-
Tengo mucha sed...
-
... y me duelen los pies.
-
Tengo piedras
en el zapato.
-
Seguro nos van a matar.
-
Porque nos quieren matar
si no hicimos nada.
-
Un día mi papá nos dejó
-
y se fue a Estados Unidos cuando empezó la guerra.
-
Mi mamá no salió
a despedirse.
-
Yme dijo que ahora yo iba
a ser el hombre de la casa.
-
Pero primero tenía
que ir a hacer pipí.
-
"Dos alas.
Quien tuviera dos alas."
-
"Dos alas para el vuelo."
-
"Esta tarde en la cumbre
casi las he tenido...
-
... con el loco deseo de
haberlas extendido sobre aquel mar dormido..."
-
No, ¡ya no!
-
¡Ayúdame Fito!
-
¡Ayúdame!
-
Ya llegué mamá.
-
Perdóneme.
-
Es que tuve que encaminar
a Antonio y a Fito.
-
¿No tienen pies
para llegar solos?
-
Es que ya sabe
cómo son de miedosos.
-
No vuelvas
a llegar tarde.
-
Los soldados
no están jugando.
-
Un día, Dios no lo quiera,
agarran su rifle y te disparan...
-
¿Ya me entiendes?
-
Sí, mamá.
-
¡Temo! ¡Temo! ¡Temo!
-
Temo! Temo! Temo!
-
Todos teníamos miedo
de cumplir los 12.
-
Porque venía el ejército
y te llevaba.
-
A mí todavía
me quedaba uno.
-
¿Ves Ancha?
Tú y yo nos parecemos.
-
¡De veras!
Los dos somos chiquitos.
-
Ay, sí...
Sí, yo soy chiquito.
-
Yo... De tamaño,
pero no de aquí.
-
Ancha era mi amigo.
-
Algunos decían
cerebro de pescado.
-
Gracias, Anchita.
-
Pero a él no le daba miedo
seguir cumpliendo años.
-
¡Ay, qué bueno!
Gracias a Dios.
-
Hola, hermana pedorra.
-
¿Dónde estaban?
-
Es tardísimo.
-
- Te encargo a tus hermanos, ¿eh?
- Usted no se apure.
-
¡Rosita!
-
¡Mamita, no les des nada de comer
a Ricardito después de las 8, ¿sí?
-
Aunque grite.
-
Ay! ¿Por qué mami?
-
Te quiero mi amor.
Y hay que sacar la basura.
-
Y cierro la puerta,
y pongo la tranca...
-
...y no le abro a nadie.
-
¡Es usted mi hombre
de la casa!
-
¡Ay sí, el hombre
de la casa!
-
Ni siquiera te sabes
limpiar las nalgas.
-
¡Ya deja a mi hermano!
-
Se quedó dormido.
-
¡Los colchones, Chava!
-
¡Quiero a mi mamá!
-
¡No, cuidado Chava!
¡No! ¡No te subas!
-
¡Métete a la cama!
¡Rápido! ¡Métanse rápido!
-
Hasta mañana.
Hasta luego, buenas noches.
-
¡Abuelita Mamatoya!
-
¡Mamatoya!
-
- Y, ¿qué has sabido de Beto mamá?
- Nada.
-
Nada desde que cerraron
la universidad...
-
...no sé para dónde
agarró tu hermano.
-
Esperemos que no
le haya pasado nada.
-
Lo sabríamos.
-
Las malas noticias
corren rápido.
-
Ya aparecerá.
-
Si viera qué feo
se puso anoche.
-
Y estos niños solos.
-
Voy a tener que dejar
mi trabajo.
-
¿Y quién te va a mantener?
-
¿Por qué no se vienen
a vivir para acá?
-
¿Cómo cree, mamá?
Aquí no cabemos todos.
-
No digo aquí.
-
Pero van a desocupar la casa
de la nena Refugio.
-
Entonces, yo les puedo
echar un ojo a los niños...
-
...y ayudarte con
las tareas.
-
Si nos vamos de ahí,
no nos va a encontrar.
-
No se engañe, mi'ja.
-
Los que se van
pa'l norte, se marean.
-
Levanta la frente,
Kella.
-
El jodido es él.
-
Los que se van, sufren más
que los que se quedan.
-
Y los que se quedan,
luchan.
-
¡Te voy a atrapar,
cabeza de chorlito!
-
Con estos ahorritos...
-
...se va uste' a comprar
un arma.
