-
- Eso es así compadre...
-
- Eso es así.
-
Que ni hay cambio climático ni hay nada.
-
Que es to' mentira.
-
Que aquí hace un frío del carajo y...
-
lloviendo más que en Londres.
-
Coño, como debe de ser: frío en invierno y calor en verano.
-
Y en primavera...
-
la Semana Santa y la Feria.
-
¡Olé! Coño, que está to' inventa'o, Fali.
-
Cojones. Es to' una estratagema para tener a la gente cagá', coño,
-
el miedo al apocalipsis.
-
Tú mira como el Vaticano no se ha pronuncia'o.
-
- El Vaticano...
-
- El Vaticano... ¿Tú has leído el ABC, compadre?
-
- A veces, mi alma.
-
- El ABC dice, compadre,
-
que hay toda una red de libre-pensadores e ilustrados
-
que dicen que esto del cambio climático es un camelo.
-
- Si lo dice el ABC, eso es así.
-
- Y entre todos esos libre-pensadores e ilustrados, compadre,
-
está el mejor presidente del gobierno y estadista que ha tenido este país.
-
- Hombre, si Josemari está metido ahí, eso es así.
-
- Hombre, a ese hombre habría que hacerlo presidente perpetuo.
-
- Como pasa en Venezuela.
-
- O aquí en Andalucía.
-
- De hecho, con los avances tecnológicos, el tema del clima, Rafael,
-
está totalmente controlado.
-
Los chinos, compadre, en las Olimpiadas tenían una máquina
-
para controlar todo este tipo de cosas.
-
Que tu querías sol: sol.
-
Que tú querías viento: viento.
-
Pero no un viento cualquiera, no, no, no. Viento de 32 nudos.
-
- Y medio.
-
-¿Dónde?
-
- Aquí.
-
- Pá' luego.
-
- Coño, mira, se nos están convirtiendo en la primera potencia mundial.
-
- Hombre, perdona, la de chinos que hay por el mundo.
-
- Y por la carretera.
-
- Hombre, coño, en el Rocío vi el otro día yo un chino.
-
- ¿Qué hará el chino en el Rocío?
-
- Hombre, vender cosas de luces.
-
- La conquista silenciosa.
-
- Yo he empezado ya a estudiar chino.
-
- ¿Tú, compadre?
-
- Coño, para que cuando este tipo de personas dominen el mundo
-
a mí no me den gato por liebre.
-
- Mira, pues eso está bien pensa'o, coño.
-
- 就是這樣.
-
- ¿Eso qué es compadre?
-
- Eso es así.
-
- ¡Qué maravilla, qué maravilla!
-
¡Qué maravilla! Me tienes anonada'o.
-
- Masurben yanú.
-
- Venga ya, Fali, eso no es chino.
-
- Pues, tríncame el pepino.
-
- ¿Otra vez, compadre?
-
- Otra vez, hijo, otra vez.
-
- Me cago en la hostia.
-
- Niño, muchacho...
-
Dame un par de cervecitas y dale una patadita al olivo, mi alma.
-
Cómo está el servicio, compadre, qué lástima.
-
- Fatal. Lamentable.
-
- Lamentable.
-
- Antes, tú llegabas a un bar
-
y tenías tu cerveza ya echá antes de entrar.
-
- Hombre, por favor.
-
- ¿Y ese camarero,
-
que te recitaba las tapas como Lope de Vega?
-
Tenemos los caracoles, tenemos las cabrillas, tenemos los tomatitos,
-
tenemos el aliño, de pulpo, de huevas, de patatas,
-
lo tenemos tó'. Los montaditos. Coño, variedad.
-
- Maravilla. Ahora te dan un cacho de papel plastifica'o
-
lleno de pringue, despega'o por las esquinillas...
-
¡Cambia el papel, mi alma! ¡Déjate de miserias, coño!
-
- ¿Y los camareros que son todos de fuera?
-
- No, pero lo peor no es eso, compadre,
-
lo peor es que te metes en la cocina
-
y tienes un coreano friyéndote las puntillitas.
-
Que te comes una puntillita y te sabe a "Familia feliz".
-
- Métete en un autobús,
-
que a parte de la carita de menú que tiene todo el mundo
-
y lo que jiere a ti eso,
-
que parece que has atravesa'o una puerta dimensional y estás de pronto en los Andes.
-
- Te voy a decir una cosa, compadre,
-
esa gente son los que nos van a sacar de la crisis.
-
- Hombre eso es lo que...
-
- Esta gente viene aquí a currar.
-
- Eso es lo que necesita un país como España
-
que está lleno de comunistas vagos que no quieren trabajar
-
y nos tienen axfisia'os.
-
- Tanto rollo ya, cojones. Porque el negro es negro...
-
pero viene aquí a currar,
-
y no tiene tantas tonterías como tienen aquí todo el mundo.
-
Que si jornada laboral de 35 horas semanales, paro...
