Cómo podemos contribuir a salvar a la mariposa monarca... y al planeta

Las mariposas monarca se mueren a un ritmo alarmante en todo el mundo, una extinción inminente que también podría poner en peligro la vida humana. Pero tenemos algo que puede contribuir a proteger a estos insectos, dice la escritora Mary Ellen Hannibal: los ciudadanos científicos. Descubre cómo estos voluntarios comunitarios desempeñan un papel crucial en el recuento y rescate de la menguante población de la mariposa monarca y cómo te puedes unir a sus filas para ayudar a preservar la naturaleza. Estarás en buena compañía: ¡Charles Darwin era un científico ciudadano!

Hola a todos.

Suelo decir que me encantaría
que las mariposas pudieran hablar,

pero es algo que he tenido
que reconsiderar,

porque ya tenemos
un mundo bastante ruidoso.

¿Se imaginan si hubiera mariposas
parloteando por todas partes?

Pero sí, quisiera preguntar
algo a las mariposas:

¿cuál es el origen de ciertas historias
que los humanos contamos sobre ellas?

Porque sorprende que culturas de todo
el mundo tengan historias similares

y mitos comunes sobre las mariposas
relacionados con el alma humana.

Algunas culturas creen que las mariposas
portan el alma de los niños

que murieron de forma injusta
o demasiado pronto,

y otras culturas creen que las mariposas

portan el alma de nuestros antepasados.

Esta mariposa se llama "Kallima inachus".

Por un lado, parece una hermosa mariposa,
y por el otro parece una hoja,

y se dobla como una hoja
para eludir a sus depredadores.

Ahora la ven, y ahora no;
camuflada, o expuesta.

Puede que tomáramos nuestras ideas
sobre el alma humana de esta mariposa.

Es posible que las mariposas tengan
algún papel destacado en el más allá.

Pero en esta vida, en este mundo,
las mariposas tienen problemas muy serios.

Esto es una polilla.

Son parientes de las mariposas
y suelen volar de noche.

Esta se llama "praedicta", debido
a que Darwin predijo su existencia.

Hoy día, más de 60 especies de mariposas
están en peligro de extinción en el mundo,

y lo que es peor:

cada vez hay menos insectos.

En los últimos 50 años,

hemos perdido casi el 50 %
de la población total de insectos.

Es un desastre.

Podría impactarnos de forma más grave
y rápida que el cambio climático,

porque las mariposas apenas intervienen
en el ecosistema del que dependemos,

pero repercuten en otras criaturas
de las que sí dependemos,

y ocurre lo mismo
con todas las especies de insectos.

Los insectos constituyen la base
de nuestro soporte de vida.

No podemos perderlos.

La biodiversidad de todo el mundo
está en un claro declive.

Pérdida de hábitat, pesticidas, herbicidas
y los impactos del cambio climático.

La pérdida de hábitat es algo muy grave,

por eso debemos seguir trabajando en ello
y de forma más consciente.

No es el mejor momento,
estamos agobiados con nuestros problemas.

Pero también es el mejor momento,
hay muy buenas noticias.

Tenemos justo lo que necesitamos.

Tenemos el proyecto perfecto
para preservar la naturaleza:

la ciencia ciudadana.

El término "ciencia ciudadana" se utiliza
para referirse a personas sin doctorados

que contribuyen
a la investigación científica.

A veces se denomina ciencia comunitaria,

que comparte el espíritu comunal
de la ciencia ciudadana,

que es hacer algo de forma conjunta
por nuestro bien común.

Es ciencia amateur.

Hoy en día es impulsada
por el enorme poder del cómputo,

el análisis estadístico
y el teléfono inteligente,

pero es un hábito muy arraigado
que siempre se ha practicado.

La ciencia amateur.

La ciencia profesional tiene sus raíces
en la ciencia amateur.

Charles Darwin
era un científico ciudadano.

No tenía una titulación superior
y trabajaba por su cuenta.

Alguien le mostró a Darwin
esta orquídea estrella de Madagascar,

que tiene un espolón de 30 cm de largo,

y el espolón es la parte de la flor
que contiene el néctar.