-
Desde que mamá empezó a
trabajar en casa día y noche...
-
...la guerra ya no
se sentía tan grande.
-
Beto te quiere mucho,
poco o nada.
-
¡Cecilia! Toque de queda,
a su casa.
-
Un ratito más.
-
Angelita, no preocupes
a tu abue. Ya métase.
-
Ándele abuelita,
cinco minutos. Dígale...
-
Adiós.
-
Tú también, Chava.
-
Un día, ahí estaban.
Los gringos.
-
Igualitos como salen
en las películas.
-
¿Quieres chicle?
-
Vamos.
-
Decían que venían
a ayudarnos.
-
¿Quién quiere chicle?
-
¡Don Yeyo!
-
Escupe eso, Chava.
-
- ¡Que lo escupas! ¿No oyes?
- ¿Por qué? Si está muy rico.
-
Porque los que te dieron eso,
son los que están preparando...
-
...a los soldados
para que nos maten.
-
Ya no te sabe tan rico,
¿verdad?
-
Angelita se sacó
el primer lugar en la clase...
-
...y su abuelita la va
a llevar a la playa.
-
- Pero si es una tonta.
- Tú qué sabes?
-
Mucho.
-
Ya quisieras.
-
- Tú también eres una tonta.
- ¡Niños!
-
- Tú más.
- ¡Niños!
-
A dormir.
-
¡Al suelo!
-
¡Ricardito!
-
¡Ricardito!
-
¡Abajo!
-
¡Tío Mario!
-
Ay, Diosito, ¿por qué?
-
¿Por qué?
-
¿Por qué? ¿qué pasó?
-
¡Borracho!
-
¡Despiértate!
-
¡Vete a tu casa! ¡Irresponsable!
¿No te da vergüenza?
-
¡Le voy a decir a tu mamá!
-
¿No les da vergüenza?
-
¡Borrachos, irresponsables!
-
- No tienen vergüenza.
- Dinero para la cruda.
-
¡¿Qué cruda?!
¡Ándale a tu casa!
-
Ahora si no se
ha vendido nada.
-
Lo siento Chavita.
-
¿Te lo quieres robar?
-
- ¿Qué haces ahí? ¡Contesta!
- Estaba jugando.
-
- ¿Con permiso de quién?
- Es que necesito trabajar.
-
- ¿Me quieres quitar el trabajo?
- No.
-
Quédatelo. Es tuyo.
-
¡Te cagaste bicho,
te cagaste!
-
A ver,
¿por qué te gusta manejar?
-
Porque... Puedes ir
a muchos lugares...
-
Pasear por las calles
y ganar mucho dinero.
-
Sí, sobre todo eso.
-
- Y, ¿cuántos años tienes?
- Once.
-
A ver, párate.
-
¿Once meses?
-
Pérate, pérate,
pérate, pérate, pérate.
-
¿Quieres trabajar?
-
Te propongo un trato.
-
Tú gritas, yo cobro
y manejo.
-
Pero si acaso se
te ocurre robarme...
-
...te corto los huevos,
tapón.
-
¡Al centro!
-
¡Al centro!
-
¡Al centro!
-
¿Qué pasó
con los vestidos?
-
¿De dónde sacaste eso?
-
No vendí nada pero conseguí
trabajo en el bus.
-
Para que usted no tenga
que trabajar todo el tiempo.
-
Me debiste haber
preguntado primero, ¿no?
-
¿Puedo?
-
¿Vas a tener cuidado?
-
Y llegas antes del toque
de queda todos los días.
-
Se lo prometo, má.
-
- ¿De dónde sacaste dinero?
- Conseguí trabajo...
-
...soy chofer.
- Ay sí.
-
¿Supiste que a la maestra Sol
le dio un ataque de nervios?
-
- ¿Por qué?
- ¡Por las balaceras!
-
Dicen que la metieron
al manicomio.
-
4... 5... 6... 7... 8.
-
¡Chava! ¡Chava!
-
Los siguientes niños,
¡a formar!
-
Pablo Argueta...
-
...Manuel Ayala...
-
...Antonio Gutiérrez...
-
...Alfredo Argueta...
-
...Mario Sánchez...
-
- ¿Cómo te Ilamas?
- Temo.
-
- ¿Temo qué?
- Morales Morales.
-
- ¡A la fila!
- ¡Pero si sólo tiene diez años!
-
¡Es injusto!
¡Cómo pueden hacerle esto!
