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Esta noche es un honor especial para mí, porque seamos realistas,
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mi presencia en este escenario era muy improbable.
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Mi padre fue un estudiante extranjero,
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nació y creció en un pequeño pueblo en Kenia.
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Mis padres no solo compartían un amor improbable,
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ellos compartían una fe duradera en las posibilidades de esta nación.
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Me paro aquí, sabiendo que mi historia
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es parte de una gran historia Americana,
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que le debo profundamente a los que me antecedieron
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y que en ningún otro país sería posible.
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Además de nuestro famoso individualismo,
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la historia Americana presenta otro ingrediente.
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La convicción, que todos estamos conectados, formando un solo pueblo.
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Si hay un niño en el lado sur de Chicago,
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que no sabe leer es importante para mí aun si no es mi hijo.
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Si en algún lugar hay un adulto mayor,
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que no puede pagar su receta médica
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y debe escoger entre medicamentos y el arriendo
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esto hace mi vida pobre aún si no es mi abuelo.
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Es fundamental que yo entienda,
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que soy cuidador de mis hermanos, y el guardián de mis hermanas.
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Esto hace que el país funcione.
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“E pluribus unum.” - Es la diversidad la que nos une.
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Ahora, mientras estamos hablando,
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se preparan quienes quieren dividirnos,
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los maestros en manipular la información, y los transmisores de propagandas negativas,
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que se aferran a la política de que todo recurso es válido.
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Pero está noche les digo,
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no existe una América liberal, o una América conservada
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solo existen los Estados Unidos de América.
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No existe una América negra
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y una América blanca
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y una América latina
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y una América asiática,
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solo los Estados Unidos de América.
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A los críticos les gusta dividir nuestro país
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en los partidos democráticos y republicanos.
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Pero tengo noticias para ellos también,
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nosotros adoramos un gran Dios en los estados democráticos
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y en los estados republicanos no nos gusta que los policías invadan nuestras bibliotecas
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Nosotros entrenamos ligas intermedias en los estados republicanos
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y sí, tenemos amigos homosexuales en los estados democráticos.
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Somos un pueblo, todos prometiendo lealtad a las barras y estrellas.
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Todos defendemos los Estados Unidos de América.
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Al final, de esto se tratan las elecciones,
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de si participamos en políticas de cinismo, o
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si participamos en políticas que transmiten esperanza.
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La esperanza de los esclavos que están sentados
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alrededor de una fogata cantando canciones de la libertad;
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Es la esperanza de los inmigrantes que parten hacia tierras lejanas;
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La esperanza de un joven teniente naval,
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que valientemente vigila la delta del Rio Mekong.
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La esperanza del hijo de un trabajador de molino,
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que se atreve a desafiar las probabilidades.
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La esperanza de un niño flaco con un nombre raro.
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cree que Estados Unidos tiene un lugar para él también.
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Esperanza.
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La esperanza en el rostro de dificultad.
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La esperanza en un contexto de incertidumbre.
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La audacia de la esperanza.
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Yo creo en que este país va a reclamar sus promesas,
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y fuera de esta larga oscuridad política,
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un día más brillante vendrá.
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Muchas gracias a todos.
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Dios los bendiga.