Esta persona se la mostró a Darwin y dijo:

"Esto prueba que la evolución
no se produce de forma natural.

Esta flor prueba que solo Dios puede poner

una criatura tan increíble
y extraña en la faz de la Tierra,

porque ningún insecto podría polinizarla.

Tiene que ser una creación de Dios".

Y Darwin dijo: "No; estoy seguro
de que hay un insecto en algún lugar

con una espiritrompa lo bastante larga
para polinizar esa orquídea estrella".

Y tenía razón.

Aquí tenemos un mapa de la migración
de la mariposa monarca.

Esta mariposa tiene una historia distinta
a la de esa polilla en particular,

pero expresa la misma idea fundamental

a la que Darwin llamó coevolución,

y la coevolución es la clave
de cómo funciona la naturaleza,

y también de lo que le ocurre
a la naturaleza ahora mismo.

Con el tiempo, a medida que la polilla
desarrolló una espiritrompa más larga,

la planta desarrolló un espolón más largo.

A lo largo de millones de años,
ambas formaron una asociación

que mejoró sus expectativas
de supervivencia.

La mariposa monarca tiene
otro tipo de relación coevolutiva,

y hoy día es el origen
de los problemas de esta especie.

Este es el mapa de la migración
de la mariposa monarca.

Esta mariposa hace algo asombroso,

en el transcurso de un año,
se extiende por toda Norteamérica.

Lo hace a lo largo
de cuatro o cinco generaciones.

Las primeras generaciones
solo viven un par de semanas.

Se aparean, ponen huevos y mueren.

La nueva generación emerge como mariposa
y emprende la siguiente etapa del viaje.

Nadie sabe cómo lo hacen.

Para cuando la quinta generación regresa,

que vive más tiempo
e inverna en México y California,

cuando llega allí, esas mariposas regresan
al lugar de donde vinieron sus ancestros,

a pesar de que nunca estuvieron allí,

y de que ningún miembro de su especie
ha estado allí antes tampoco.

No sabemos cómo lo hacen.

Sabemos que hacen este tipo de migración,

aunque hay muchas preguntas sin responder
sobre la migración de las monarcas,

gracias a la ciencia ciudadana.

Durante décadas, mucha gente
ha observado a las mariposas monarca,

dónde y cuándo las ven,

y han contribuido con estas avistaciones
en plataformas como "Journey North".

Este es un mapa de algunas avistaciones
de mariposas añadidas en Journey North.

Pueden ver que los puntos
están clasificados

según la época del año en que
se hicieron esas avistaciones.

Este enorme volumen de datos
se añade a la plataforma Journey North,

y se puede obtener un mapa actual

del recorrido anual
de las mariposas monarca.

Debido también a la ciencia ciudadana,

sabemos que el número
de mariposas monarca está cayendo.

En la década de 1980,

se contabilizaron cuatro millones
de mariposas invernantes en California.

El año pasado, 30 000.

(Exclamación de sorpresa)

De cuatro millones a 30 000
desde la década de 1980.

El número de mariposas monarca
en la costa este es algo mayor,

pero también están bajando.

¿Cómo vamos a evitarlo?

De una forma muy orgánica,
no se le exige a nadie que lo haga,

hay gente en todo el continente
que defiende a las mariposas monarca.

El principal problema de la mariposa
monarca es el algodoncillo.

Es otra relación coevolutiva,
les explico su historia.

El algodoncillo es tóxico.

Tiene un veneno que evolucionó para
disuadir a otros insectos de comerlo,

pero la mariposa monarca
desarrolló otro tipo de relación,

una estrategia diferente
con el algodoncillo.

No solo tolera la toxina,

sino que esta mariposa
la retiene en su cuerpo,

tornándose así venenosa
para sus depredadores.

La mariposa monarca solo pone
sus huevos en algodoncillo,

y las orugas monarca
solo comen algodoncillo,

porque necesitan esa toxina
para transformarse en su especie.