-
- ¡Temo! ¡Temo!
- ¡Sargento!
-
¡Sargento!
-
Mario Sánchez...
-
...Arturo Reyes...
-
...Gerber Reyes...
-
...Roberto Olsen...
-
Continúe.
-
...Roberto Olsen...
-
...Bardo Pérez...
-
...Agustín Reyna.
-
¡Rápido!
-
¡Rápido!
-
Deben sentirse orgullosos,
muchachos.
-
Van a ser soldados
como nosotros.
-
Van a defender
a la patria.
-
Sargento...
-
¡Vámonos!
-
¡Pelotón!
-
¡Posiciones!
-
¡De prisa!
-
Paso redoblado.
-
¡Ya!
-
Quiero saber quién dio
la orden para hacer esto.
-
Padre, retírese.
-
Usted preocúpese
por las almas.
-
Hola papito,
¿cómo estuvo la escuela?
-
Sordo...
-
...¿cómo te fue
en la escuela?
-
¿Qué te pasa, papito?
-
¡Contéstame!
-
¿Te pegó alguien?
-
- ¿Te castigó la maestra?
- Se llevaron a Antonio.
-
- ¿A Antonio, quién se lo llevó?
- Los soldados.
-
Se lo llevaron en
un camión... a los demás.
-
También a Temo.
-
¿A Temo?
-
Primero necesitamos sacar
el denominador común.
-
Para eso, multiplicamos
éste por éste:
-
- Tres por cuatro.
- Doce.
-
Muy bien.
-
- Entonces decimos, doce entre tres.
- Cuatro.
-
- 4 x 2
- 8
-
Luego decimos,
12 entre 4
-
Tres.
-
- Tres por una.
- Tres.
-
Si tanto te gusta,
dile anda.
-
¡Ya ve!
-
No seas miedoso.
-
Hola.
-
Hola.
-
Quería saber si... a
lo mejor...
-
Y si quieres
y si puedes...
-
Venir a jugar con Chele,
Marcos, Fito, Ancha y yo.
-
Vamos a lanzar
luciérnagas de papel.
-
- ¿Más fea que una rana?
- Yo no escribí eso.
-
- ¿Ah no? No.
- Entonces, quién.
-
Si quieres, nos vemos
en la tiendita...
-
...de Doña Celia
a las cuatro...
-
Bueno.
-
- Ya vámonos.
- Vámonos, Chava.
-
¡No Ancha! ¡Ancha no!
-
¡Ancha! ¡Ancha!
-
¡Ancha no!
-
Estuvieron divertidas
las luciérnagas de papel.
-
Sí.
-
Bueno... Ya me tengo
que ir.
-
Adiós.
-
¡Ancha ven!
-
Estábamos lanzando
luciérnagas...
-
...y empezó la balacera, y
tuvimos que echarnos a correr.
-
¡Te voy a enseñar
lo que son luciérnagas...
-
...para que aprendas
a llegar temprano!
-
Te sientas a comer.
-
¡Niña apestosa!
-
Ay, hermana pedorra.
-
Perdón má.
-
¡Guácala!
-
¡Fúchila, huele feo!
-
¡Tío Beto!
-
Y entonces mi mamá se
compró la máquina de coser.
-
Y hace ropa todo el tiempo
y yo le ayudo a venderla.
-
Y también le ayudo
con lo del bus.
-
Soy el que cobra
y grita las paradas.
-
A ver,
¿cómo es que gritas?
-
¡Al Centro! ¡Al Centro!
¡Al Centro!
-
Muy bien tachuela.
-
Y como mi mamá siempre
me dice que soy el hombre...
-
...de la casa, cuido
a mi hermanito y a ésta...
-
¡Ay sí, cómo no!
Sobre todo a mí.
-
Me da mucho gusto que seas
tan responsable, tachuelita.
-
¡Papá!
-
Ay, este niño... A todos
los hombres les dice papá.
-
- Y usted, ¿cómo se Ilama, enano?
- Ricardito.
-
Ricardito.
-
Mamá anda preocupada
por ti.
-
No vuelvas a desaparecer
tanto tiempo.
-
No andas en problemas,
¿verdad?
-
Mi hermano me cuida mucho
a mí y un día...
-
...me compró una galleta, pero
se me cayó y se la comieron.
-
¡Chava, los colchones!
-
¡Chava,
Rosita a la cama!
-
¡Shht! Papito, Ya.
