-
Así es como a veces la vida funciona.
-
Es la ley de Murphy.
-
Cuando las cosas van mal, siempre parece que ocurren todas de repente y se apilan una encima de la otra.
-
Y a veces es bastante fácil sentirse destruido.
-
Cuando te enfrentas con todos esos problemas y desafíos y todos te golpean al mismo tiempo.
-
Pero déjame decirte que eso no significa
-
que debes rendirte.
-
De hecho, significa lo opuesto.
-
Significa que es momento de luchar más duro, de cavar hondo.
-
Significa que es hora de ir a la guerra.
-
Cuando sientas que debes rendirte, no lo hagas.
-
Cuando estás pensando en rendirte, no lo hagas.
-
Cuando parece que no lo vas a lograr, sigue adelante.
-
Cuando te dicen "tu no puedes hacerlo"
-
¿Quienes son ellos?
-
Cuando te dicen "no lo lograrás"
-
No les creas, hermano. Tú debes ser implacable.
-
¿Cuál es el mayor problema?
-
¿Qué es lo que causa mayor estrés, la familia?
-
Okey, siéntalos en una mesa. Explícales tu situación actual.
-
Se franco, se honesto
-
y luego dales un plan simple de cómo vas a poner todas las cosas en su lugar.
-
No les mientas, diles la verdad.
-
Y luego así, comienzas.
-
Y les diré ahora mismo, no será fácil.
-
Va a ser difícil, porque la vida es dura. De eso se trata la vida.
-
Y estos desafíos, estos desafíos que te encuentras
-
van a hacer lo imposible para derrumbarte.
-
No se lo permitas.
-
Ponte de pie, cava profundo.
-
Alinea esos problemas y confróntalos, enfréntalos, lucha contra ellos.
-
No les permitas que te tiren abajo.
-
De hecho,
-
de hecho, permite que esos desafíos te levanten, deja que te eleven.
-
Permite que sus demandas y pruebas te hagan más fuerte.
-
Permite que la adversidad que enfrentas hoy
-
te convierta en una mejor persona mañana.
-
Así que, en el futuro
-
mirarás atrás a estos problemas y les dirás "gracias"
-
"Tú me hiciste fuerte"
-
-