carreras.

Para cuando tenía 10, ya había comprado
mi propio yate digno de navegar,

que compré con mi propio dinero
por el que trabajé los años previos.

Mi mamá en realidad no es marinera,
mi papá sí, construye sus propios botes,

y durante 7 años,
navegaron por el mundo,

aunque a mamá no le gustaba.

(Risas)

Bastante impresionante.

Después de un par de años, en Whangarei,
en Nueva Zelanda, nací yo,

y navegué con ellos los siguientes
5 años, de regreso a Holanda,

de donde son originarios.

Ahí, mi mamá en realidad
ya estaba harta de navegar,

y para entonces, mi hermana Kim
ya había nacido,

y vivir con dos niñas pequeñas
en un bote pequeño,

creo que ya no le gustaba,
así que nos cambiamos a una casa.

Pero el matrimonio de mis padres,
desgraciadamente,

no parecía lidiar tan bien con
la vida en tierra como en el mar

y se divorciaron.

Así que, a los 6 años tuve la opción
de elegir con quién quería vivir.

Y elegí a mi papá.

Mi hermana automáticamente se fue
con mi mamá y nos separamos.

Mi papá había empezado
a construir su noveno bote,

esta vez un poco más
grande que los otros,

un cúter noruego de 60 pies,
que ya casi está terminado.

Lo comenzó cuando yo tenía 6, así que...

(Risas)

Así que, crecí en ese bote.

Crecí en astilleros,
entre botes, y el agua,

bueno, pronto empecé a navegar, ¿sí?

A los 10 años, teniendo
mi propio velero listo para navegar,

navegué por toda Holanda,

donde crecí después del gran viaje.

Navegué prácticamente sola,
con mi perro,

pero era una tripulación un poco inútil.

Me protegió bien, pero, en realidad
no me ayudó mucho a navegar,

así que tenía que hacer todo yo misma.

Y así, a lo largo de los años,
aprendí todo lo necesario

sobre navegación,
sistemas climáticos,

realmente todo lo que podía
aprender acerca de la navegación.

Aprendí mucho de mi papá, pero,

en realidad, aprendí más
haciéndolo, porque quise.

Para cuando tenía 11 años,
lo volví a hacer,

fui un poco más lejos, a las islas
al norte de Holanda, y al océano.

A los 13, navegué a Inglaterra yo sola.

Pensé que mis padres
creerían que no era una buena idea,

así que ¡no les dije nada! (Risas)

La policía tuvo que recogerme
en Inglaterra y deportarme a Holanda,

pero yo sabía que quería ir más lejos.

Ese viaje... ¡sabía que
estaba lista para hacerlo!

Había cruzado el Canal de la Mancha
y era algo que quería hacer.

El Canal de la Mancha está
muy concurrido, hay muchos botes,

es muy difícil para navegar,
el clima no es exactamente el mejor.

Así que habiéndolo logrado, pensé:
" OK, puedo navegar alrededor del mundo".

Y comencé a alistar mi bote,

que era bastante pequeño,
menos de 7 metros.

En realidad no había mucha gente a
quien le gustara mi idea tanto como a mí.

Todo el gobierno holandés,
y toda la gente de Holanda,

quienes se enteraron
de mis planes muy pronto,

en cuanto alguien los oyó
y los expuso a los medios.

¡No fue lo mejor para mí!

Así que por un año completo
tuve que luchar contra el gobierno.

Ocho juicios, pero seguí luchando,
quería hacer esto,

era mi sueño, mi objetivo
y continué luchando.

Así que, luché y luchar
contra el gobierno es difícil,

pero encontré una brecha y me fui.

Para entonces, ya había mejorado
mi bote a un velero de 12 metros,

también llamado Guppy

y todavía vivo ahí.

A los 14 años, partí
del sur de Europa, sola,

fui a las Islas Canarias,
Cabo Verde y al Caribe,

aprendiendo que un hogar,
por alguna razón, no se limpia solo.