-
¡Angelita!
¡Doña Amalia!
-
- ¡Doña Amalia!
- Hija.
-
¡Doña Amalia soy Beto!
-
¡Voy pa'llá!
-
¡Abajo, mierda!
¡Abajo!
-
¡Chava!
-
¡Chava!
-
¡Angelita!
-
¡Hija!
-
Angelita.
-
Agáchate Chava.
-
Agáchate.
-
¡Hija!
-
¡Chava!
-
¿Están bien?
¿Qué pasa?
-
Aquí estoy hija,
contigo.
-
No tengas miedo.
-
Chava, aprieta aquí.
-
Aquí, duro, ¿eh?
-
Kella...
-
...Kella, quédate ahí, no te muevas.
-
¡Angelita!
-
¡Angelita!
Mi niña no me dejes.
-
- Angelita.
- Ayúdenme, por favor.
-
¡Se muere mi hija!
-
¡No te mueras niña!
-
¡Angelita! ¡Angelita!
-
¡Hija!
-
¡Hija!
¡Hija!
-
¡Ay Dios mío!
¡Ayúdame por favor!
-
¡Mi niña!
-
Dios mío.
-
Ay, mi niña
-
Dios mío,
se murió mi niña.
-
Hija, qué tienes.
-
Ayúdame.
-
Ya mami, ya.
-
No toques eso, Beto.
Nos van a matar a todos.
-
Qué triste,
se oye la Iluvia...
-
...en los techos
de cartón.
-
Qué triste
vive mi gente...
-
...en las casas de cartón.
-
Niños color de mi tierra...
-
...con sus mismas cicatrices.
-
Millonarios de lombrices.
-
Mira qué mucho sufrir.
-
Mira que pesa el sufrir.
-
Arriba...
-
...deja la mujer preñada...
-
...abajo está la ciudad...
-
Y se pierde en su maraña.
-
Venga a nosotros tu reino...
-
...y haz Tu voluntad,
en la tierra como en el cielo.
-
Danos hoy nuestro pan
de cada día...
-
...y perdona nuestras ofensas
como también nosotros perdonamos...
-
...a los que nos ofenden.
-
No nos dejes caer en tentación
y líbranos de todo el mal.
-
Dios te salve María,
llena eres de Gracia.
-
El Señor es contigo.
-
Bendita eres entre todas
las mujeres...
-
...y bendito es el fruto
de tu vientre Jesús.
-
Esa bala que mató a Angelita
pudo haber sido de la guerrilla.
-
¿Desde cuándo
estás metido en esto?
-
Desde hace un rato.
-
Vine a preparar una ofensiva para
descoyuntar al ejército, Kella.
-
Es el único lugar que queda
entre la capital...
-
...y la guerrilla
y va a reventar, eh.
-
Se va poner
bien peligroso.
-
Se va a poner mucho peor.
-
Además, Chavita ya va
a cumplir los doce.
-
Hay que sacarlo
lo más pronto posible.
-
Sí...
-
Ustedes también
se los llevan.
-
Morazán y San Vicente
son zonas liberadas.
-
Tendría techo,
tendría comida...
-
...estamos construyendo
escuelas.
-
Lo que él necesita, Beto...
-
...es estar aquí, conmigo.
-
Está muy chiquito.
-
Pero si tú te quedaras
aquí con noso(tros)...
-
Kella... Kella
entiende por favor.
-
El ejército se
lo va a llevar.
-
Por lo menos conmigo
estaría más seguro.
-
Deja que me lo lleve.
-
- ¿Tienes novia?
- Solo una.
-
¿Sólo una?
-
- ¿Cómo se Ilama?
- Cristina María.
-
Es la hija de
la maestra nueva.
-
Es la más bonita
de todas.
-
Mira Chavita, ven.
-
Mira, lo que te voy a decir
es muy importante.
-
Ponme atención.
-
Lo que pasó con Angelita
son cosas que pasan.
-
Y... Chavita, no te voy
a mentir diciendo
-
que todo esto va
a mejorar porque...
-
Porque se va a poner peor
antes de que mejore.
-
¿Me entiendes?
-
Tal vez esto te ayude
a entender mejor...
-
...qué es lo que
está pasando...
-
Busca Radio Venceremos
aquí.
-
Es la estación
de nuestra gente.
-
No siempre está al aire,
entonces tienes que buscarla...
-
...tienes que estar alerta.
-
Pero Chava: Debes tener mucho
cuidado porque está prohibida.
