No: 309 2. Bölüm

- Onur Sarihan, el dueño de este lugar.

- ¿Estaba acordado? ¿Cómo se lo anuncio al señor?

- No

- Ahora es necesario un acuerdo por adelantado.

No, no estaba acordado, pero necesitamos verlo por un asunto muy importante.

- Señora, si no acordaron una cita previamente él no las podrá atender.

- Necesito verlo. Por favor dígale que vino Songul Yenilmez.

- Songul Yenilmez.

- Es mi nombre, pero debemos verlo. ¿En qué piso esta su oficina?

- Mamá... - Señora...

- Ningún "Señora".

- Mamá, por favor, estas haciendo el ridículo.

- Onur Sarihan. - Discúlpenos.

- Onur Sarihan! Tengo que verlo. No me voy de acá hasta que lo vea.

- Mamá, por favor! No, mamá!

- ¿De qué te quejas? - Discúlpenos.

- Mamá no grites. No me hagas esto otra vez, que vergüenza.

- Está bien. Onur Sarihan!

- Mamá, por favor no hagas esto. - Señora, por favor no grite.

- Mamá ella se va a encargar. - ¿Tú crees? - Disculpe.

- ¿Dónde está?! - Mamá!

- Cállate! Onur Sarihan!

- Señora... - Mamá!

- No me iré hasta que vea a Onur Sarihan! No me voy! - Mamá, ¿qué estas haciendo? - Onur Sarihan!

- Mamá nos estas ridiculizando.

- ¿Qué esta pasando aquí?

- Señor Onur. Estas señoritas quieren verlo, pero no me escuchan...

- ¿Tú eres el gran Onur? - Sí, soy yo.

- Y, ¿quién es usted señora?

- Yo soy la madre de Lale.

- ¿Lale?

- Hola

EPISODIO 2

- Lale tiene algo muy importante que decirle.

¿No es eso cierto Lale?

- ¿Podemos hablar?

- Por supuesto, vamos a mi oficina.

- Ese es el lugar indicado. - Mamá, ¿puedo hablar con él a solas?

- ¿Vas a poder? - Si

- Ojalá.

Claro, cariño.

- Bueno, te escucho. ¿Qué es eso tan importante?

¿No vas a decir nada?

- Estoy embarazada.

- ¿Embarazada?

- Si.

- ¿Qué me has hecho? No recuerdo nada.

Te lo juro, si me has hecho algo... Dime inmediatamente!

- ¿Ese niño es mío? ¿Estas segura?

- Por supuesto que estoy segura. No hay otra manera. Después de ti no vi a nadie.

- Esta bien, si tu lo dices.

- Señora, ¿qué esta haciendo?

Mire, se lo advierto una vez más. Si no va al lobby haré que la saquen.

- Niña, yo me voy, pero no podré escuchar nada desde allá. ¿Cómo voy a saber lo que están hablando?

- Señora, por favor, qué puede hacer... - Aléjate.

- Para mí también fue una sorpresa. Una desagradable sorpresa.

Pero tu dijiste que entre nosotros no había pasado nada.

- Todo lo relacionado con esa noche fue un misterio para mí.

Pero tu dijiste que no bebías alcohol.

Pero bueno, lo que esta hecho, hecho esta.

No tiene sentido seguir discutiendo eso.

Estoy listo para todo lo que se espera de mí.

- ¿De verdad?

- De verdad.

Llamaremos a un doctor y haremos todo lo que sea necesario.

- Pero... ¿qué quieres decir con "todo lo sea necesario"?

- Todo lo que se necesita para el aborto.

Porque no va a nacer, ¿verdad?

- El bebé tiene tres meses.

- ¿Qué quieres decir con eso?

- Quiero decir que es muy tarde para eso.

- ¿Tarde? O es que tu esperaste para que sea tarde.

- No entiendo. - ¿Qué no se entiende?

Todo esta claro. ¿Crees que soy idiota?

Por qué tanto tiempo sin decir que estas embarazada.

- Mira, ni lo pienses, es que no lo sabía.

- No sabias que estabas... por supuesto. La excusa lista, perfecto.

¿Qué quieres lograr con esto? ¿Me quieres sacar dinero?

- Dios, ¿de qué estas hablando? - Mamá!

¿Qué estas haciendo, mamá? - ¿ Qué dinero?

Y tú no interfieras!

Primero engañaste a mi hija, la dejas embarazada, y ahora la insultas?

- Su hija esta en edad para que pueda ser engañada, senora?

Cálmese, por favor. Nadie la engañó.

- Cuando Onur nos vea va a estar muy sorprendido.

- Pienso que vinimos en vano.

Onur no va a dejar el trabajo para ir de compras para la boda.

Además, no lo podemos culpar. Es ridículo ir de compras con tal grupo.

- Y, ¿qué es ridículo, querida?

- Ella no quiso decir eso, tía Ismet. Ella quería que no se cansara tía, por eso.

- Mi nuera tan razonable...

- Mamá. - Querida.

- No lo voy a aceptar! Te tienes que casar con mi hija!