Así que se está plantando
algodoncillo por todo el país,

en zonas donde se había perdido
debido a la destrucción del hábitat,

el uso de pesticidas, herbicidas
y el impacto del cambio climático.

Pueden crear un hábitat para mariposas
y para polinizadores en un alféizar.

Vayan a un vivero de plantas autóctonas
y descubran qué especies son del lugar,

regresarán con algo muy valioso.

La ciencia ciudadana puede hacer mucho más
que salvar a las mariposas monarca.

Tiene la capacidad de escalar
hasta el nivel necesario

para movilizarnos
y preservar la naturaleza.

Y este es un ejemplo;
se llama City Nature Challenge.

"City Nature Challenge" es un proyecto

de la Academia de Ciencias de California

y el Museo de Historia
Natural de Los Ángeles.

Durante cuatro años,

City Nature Challenge ha instado
a las ciudades de todo el mundo

a participar en el recuento de la
biodiversidad en sus ciudades.

Tenemos alrededor de un millón
de avistamientos de biodiversidad

recopilados por todo el mundo
durante el pasado mes de abril.

El ganador de este año fue Sudáfrica,
muy a pesar de San Francisco.

(Risas)

Fíjense, tienen más
biodiversidad que nosotros.

Es muy interesante

descubrir los recursos naturales
del lugar donde uno vive,

porque a medida que la sociedad avanza,
busca vivir entre más biodiversidad.

Y, por cierto, la ciencia ciudadana es una
buena herramienta para la justicia social

y para alcanzar los objetivos
de justicia ambiental.

Se necesitan datos y requiere visión,

hace falta una causa y un enfoque preciso

para ayudar a solucionar
el problema en cuestión.

Creo que City Nature Challenge
debería recibir una mención de la ONU.

¿Ha habido alguna vez
una iniciativa mundial

en pro de la naturaleza
emprendida de forma tan coordinada?

Es asombroso, es fantástico
y está muy relacionado con la comunidad,

y obtenemos información muy interesante

sobre las mariposas y otras criaturas
con estas observaciones exhaustivas.

City Nature Challenge trabaja
con una herramienta llamada iNaturalist.

iNaturalist es su carta de acceso
a la ciencia ciudadana.

Les propongo que se inscriban
en su ordenador,

y luego bajen la aplicación a su móvil.

Con iNaturalist, pueden tomar fotos
de pájaros, insectos, serpientes...

y una función de inteligencia artificial
y un sistema experto en verificación

trabajan en validar esa avistación.

La aplicación asigna la fecha, la hora,
la latitud y la longitud del avistamiento

y lo geolocaliza.

Esos son los datos, la parte científica
de la ciencia ciudadana.

Luego esos datos se comparten,

y eso es el alma de la ciencia ciudadana.

Cuando compartimos datos,

tenemos una perspectiva
más amplia de lo que pasa.

No es posible apreciar
el viaje migratorio de estas mariposas

sin compartir los datos que han sido
recopilados durante décadas,

que ofrecen una visión profunda de la vida
natural a través de la ciencia ciudadana.

Esta es una mariposa azul de Xerces,

que se extinguió cuando perdió su hábitat
en el Parque Golden Gate.

Tuvo una relación coevolutiva
con una hormiga; y esa es otra historia.

(Risas)

Voy a terminar pidiéndoles

que por favor participen de alguna forma
o manera en la ciencia ciudadana.

Es algo increíblemente positivo.

Hace falta un montón de gente
para que funcione de forma eficaz.

Tan solo añadir que puede
que las mariposas

tengan suficiente con lo suyo
para tener que portar almas humanas.

(Risas)

Pero hay muchas cosas
que no sabemos, ¿no?

¿Qué hay de todas esas historias?

¿Qué es lo que nos cuentan?

¿Quizás coevolucionamos
nuestras almas con mariposas?

Nuestra conexión
con las mariposas, sin duda,

es más profunda de lo que pensamos,

y el misterio de las mariposas
nunca será revelado si no las salvamos.

Así que, por favor,

únanse a mí para ayudar
a preservar la naturaleza desde ya.

Gracias.

(Aplausos)