-
Aquí puedes escuchar
la canción que toqué anoche.
-
¿Te gustó?
-
- ¡Ratón!
- ¡Chavita!
-
¿Ya no lo voy a ver, tío?
-
La próxima vez
te llevo conmigo.
-
... desde este instante
comienza a transmitirse...
-
... desde algún lugar
de El Salvador...
-
... Radio Venceremos,
en vivo.
-
¿Cuánto te salió?
-
¡Oye no!
-
¿Y a ti?
-
Yo te pregunté primero.
-
Una...
-
...dos...
-
...¡tres!
- ¡Tres!
-
¿Podemos salir?
-
- ¿Terminaron la tarea?
- Sí.
-
Está bien...
-
...pero acuérdense
que hay toque de queda.
-
Chavita, te la encargo.
¡Hey!
-
Vamos.
-
¡Don Yeyo!
-
Mira...
-
...es Don Yeyo.
-
No habla con nadie más
que con sus bueyes.
-
¿Por qué?
¿No le gusta la gente?
-
Esta canción está prohibida.
-
Mi mamá dice que hay que luchar
para que nada esté prohibido.
-
- Eres bien bonita.
- Y tú más feo que un sapo.
-
Pero también me gustas.
-
¡Malditos!
-
¡Infelices!
-
- ¡Buenas tardes!
- ¡Buenas tardes!
-
Con permiso.
-
¡Padre!
-
¡SuéItenlas!
-
- ¡SuéIten... -!
- ¡SuéItenlas!
-
- ¡SuéItenlas!
- ¡Quítese!
-
¡Quítese!
-
¡Ayúdennos!
-
¡Padre!
-
¡Padre!
-
- ¡Padre!
- ¿Y ese milagro?
-
¿Está bien?
-
Sí Chava, gracias.
-
Los soldados le pegaron
muy fuerte.
-
Hay dolores más fuertes
que éste.
-
¿Y a las niñas?
-
¿También las reclutaron?
-
No.
-
¿Las van a matar?
-
Toma,
-
...ayúdame a encender
los cirios de allá atrás.
-
¡No, no, no, ni le muevas!
-
¡Apúrate!
-
- ¡A ver a qué horas!
- ¡Apúrate!
-
¡Míralo! ¿Qué tienes?
¿Estás loco?
-
¡Sino tíralo!
-
¡Mira nomás!
¡Los gritones ni me gustan!
-
¿Qué? ¿No te fijaste
que no tenía gasolina?
-
¿Qué? ¿Venía yo manejando?
-
¿Puedo?
-
Pareces niña con eso.
-
¿Qué tienes, papito?
-
¿Qué pasó?
-
Es que... Estábamos
trabajando y...
-
El camión se quedó sin,
sin gasolina...
-
...entonces el niño quiso sacar
así de jalón con la manguera...
-
¡Viejo irresponsable!
-
¡Papá!
-
¡Qué papá ni
que ocho cuartos!
-
¡Lárguese de aquí!
-
¡Y no lo quiero ver
nunca más cerca de mi hijo!
-
¡Váyase!
-
... en las casas de cartón.
-
... viene bajando el obrero...
-
Apaga eso. ¡Apágalo!
-
... mira que pesa el sufrir...
-
... abajo esta la ciudad
y se pierde...
-
... en su maraña.
-
Esa canción está prohibida,
padre.
-
Nada está prohibido para Dios.
-
Le voy a pedir que la quite,
con su perdón.
-
Pues si quieren
quítenla ustedes.
-
¡Pero me dejan aquí
las armas!
-
Nadie puede entrar
armado a la casa del Señor.
-
... niños color de mi tierra...
-
¿Qué mierda tienes
en la cabeza?
-
¿Y ahora yo qué hice?
-
Dame el radio.
-
¿Por qué? Yo no hice nada.
-
No me mientas.
-
Perdóneme mami,
no me fijé...
-
...ya no lo vuelvo a hacer.
-
Claro que no lo vas
a volver a hacer...
-
...porque ahorita mismo
me vas a dar ese radio.
-
No me fijé... Ya no
Io vuelvo a hacer.
-
Perdóneme.
-
Dame ese radio.
-
¡Por úItima vez,
dame ese radio!
-
Pero no te quedes
nomás ahí sentado.
-
¡Ayúdame delicadito!
-
Y no puje.
-
Su mamá sabe por qué
le dice las cosas.