- ¿De qué estas hablando? ¿Casarnos? Yo ya estoy comprometido.

- Que bien! Que bueno, ¿estás jugando?

- ¿Qué es todo ese ruido? ¿Quién esta adentro? ¿Qué pasa?

- Señora Ismet, yo no entiendo nada, Si quiere, por favor vea.

- Yo voy a ver.

Shebna, tome asiento.

- Esta bien, esta bien, vayan. - Gracias.

- Mamá, por favor.

- ¿Onur? - Mamá.

- ¿Qué esta pasando? ¿Hay algún problema?

- No, abuela.

- Tía, déjeme besarle la mano.

Estamos apegados a sus costumbres, tradiciones y abuelas.

- Perdón, ¿quién eres? - Songul, la madre de Lale, y ¿usted?

- La madre de Onur, Yildyz.

- Oh, encantada de conocerla.

En realidad, soy la abuela de su nieto, que va a nacer.

- ¿Nieto? - Si.

- Entonces, ¿su hija está embarazada de mi nieto?

- Si...

- Onur!

Dios! Esto quiere decir que voy a ser abuela?

Gracias, Dios! Gracias, Dios!

- Mamá, ¿qué estas diciendo? Algo esta mal conmigo...

- Olvídalo!

- Onur, hijo, esta mujer esta mintiendo ¿verdad? Dime que esta mintiendo.

Dios, que sucede.

- Mamá, ya vamos. - No, espera un minuto.

Mi hija está en su tercer mes de embarazo. No queremos que la boda se haga con el estómago visible.

Somos una familia grande, un grupo de amigos...

- Está claro, está claro. - ¿Qué quieres decir con "está claro"? ¿A qué te refieres?

- Quiero decir que, serán las tradiciones y costumbres, pero mi hijo no se va a casar con su hija.

No entiendo por qué esperaron tres meses. Su objetivo es muy claro.

Quieres arrimar a tu hija con el mío.

- Yildyz! - Cómo que arrimar?

¿Quién crees que es mi hija?

- Señora, ella no quiso decir eso. - Si, eso es lo que quería decir mamá.

Eso es lo que quería decir. ¿Cómo sabemos que este bebé es de mi hijo?

- Estoy de acuerdo en probar que este niño es de su hijo!

Déjalos hacer todo lo que necesitan.

- Quiero una prueba de ADN. - ¿Qué? - ADN.

- ¿Qué es eso? - Un estudio genético.

- De acuerdo. No sé lo que es, pero estamos de acuerdo.

Haremos lo que sea para probar que es verdad.

- Mañana a las 8:00 nos veremos en el hospital.

Por supuesto, si no vienen es porque no quieren que la verdad salga a la luz.

- Claro que iremos.

- Por favor perdóneme, pero nuestra posición es bien conocida por todos.

- Y nosotras no vivimos en un árbol, querida señora!

- Ella está muy frustrada, perdón. Vamos.

- Mamá, ¿quiénes son ellas? ¿Qué hacer Onur con esta clase de gente?

- ¿Cómo podría saberlo, hija?

- Dios, espero que no sean pariente, para así no relacionarnos con gente así.

- Por favor, no.

- ¿Qué? Vamos. Nada de "mamá".

- ¿De dónde conozco a esta chica?

- Esto no nos esta pasando a nosotros.

- Ay, Pelinsu y su mamá están afuera esperando por nosotros.

- Mamá, ¿qué hacen ellas aquí?

- Queríamos ir de compras para la boda y decidimos sorprenderte.

Resulta que el que nos dio la sorpresa fuiste tu.

Mamá!

Vamos, pasen.

- Gusto en verlas.

- Gracias. Onur, querido, ¿quiénes eran las que salieron de tu oficina?

- Ellas...

- Ellas son parientes del chauffer de Onur, Samet. Estaban preguntando por trabajo.

- ¿Por qué gritaban?

- Esa mujer, resulta ser que está un poco loca. Son cosas que le pasan.

- Es entendible. Pidiéndote trabajo.

Como si no tuvieras algo más que hacer. Aún así lidias con ellas?

- Niña, ellas vinieron a...

- Ay, mamá, no es necesario tocar ese tema, ¿verdad, mamá? Era mejor no venir.

Onur tiene mucho que hacer.

Llamé a Fikret. Vendrán de invitadas.

Pueden ayudar. Tal vez ir juntas a hacer las compras?

- De acuerdo. Cuando quieras. ¿Cuándo? ¿Mañana temprano?

- Ok, puede ser. Pero necesitamos ir en la mañana al hospital. Quizás más tarde.

- Abuela, ¿te pasa algo? ¿Estas enferma?

- Todo bien. Mi salud esta muy bien, gracias a Dios!

En nuestra familia, las mujeres no morimos antes de los 100 años. No esperes por eso.

- Dios no lo permita, ¿qué son esas palabras? Vamos.

- Llamaremos más tarde. - Bien, querida.

- Nos vemos mamá. Adiós, abuela.

Mi alma.

- Nos vemos más tarde. - Adiós.