-
¿35 horas semanales? De 100 horas te daba yo la jornada laboral a ti.
-
- Claro.
-
- Coño.
-
- Mira, ¿tú a este tipo de personas, a los negros,
-
tú le pones una nave,
-
con sus literas, su cuarto de baño, su cocina con gas y su televisor en color y...
-
y esta gente son más felices que Dios.
-
- Aquí se viene a currar y si hay que cobrar la mitad, pues se cobra la mitad.
-
Pero lo que pasa, compadre, es que el negro,
-
todo lo que tiene de negro, lo tiene de coherencia.
-
- Por eso fueron los que levantaron un país como los Estados Unidos.
-
- A base de currar y sin cobrar un pavo.
-
- Coño. A currar, con dos cojones, negros.
-
- Bien.
-
- No son nadie los yankees.
-
- Por eso han puesto al negro en la Casa Blanca.
-
- Eso, un blanco perfecto, compadre.
-
- Para comerse toda la marrona y ser el que levante el país.
-
- ¿No lo sabes ya? ¿No lo sabes ya?
-
Ahora, eso, en vez de una labor de lavado de cara, una labor de tiznado de cara.
-
- Eso es igual, igual que si aquí ponen a un presidente gitano... enseguía.
-
- Por favor... venga ya...
-
Lo primero que hace es abolir el Ministerio de Trabajo.
-
- Entonces yo lo voto, compadre.
-
- Y yo, compadre, del tirón.
-
- Quítate el pelito del ojo.
-
- Yo ni soy racista, ni soy racista ni ná.
-
A mí no me escucharás tú, a mí en la vida hablar...
-
- En la vida...
-
- Lo que no hay es que mezclar.
-
- Mezclar... Pues aquí vamos a acabar con un poncho puesto, tocando una gaita y con un tambor del Rocío.
-
¿Eso qué es?
-
- Pero eso no es lo peor.
-
Tú imagínate un payo-poney debajo del paso de palio de Nuestra Señora de la Virgen de la Esperanza Macarena.
-
- Compadre, ya me has corta'o el cuerpo.
-
- Ese paso cojeando.
-
- Voy a coger un poquito de caña de lomo, a ver cómo me sienta.
-
- Coño.
-
- Tú imagínate.
-
- Tú miras los moros compadre.
-
Los moros vienen aquí y qué comen.
-
- Coño, cuscús.
-
- Kebab.
-
- Entonces, ¿qué comen, coño?
-
- Kebab, cojones, el tronchaco ese de carne que se lo van rascando.
-
- Hostias qué asco, y eso la gente se lo come.
-
- Me voy a comer yo un kebab... una polla me voy a comer yo...
-
Cómete un serranito, cojones, que es lo tuyo.
-
- Hombre, tú sabes que yo soy más de las coquinitas y la gamba blanca de Huelva.
-
A mí no me vengas con...
-
- Compadre, yo soy de la cigala de tronco, mi arma, pero no...
-
me nades en la superficie, adéntrate, sumérgete en la profundidad del planteamiento que te quiero transmitir.
-
- Vale, vale, compadre, estoy contigo.
-
- El serranito, compadre, viene a ser a la gastronomía lo que a la sociedad la clase media.
-
Que tiene todo para saciarte, pero ningún lujo.
-
- Coño, como una gorda.
-
- Igual. Exactamente igual.
-
- Mira, de hecho, se podría comercializar de la misma manera:
-
"Döner serranito".
-
Que tú, vayas donde vayas del mundo, tú te puedas comer tu serranito.
-
- Hombre, cojones.
-
- Coño.
-
- Compadre, yo te digo una cosa, esa idea, eso, compadre...
-
Eso, al que se le ocurra, ése se pone en el taco.
-
- Coño, mira, además, mira: su buen pan de viena, su filete de lomo, su pimiento frito,
-
su rodajita de tomate y su loncha de jamón serrano...
-
- Y su mojopicón.
-
- ¿Mojopicón de qué?
-
- Un poco de pique, compadre.
-
- Ya empezamos a poner, empezamos a quitar, empezamos a mezclar,
-
empezamos a volvernos locos y terminamos metiendo las papas en el serranito, coño.
-
Que ahí está el demonio.
-
- ¿En el mojopicón, compadre?
-
- En mis cojones, Rafael, en la mezcla, compadre.
-
- Coño, yo te entiendo, ahora te estoy yo... Te voy a comer los huevos...
-
Te entiendo, compadre, por eso estamos nosotros en sitios como éste, auténticos.
-
- De categoría.
-
- Señoriales. Porque nosotros somos señores, compadre.
-
Y ¿dónde están los señores? En los sitios señoriales, donde va la gente señorial.
-
- No, no, no te equivoques.
-
Nosotros no vamos donde va la gente. Nosotros vamos donde van los señores.
-
De sevillanas maneras. Coño.