-
¿Y usté' por qué siempre
tiene que estar de su lado?
-
Porque aquí sóIo hay un lado.
-
Y lo que pasa es que
tú eres un delicadito, Chava.
-
No más oyes algo que no
te gusta y sales corriendo.
-
Para venir con usted.
-
Pero montado en tu bus...
-
...no te das cuenta
del peligro.
-
Los tiempos se están
poniendo muy difíciles.
-
Y tú todavía no
sabes cuidarte.
-
Así que tienes
que obedecer.
-
- ¿Le puedo preguntar una cosa?
- Claro.
-
- ¿Usted reza?
- ¿Cómo que si rezo?
-
¿Reza para que se
acabe la guerra?
-
Para eso no...
-
Esta maldita guerra no se
va a acabar con rezos nunca.
-
¿Nunca?
-
¿Hay algún voluntario que
quiera leer su poema?
-
- A ver tú, Yanira.
- ¿Puedo ir al baño, maestra?
-
Sal calladita,
no tardes.
-
A ver tú Chele.
-
"Ningún niño de mi escuela
quiere ir a pelear."
-
"No les gusta la guerra
porque prefieren jugar."
-
"Los soldados los buscan...
-
... pues los quieren reclutar."
-
Pero a mí y a mis amigos
nunca nos van a encontrar.
-
¿Qué pasa, Yanira?
-
¡Chava!
-
¡Chava, agáchate!
-
¡No disparen!
-
¡Hay niños en la escuela!
-
¡No!
-
¡No hijo!
-
¡Chava! ¡Chava!
¡Chava! ¡Estás loco!
-
¡Regresa!
-
¡Chava!
-
¡Mamá!
-
¡Culero! Tú los dejaste
subir al campanario.
-
Ese francotirador
hijo de puta...
-
...se cargó a tres
de mis soldados.
-
Hermanos...
-
...hoy no va a haber misa...
-
Pero quiero hablarles
a ustedes desde aquí...
-
...desde la calle.
-
Quiero hablar para todos...
-
...porque la palabra de
Dios Nuestro Señor...
-
...también debe
ser escuchada...
-
...por aquellos que no han
encontrado la Gracia dentro de sí.
-
Y, ¿qué es la Gracia hermanos?
-
La Gracia es la presencia
de lo divino en cada uno...
-
...de nuestros actos...
-
Miren a su alrededor.
-
Las caras de nuestros niños
han perdido la inocencia...
-
...de su espíritu...
-
...en su lugar sóIo
encontramos el miedo...
-
Porque nuestros niños han perdido
la esperanza de sobrevivir.
-
Los escépticos dicen:
-
"Si Dios existiera
no habría guerras".
-
Y yo les contesto:
-
Si los hombres obedecieran
las leyes de Dios...
-
...entonces no habría guerras.
-
Porque Dios Nuestro Señor...
-
...le ha dado al hombre
el privilegio y el derecho...
-
...de vivir la Gracia...
-
...o por el contrario de
provocar la desgracia.
-
Y les aseguro hermanos, que cuando
se vive en la Gracia de Dios...
-
...no existe la guerra.
-
Sin embargo aquellos
que ignoran...
-
...su propia naturaleza
divina...
-
...buscan sóIo satisfacerse
despojando...
-
...humillando y asesinando
a sus semejantes.
-
Hermanos, es el momento
de que alcemos...
-
...nuestra voz contra ellos...
-
...de que defendamos nuestro
principio de vivir...
-
...y que opongamos nuestra
fuerza a la fuerza de la muerte.
-
Hoy hermanos, ya no
basta con rezar.
-
La escuela, la cerraron
para siempre.
-
Ancha apúrate,
camina rápido.
-
Como nuestro pueblo
estaba entre la guerrilla...
-
... y el ejército...
-
... mamá decidió que nos
fuéramos a vivir...
-
... al otro lado
del río.
-
Porque ahí era más seguro.
-
¡Abuelita Mamatoya!
-
¡Niños!
-
¡No, no, Ancha, Ancha!
La mesa.
-
Me gustó mucho mi casa.
-
Ajá.
-
Aviéntame uno.
-
Yo también quiero uno.
Por favor.
-
¡Chava!
-
¡Cáchalo!
-
¡Ves, ni uno!
-
¡Ancha!
-
Ancha casi le pegas.
-
¡Ya lo tuviste
un buen rato!
-
Queremos escuchar
Radio Venceremos.