¿Mmh?

(Risas)

Tienes que lavar la ropa,
¿cómo se hace eso?

Cocinar.... ¿espagueti?

Así es, sin refrigerador,
sin ducha en el bote,

sólo navegación básica,
porque no me gustan los patrocinadores,

no me gusta que la gente me diga
a dónde ir o qué hacer.

Bueno, eso significa que
tienes que hacer todo por ti misma.

Bueno, aprendí muy rápido.

Cociné para mi misma, lavé mi ropa,

no había nadie cuando tocaba tierra,

así que también tenía que
reparar todo yo misma.

Por el Caribe hacia el Pacífico,

hasta la punta de Australia.

Para entonces había navegado bastante
y conocía el bote bastante bien.

Quería tener el próximo reto.

Navegué de Australia
a Sudáfrica sin parar.

11 000 kilómetros, 48 días.

¿Por qué? ¡Porque quería hacerlo!

(Risas)

Mi bote no está preparado
para viajes largos,

tiene menos de 50 litros de agua,
100-200 litros de gasolina,

eso es todo, y también un
poco de comida, mucho espagueti...

(Risas)

Así que pensé, lo voy a hacer

y si no funciona, simplemente
navegaría a una isla.

Probablemente habrá lluvia suficiente
para poder beber, ¡voy a estar bien!

Así que me lancé de lleno.

Y ese fue uno de
los mejores viajes de mi vida,

porque estar ahí afuera, sólo con
la naturaleza, yendo con el viento....

Tuve 2 semanas sin viento,
fue realmente frustrante,

después tuve un par de tormentas,

lo que me dio mucho gusto
después de no tener viento,

aún cuando no estaba
más cerca de mi objetivo.

Pero, mentalmente, fue increíble,
porque llegué a conocerme muy bien

y realicé este sueño que tenía.

Había establecido mis objetivos
y me lancé a lograrlos.

Llegar a Sudáfrica después de 48 días
¡fue el mejor sentimiento en mi vida!

No quería regresar a tierra,
estaba feliz en el océano,

solamente el estar ahí, con la paz,
es tranquilo, ¡es genial!

En Sudáfrica me quedé por una semana,
después continué de regreso al Caribe,

y otros 11 000 kilómetros,
sin parar, 41 días.

Un año y un día después
de que dejé el Caribe,

regresé, aún cuando había
navegado sola más tiempo, por supuesto,

y sí, realicé mi sueño de toda la vida.

"¿Qué demonios voy a hacer ahora?"

Estaba sentada en un muelle ahí, pensando:

"Oh, cielos, en realidad
no quiero regresar a Holanda.

¿Qué voy a hacer ahí? ¿Estudiar? ¡No!"

O sea, estudié un poco en el bote,
y terminé mi secundaria,

pero, me sonaba muy aburrido.

Así que seguí navegando,
y regresé a Nueva Zelanda,

sólo para ver de dónde vine,
dónde nací y ¡me encanta esto!

El año pasado, llegué aquí
y simplemente me quedé.

Viajé mucho,
escribí un libro de mi historia,

y bueno, todavía tengo muchos sueños,

nunca puedes tener suficientes sueños,

pero lo importante es realizarlos.

Así que mi próximo gran sueño,
es ser capitán de barcos más grandes,

para no tener que regresar
a tierra para trabajar,

para que me pueda quedar
y hacer lo que amo.

Esto es lo que hoy
quiero darles a todos ustedes.

Si tienen un sueño, y yo sé que
cada uno de Uds. tiene un sueño,

aún cuando quizá no se den cuenta,

hay algo que ustedes realmente quieren....

Así que, ¡adelante!, ¡no tengan miedo!

Quizá sea difícil, sí, lo va a ser.

Yo tuve que luchar mucho.

Pero entre más difícil,
más gratificante es

el realizar tus sueños.

!Gracias!

(Aplausos)