-
- Por favor, tanta gorrita, y tanto pantaloncito cagadito,
-
y tanto mamoneíto, y tanta bicicletita...
-
- Ay, el de la bici...
-
- Carrilito bici... Venga ya, hombre.
-
Tu taxi de puerta a puerta, tu Mercedes aparca'o, bueno, gordo, ahí, que tú tengas.
-
Hay mucho tieso, compadre, mucho tieso, mucho tieso.
-
- Lo que hay es mucho ratero, es lo que hay.
-
- ¿Mucho ratero? Aquí cagas brillantes, compadre, y te roban la mierda.
-
- Coño, mira, sin ir más lejos, el otro día estaba parado en un semáforo,
-
detrás de un Clio rojo, y dos niñatitos con capuchas de nazareno,
-
le pegaron un viaje con un ladrillo al coche y le quitaron el bolso a la chavala.
-
- Me cago en sus muertos... ¡Qué poca vergüenza!
-
No tendrán dinero para un pasamontañas.
-
- Que están damnificando la imagen del cofrade sevillano haciendo este tipo de cosas.
-
- Por favor...
-
- Coño.
-
- ¿Y de qué hermandad eran, compadre?
-
- No me dio tiempo de verle el escudo, pero uno iba de blanco y otro de negro.
-
- Serían los Estudiantes, la Paz o...
-
- Seguro, fijo.
-
Yo me estoy planteando muy seriamente meterme a Aikido.
-
- ¿Eso qué es, compadre?
-
- Eso te convierte en una máquina de partir brazos.
-
Eso es lo que hace Fran Rivera en el anuncio de un coche.
-
- Yo soy más currista, compadre.
-
- Sale poco ése últimamente.
-
- Hombre, por favor, Curro últimamente sale menos que el Cachorro, pero bueno,
-
ese hombre está en el taco, tiene dinerito, es donde tiene que estar.
-
- En el taco riguroso.
-
- ¿Riguro...?
-
- Como dicen los Morancos.
-
- ¿Tú sabes que tú tienes toda la cara de la maricona de los Morancos?
-
- ¿Y tú sabes que tú tienes toda la cara de "Arto"?
-
- ¿Arto quién es, compadre?
-
- Ar to' el pellejo de mi nabo.
-
Ay, compadre, ay.
-
- Sin aldad ninguna. Mira, mira, mira qué maravilla. Mira la niña, mira la niña.
-
- Niña, niña, ¿quieres chuchería, hija?
-
- ¡Qué barbaridad! ¡Qué barbaridad! Pégame, llámame Maruja, si quieres Maruja limón...
-
- Zarzuela de mariscos.
-
- Qué enterismo, qué enterismo.
-
- Compadre, ¿y tú mujer?
-
- Todavía no se sabe, compadre.
-
- Aún no te ha llamado al móvil.
-
- Todavía no.
-
- Ah.
-
- De todas maneras tú sabes que yo el móvil
-
lo dejo aparca'o cuando quedo con mi compadre para tomarme algo.
-
- Hay que ver, Rafael, hay que ver el daño que ha hecho el móvil en la Feria.
-
- El daño que ha hecho el móvil en la Feria, además de verdad.
-
Tú entrabas un lunes, antes, y salías un jueves...
-
Y ahí, que tú quedabas con tu mujer, "vamos a quedar", "vamos a quedar a las 12h30 en la portada".
-
- Donde tú sabes.
-
- Y allí había un millón y medio de personas. Encuéntrame.
-
- Busca al Fali.
-
- Vas a encontrar un mojón... vas a encontrar.
-
- Qué maravilla, hijo.
-
- Compadre vamos a tomarnos un gin-tonic ya.
-
- Mira, chico, chico, tráeme el finiquito, chico.
-
- No, no, no. Ésta es mía, compadre.
-
- No, no, esto lo pago yo.
-
- No, pago yo.
-
- Ésta es pa' mí, coño.
-
- Que pago yo, cojones.
-
- Bueno, venga.
-
- Yo luego te invito al gin-tonic.
-
- Y yo al cafelito.
-
- Y yo a la casita de colores.
-
- Hostias, compadre...
-
Me he tenido que dejar la cartera en el Mercedes.
-
- Búscate bien, hijo, búscate bien.
-
- Ni con Paco Lobatón, compadre, que no.
-
- Ni con Paco Lobatón, ¿no?
-
Coño, yo me acabo de acordar que me he deja'o la mía en la taquilla del Club Náutico.
-
- Anda que estamos avia'os.
-
- Estamos como estamos.
-
- ¿Qué hacemos?
-
- Pues yo no sé.
-
- Una, dos y tres, ¿no?
-
- Eso es así.
-
- Y los pimientos son asa'os.
-
- Y las papas fritas.
-
- Coño.
-
Vámonos.
-
- ¡Ven pa'cá, coño!
-
- ¡Ay, espérate que me resbalo con los castellanos!
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