-
¡Fito! Shhh.
-
¡Qué pasó tapón!
-
- ¿Cuándo regresas a trabajar?
- ¡Cuando crezca!
-
¡No pus ya estuvo que
no regresaste nunca!
-
¿Adónde vas?
-
¡Órale, pus vámonos!
-
¡Se te va a acabar
la gasolina, tapón!
-
... no me divierto con nada.
-
No puedo leer ni escribir.
-
Me hace falta su mirada.
-
¿Qué te pasa, chiquillo
qué te pasa?
-
¡CáIlense niños!
-
Me dicen en la escuela,
y me preguntan en mi casa...
-
Desde ahora lo supe
de repente...
-
... cuando oí pasar la lista
y ella no estuvo presente.
-
La de la mochila azul...
-
... la de ojitos
dormilones...
-
... me dejó gran inquietud
y bajas calificaciones.
-
¡Súper bomba!
-
¡Súper bomba!
-
¡A ver quién llega
más lejos!
-
¡Antonio!
¿Qué pasó?
-
- ¿Dónde andabas?
- ¿Qué haces aquí?
-
Pues aquí nomás mírenme.
-
Como el santo Nepomuceno...
-
...cada día... Más bueno.
-
- ¡Ay sí!
- ¿Qué se siente ser soldado?
-
- ¿Quieres jugar?
- Vente, vamos a jugar.
-
Vente, vámonos.
¿Sabes hacer patitos de...?
-
Vente.
-
Cuando llegamos al cuartel
éramos más de 40...
-
La mayoría de 13 y 14.
-
Yo era uno de
los más chicos...
-
...pero aprendí muy rápido
porque nuestro instructor...
-
...era un gringo que
había estado en Vietnam.
-
Nos enseñó a
disparar... y a emboscar.
-
La semana pasada emboscamos
a un grupo de guerrilleros...
-
...hijos de puta y yo fui
el que los apresó con ésta...
-
Y a ustedes ya mero les toca...
-
Porque están reclutando
a todos, ¿eh?
-
Grandes...
-
...y chicos.
-
O qué, ¿siguen siendo un
puñadito de niños culeros?
-
- ¡Yo no soy culero!
- ¡Ni yo tampoco!
-
¡Pinches culeros!
-
No nos digas así.
-
¡Ya los veo Ilorando
y meándose en los pantalones...
-
...cuando vengan a reclutarlos,
como los culeros que son.
-
¡Culeros!
-
¡Culeros!
-
¡Chavitita!
-
No te asustes.
Soy yo, Ratón.
-
Oí tiros anoche...
-
¿Eran ustedes?
-
- Se limpió la zona.
- ¿Y mi tío Beto?
-
Te traigo un recado
de éI.
-
El ejército va a reclutar
mañana, avísale a tus amigos.
-
Y escóndanse.
-
Bueno, choferes, ya saben.
Uno en cada casa.
-
¡Vámonos!
-
¡Dónde están los chamacos,
señora!
-
No los he visto desde
la mañana, señor...
-
¡Dónde están los niños!
-
- ¡Sargento, no hay niños!
- ¡Siga buscando soldado!
-
Ocho...
-
...nueve...
-
...diez...
-
...once...
-
...doce.
-
¡Once!
-
¿Ya lo contamos bien?
Chava cumple once.
-
Éstas son las mañanitas
que cantaba el Rey David.
-
Hoy por ser día de tu santo...
-
... te las cantamos así.
-
Despierta, Chava despierta...
-
... mira que ya amaneció.
-
Y a los pajarillos...
-
¡Chava!
-
¡Espera Chava!
-
¡Chava!
-
¡Chava!
-
Corres bien rápido.
-
Toma. Ábrelo.
-
Son pilas para tu radio...
-
...sapo.
-
Gracias.
-
¡Tú no vas a entrar aquí!
-
- ¡Ya todos se los llevaron!
- Ya lárguense.
-
¡Ya te diste cuenta
que no hay niños!
-
Alguien anda de bocón.
-
¡Chava!
-
¡Chava!
-
¿Qué pasó?
-
¡Padre! ¡Padre!
-
¡Van a matar a Ratón!
¡Ayúdelo!
-
¡Se lo llevaron al río!
-
- ¿Y el Padre?
- Se lo llevaron los soldados... ayer.
-
Don Yeyo.
-
Chava... ¿Supieron que
el gordo de Marcos se fue?
-
- ¿Adónde?
