Cómo podría la IA componer una banda sonora personalizada para nuestras vidas

Conozcamos a AIVA, una inteligencia artificial que ha sido entrenada en el arte de componer música leyendo más de 30 000 de las mejores piezas musicales de la historia. En esta fascinante charla y demostración, Pierre Barreau nos muestra piezas compuestas por AIVA y comparte su sueño: crear bandas sonoras personalizadas en vivo basadas en nuestras personalidades y estados de ánimo.

Hace unos dos años, vi
una película llamada "Her"

donde aparece Samantha,
una forma superinteligente de IA

que no puede tomar forma física.

Como no puede aparecer en fotografías,

Samantha decide escribir
una pieza musical

que capture un momento de su vida,
tal y como lo haría una fotografía.

Como músico e ingeniero
criado en una familia de artistas,

me pareció que esta idea de fotos
musicales era muy poderosa.

Así que decidí crear
un compositor con IA.

Su nombre es AIVA,
y es una inteligencia artificial

que ha aprendido el arte
de componer música

leyendo más de 30 000 partituras,
de las mejores de la historia.

Así es como el algoritmo ve la partitura

representada en forma de matriz,

y así es como 30 000 partituras,

escritas por compositores
como Mozart o Beethoven,

se ven en una sola imagen.

Utilizando redes neuronales profundas,
AIVA busca patrones en las partituras.

A partir de algunas barras
de música ya existente,

deduce qué notas deberían seguir
a continuación en esas pistas.

Una vez que AIVA
perfecciona esas predicciones,

puede construir una serie
de reglas matemáticas

para ese estilo de música

y crear sus propias
composiciones originales.

En cierto modo, así es como los humanos
componemos música también.

Es un proceso de ensayo y error,

donde no necesariamente
encontramos la nota correcta cada vez.

Pero nos podemos autocorregir,

ya sea con nuestro oído musical
o nuestro conocimiento musical.

Pero para AIVA, este proceso
que lleva años y años de aprendizaje,

décadas de dedicación
para un artista, músico y compositor,

se reduce a tan solo un par de horas.

Pero la música también
es un arte muy subjetivo

y necesitábamos enseñarle a AIVA

a componer la música correcta
para la persona indicada,

porque los gustos son distintos.

Así que le mostramos al algoritmo
más de 30 etiquetas de categoría distintas

para cada partitura en la base de datos.

Esas categoría son,
por ejemplo, el estado de ánimo,

la densidad de las notas o el estilo
de composición de la pieza,

o la época en que fue escrita.

Con todos estos datos,

AIVA puede responder
a requerimientos muy precisos.

Como los que tuvimos
hace poco en un proyecto

donde nos encargaron crear una pieza

que evocara la banda sonora
de una película de ciencia ficción.

La pieza que se creó
se titula "Entre las estrellas"

y fue grabada con la Orquesta
CMG de Hollywood,

bajo la dirección del gran John Beal,

y esta es la grabación,
con música creada por AIVA.

(Música)

(Música finaliza)

¿Qué les parece?

(Aplausos)

Gracias.

Como ven, la IA puede crear
piezas de música preciosas,

y lo mejor es que los humanos
podemos darles vida.

No es la primera vez en la historia

que la tecnología potencia
la creatividad humana.

Las películas mudas casi siempre
utilizaban música en vivo

para mejorar la experiencia.

Pero el problema con la música en vivo
es que no se podía recrear.

Es muy difícil tocar una sinfonía
completa en un teatro pequeño,

y es muy difícil hacerlo
en todos los teatros del mundo.

Así que cuando se inventó
la grabación musical,

los creadores de contenido y cineastas,

pudieron tener música
pregrabada y original

hecha a la medida de cada
escena de sus historias.

Y eso potenció
notablemente la creatividad.

Hace dos años y medio,
cuando vi la película "Her",

pensé que la música personalizada

sería el siguiente gran cambio en el modo
en que creamos y consumimos música.

Porque hoy en día tenemos contenido
interactivo, como los videojuegos,

que tienen cientos de horas
de partidas de juego interactivas,

pero tan solo dos horas
de música, en promedio.

Esto que significa que la música se repite
una y otra y no es muy envolvente.

Estamos trabajando
para que la IA pueda componer

cientos de horas de música personalizada

para esos casos en que la creatividad
humana no se puede llevar a gran escala.

Y no queremos esto solo para los juegos.

Beethoven compuso la pieza
"Para Elisa" en honor a su amada.

Imaginen si pudiéramos
revivir a Beethoven,

si estuviese sentado a nuestro lado,
componiendo una pieza

para nuestra personalidad
y nuestra historia de vida.

O imaginen si Martin Luther King
hubiese tenido un compositor con IA.

Entonces recordaríamos

"Tengo un sueño" no sólo
como un gran discurso

sino como una pieza musical,
parte de nuestra historia,

que plasma los ideales del Dr. King.

Y esta es nuestra expectativa con AIVA:

personalizar la música
para que cada uno de Uds.

y cada persona en el mundo

tenga acceso a una banda
sonora personalizada,

basada en sus historias
y sus personalidades.

Este momento que compartimos en TED
es ahora parte de nuestra historia.

Y nos pareció apropiado que AIVA
compusiera una pieza para este momento.

Y eso fue exactamente lo que hicimos.

Con mi equipo programamos a AIVA
con el estilo de la melodía de TED,

y con música que nos hace sentir
admiración y asombro.

El resultado es una pieza
que llamamos "La era del asombro".

No necesitamos IA para elegirla.

(Risas)

Y no podría estar más
orgulloso de mostrársela,

así que, si es posible,
cierren los ojos y disfruten.

Muchas gracias.

(Música)

[La era del asombro,
compuesta por AIVA]

(Fin de la música)

Esto ha sido para Uds.

Gracias.

(Aplausos)