¿Un jumbo impreso en 3D?

El diseñador Bastian Schaefer muestra un diseño potencial para el futuro de los aviones a reacción, con un esqueleto inspirado en formas naturales, fuertes, flexibles... y por las necesidades del mundo con, ejem, población en aumento. Imagina un avión lleno de luz y con mucho espacio... construido a partir de piezas constitutivas hechas en una impresora 3D.

¿Qué sabemos sobre el futuro?

Pregunta difícil,
respuesta sencilla: nada.

No podemos predecir el futuro.

Solo podemos crear una visión
del futuro, cómo podría ser,

una visión que revele ideas disruptivas,
lo cual es inspirador,

y esa es la razón más importante

que rompe las cadenas
del pensamiento común.

Hay mucha gente

que creó su propia visión del futuro,

por ejemplo, esta visión
de principios del siglo XX.

Aquí dice que este
es el avión oceánico del futuro.

En un día y medio cruza el Atlántico.

Hoy sabemos que esta visión
de futuro no se hizo realidad.

Este es el avión más grande que tenemos,

el Airbus A380,
es bastante grande,

lleva un montón de personas

y técnicamente es completamente diferente

del de la visión que les mostré.

Estamos trabajando en equipo con Airbus,

y hemos creado una visión

sobre un futuro
más sustentable de la aviación.

La sustentabilidad es bastante
importante para nosotros,

y debería incluir valores sociales

pero también ambientales y económicos.

Por eso creamos
una estructura muy disruptiva

que imita el diseño
del hueso, o esqueleto,

que ocurre en la naturaleza.

Es por eso que quizá
parezca un poco raro,

sobre todo para quienes trabajan
con estructuras en general.

Pero al menos es una forma de arte

para explorar nuestras ideas
sobre un futuro diferente.

¿Quiénes son los principales
clientes del futuro?

Están los viejos, los jóvenes,

las mujeres en ascenso,

y hay una megatendencia
que nos afecta a todos.

Este es el futuro de la antropometría.

Nuestros hijos son cada vez
más grandes, pero al mismo tiempo

crecemos en distintas direcciones.

Por eso necesitamos espacio
dentro de la aeronave,

dentro de cada área densa.

Estas personas tienen
distintas necesidades.

Vemos, pues, una necesidad clara
de promover la salud activa,

sobre todo en el caso de la gente mayor.

Queremos ser tratados como individuos.

Queremos ser productivos a lo largo
de toda la cadena del viaje,

por eso en el futuro queremos

usar lo último en interfaz hombre-máquina,

e integrarlo todo en un solo producto.

Por eso combinamos estas necesidades
con temas tecnológicos.

Así, por ejemplo, nos preguntamos:

¿cómo podemos crear más luz?

¿Cómo llevar más luz natural al avión?

Este avión ya no tiene
ventanas, por ejemplo.

¿Qué hay del software
de datos y comunicación

que necesitamos en el futuro?

En lo personal creo
que el avión del futuro

tendrá su propia conciencia.

Será más como un organismo vivo

que una colección
de tecnología muy compleja.

Esto será muy distinto en el futuro.

Se comunicará directamente

con el pasajero en su entorno.

Y luego también hablamos de materiales,

biología sintética, por ejemplo.

Creo que conseguiremos
cada vez más materiales,

más nuevos, que luego
podremos poner en estructuras

porque la estructura
es uno de los temas clave

en el diseño aeronáutico.

Comparemos el mundo viejo
con el mundo nuevo.

Quiero mostrarles aquí lo que hacemos hoy.

Este es el soporte del compartimiento
de descanso de la tripulación de un A380.

Requiere mucho peso,

y sigue las reglas del diseño clásico.

Este de aquí es un soporte igual
para el mismo propósito.

Sigue las reglas de diseño de un hueso.

El proceso de diseño
es totalmente diferente.

Por un lado, tenemos 1,2 kilo

y por el otro, 0,6 kilo.

Esta tecnología, la impresión 3D,
y nuevas reglas de diseño

realmente nos ayudan a reducir peso,

que es el mayor problema
en el diseño de aeronaves,

porque está directamente vinculado a las
emisiones de gases de efecto invernadero.

Llevando esta idea un poco más lejos:

¿Cómo construye la naturaleza
sus componentes y estructuras?

La naturaleza es muy inteligente.
Pone toda la información

en estos pequeños bloques
de construcción, que llamamos ADN.

Y a partir de ellos construye esqueletos.

Aquí vemos un enfoque abajo-arriba

porque toda la información,
como dije, está en el ADN.

Y esto se combina
con un enfoque arriba-abajo

porque en la vida cotidiana

entrenamos los músculos,
entrenamos el esqueleto,

y así se fortalece.

El mismo enfoque puede aplicarse
también a la tecnología.

Nuestro bloque de construcción
es el nanotubo de carbono, por ejemplo,

para, en última instancia, crear
un esqueleto grande, sin remaches.

Aquí en particular pueden ver su aspecto.

Imaginen que tienen
nanotubos de carbono

en una impresora 3D,

y se los incrusta
en una matriz de plástico,

y seguimos las fuerzas
que ocurren en el componente.

Y tenemos miles de millones de ellos.

Se los alinea en la madera,

y en esta madera practicamos
unas optimizaciones morfológicas,

para hacer estructuras, sub-estructuras,

que permitan transmitir
energía eléctrica o datos.

Y ahora tomamos
este material, lo combinamos

con un enfoque arriba-abajo

y construimos componentes
cada vez más grandes.

¿Qué aspecto tendrá el avión del futuro?

Tenemos asientos
muy diferentes que se adaptan

a la forma del pasajero del futuro,

con diferente antropometría.

Tenemos áreas sociales
dentro de la aeronave

que podrían convertirse en un lugar

donde jugar golf virtual.

Y, finalmente, esta estructura biónica

cubierta por una membrana transparente,

un biopolímero, que realmente
cambiará de forma radical

nuestra manera de ver
la aeronave del futuro.

Como dijo Jason Silva,

si podemos imaginarlo,
¿por qué no hacerlo?

Nos vemos en el futuro.
Gracias.

(Aplausos)