- Pues a la guerrilla.
-
- ¿Cuándo?
- No sé.
-
- Chava!
- ¿Qué?
-
¿Y si nos vamos también?
-
- ¿A la guerrilla?
- Pues, qué otra...
-
Hay que contarlas, ¿va?
-
Mira hay una.
-
Ahí hay otra.
-
Ahí nos quedábamos
toda la noche.
-
Una vez conté hasta
230 mil estrellas.
-
Quería contárselo
a Cristina Maria.
-
Primero pensé que me
había equivocado de calle.
-
Que ésa no era su casa.
-
¡Hey niño! ¡Adónde vas!
¡Ven, vámonos!
-
¡Déjeme!
¡Déjame!
-
¡Chava! ¡Chava!
-
Tengo razones...
-
... para buscarte.
-
Tengo necesidad de verte...
-
... de oírte, de hablarte.
-
Tengo razones
para esperarte...
-
... porque no creo...
-
... que haya nadie en
el mundo a quien ame.
-
Tengo razones,
razones de sobra...
-
... para pedirle al viento
que vuelvas aunque...
-
... seas como una sombra.
-
¡Tengo razones...
-
... para no quererte olvidar.
-
Porque el trocito
de felicidad...
-
... fuiste tu quien
me lo dio a probar.
-
- Chava, vámonos.
- Ya sabemos dónde.
-
Hay que llegar hasta
el cerro de la Carita.
-
Eso nos dijo la mamá
del gordo.
-
¡Apaguen esa luz y cáIlense!
-
- ¿Quién más viene con ustedes?
- Nadie.
-
¡CáIlense!
¡Avancen detrás de mí!
-
¡Acuéstense ahí! Mañana veremos
qué hacemos con ustedes.
-
¡Chele, Chava!
-
Shhhh... ¡Silencio!
Nombres aquí no.
-
- ¿Traen algo de comer?
- Sí, galletas.
-
¡A callar!
-
¡Duérmanse!
-
- ¿Quieres una?
- Sí.
-
¡Todos con las manos
en la cabeza!
-
¡Despierta mamita!
¡Despierta!
-
¿Qué pasa?
-
Tenemos que irnos. Viene
la tropa incendiando todo.
-
Ya están cerca.
-
Vístete, rápido.
-
- ¿Y adónde vamos?
- No lo sé.
-
Por lo pronto con la gente
al pueblo al centro, ¡vamos!
-
- Mamita, despierta.
- Despierta, despierta Ricardito...
-
- ¿Y tu hermano?
- No sé.
-
- ¿Adónde vamos, abue?
- Tenemos que salir.
-
- ¡Chava!
- Tenemos que salir rápido.
-
- ¿Por qué? ¿Por los balazos?
- Por los balazos, mi vida...
-
¡Chava! ¡Chava!
-
Las actas de nacimiento,
¿dónde están?
-
Tú pon aquí toda la ropa
de tus hermanos y la tuya.
-
¡No está su ropa!
-
¡Tampoco sus zapatos buenos!
-
¿Adónde se fue mi hermano?
-
Vámonos...
-
Tengo mucha sed y...
-
... me duelen los pies.
-
Tengo piedras en el zapato.
-
¡Soldados... Asesinos!
-
¡Inés, toma la máquina!
¡Voy a arriba a ver si lo veo!
-
¡Soldado ve a tu casa!
-
¡La está quemando
un soldado como tú!
-
¡Asesinos! ¡Asesinos!
-
¡Chava!
-
¡Chava!
-
¿Mami?
-
Vámonos de aquí.
-
Aquí van los documentos.
-
No quería que vendiera
su máquina de coser.
-
No te preocupes
por nosotros.
-
Prométeme que vas
a ser fuerte.
-
- ¡Prométemelo!
- Se lo prometo.
-
- Adiós hermana pedorra.
- Nos vemos.
-
Cuídese.
-
¡Adiós hermanito,
te voy a extrañar!
-
¡Cuídate!
-
Ahora sí que voy a ser
el hombre de la casa.
-
Yo no me quiero ir
a los Estados Unidos.
-
Pero si me quedo
me van a acabar matando.
-
Pero voy a regresar.
-
Porque le prometí a mama
sacar a Ricardito...
-
... antes de que cumpla
los 12.
-
Esta historia la podían
haber contado Fito o Chele...
-
... o Cristina María.
-
Pero me tocó a mí.
-
Es para ellos.