- Hasta que no estemos seguros de los resultados, ni una palabra a Pelinsu o a tu padre. ¿Esta bien, Onur?

- Mamá, también te lo pido. No es necesario preocupar a nadie, ¿esta bien?

- Está bien.

UNA SEMANA DESPUÉS

- Mamá. entonces vas al hospital para los resultados.

- Ah, algo pasa.

- Mamá, y si el padre del bebé no es Onur Sarihan, ¿entonces qué?

- Qué más!

Has perdido completamente la cabeza! ¿Qué te pasa? Inventas escenarios pesimistas.

- Hermana! Estas diciendo cualquier cosa. ¿De quién más podría ser?

Nuestra hermana no nos mentiría, ¿verdad, mamá?

- Ay, ¿cómo saberlo? Estoy pensando en las diferentes posibilidades!

Pero cuando ganas la lotería, tendrías suerte varias veces.

Solo hasta ahora, no lo puedo creer!

Su suerte viene a nosotras y nos sonríe?

El destino, ni una sola vez, le ha sonreído a esta familia.

Ahora se ríe de nosotras. ¿Creen que es normal?

- Lo hiciste. Lograste hacer que me salgan arrugas en el cuello, hija. Felicidades.

- Entonces, ¿innecesariamente dejé el trabajo?

- ¿Qué?! - ¿Qué? ¿Qué has hecho?

- Si, mamá. Renuncié al trabajo.

Mientras la familia de mi cuñado son los Sarihan, ¿voy a trabajar por una miseria?

- Hija, ¿qué has hecho? Dios! Éramos nostras nada más, y ahora tenemos tres préstamos por pagar?

- Bueno, si, era mejor si esperara a casarme, pero...

Hermana, todos mis planes! ¿Estoy soñando innecesariamente?

- No apuntes a sueños tan altos, que te caerá con un estallido.

A la final que vergüenza. Lo hiciste!

Voy a hablar con ella.

- ¿Qué hice?!

Abre la boca, bien, abre.

- Princesa, ¿dormiste bien?

Mira, mamá te trajo el desayuno. - Mamá, no tenías que hacerlo.

Lo preparé con gusto.

Me voy a sentar a tu lado. Oh si.

- Come, come, esta muy bueno. - Tengo mucha hambre.

- Escucha lo que tengo que decir. Aquí en frente de mí...

¿Hay algo que me estés ocultando? ¿Algo de lo que te puedas avergonzar?

No hay nada que no puedas decirme, ¿verdad?

- No mamá. ¿Por qué estas preguntas tan de repente?

- Hoy obtenemos los resultados. No tienes ninguna duda, ¿verdad?

- No mamá, estoy segura.

- ¿Esto quiere decir que no pensaste: "Voy a decir que es Onur Saryhan, porque es rico", solo para no hacerme enojar?

Tienes todo el derecho de pensarlo.

- No mamá, no he pensado nada de eso.

- Tan ingenua! Eres una buena chica!

La hija de corazón puro... Vamos, come, come. Come y nos vamos.

- Buenos días, hijo.

- Buenos días, mamá.

- Te estuvimos esperando para desayunar, pero no viniste.

- No quise comer.

- Ah, mi hijo! Estas tenso, es obvio.

- No pude dormir.

- Yo tampoco pude dormir en toda la noche.

Por supuesto, si decidimos no contarle a tu padre para confirmar, pero ahora no me gusta porque no puedo hablarle.

No nada. Hoy, todo va a ser revelado. Estoy segura que ese niño no es tuyo, Onur.

Inventaron esta mentira solo para quitarnos dinero. Esa madre de ella...

- Eso espero, mamá, pero... No importa.

Vamos a ver los resultados de la prueba de paternidad.

- Estoy lista, hijo.

Y, tu abuela quiere estar ahí también.

Claro, como no confía en nosotros. Eso pasó el día que nos enteramos. Nada.

- También estoy listo mamá.

- Mamá, te lo advierto, después de escuchar el resultado, ni te atrevas a comportarte extraño.

Nada de danza del vientre ni nada similar.

- Mi Dios! ¿Cómo se te ocurre?

Como sea, mamá. Solo te advierto.

- Seguro.

Pero tengo una conversación pendiente con esa señora.

Porque el hospital fue muy comprensivo. Y mucho!

- Claro, mamá. Pero entiendo que no fue su culpa.

Al final, pasó, lo que ninguno de nosotros esperaba.

- ¿De qué esta hablando? ¿Estas diciendo que yo lo esperaba?

Bueno, desde que naciste dije: "ellos pueden tener un hijo ilegítimo, que Dios lo permita!"

- Como sea, mamá. No importa. Has lo que quieras.

De todas maneras no tengo ninguna intención de volver a ver su cara.

- Niña, ¿ de qué estas hablando? ¿Cómo es que "no tienes ninguna intención de volver a ver su cara?

- Mamá, mira adelante, vamos a chocar! Por Dios!

- Olvídate de eso. Te vas a casar!

- No lo voy a hacer, mamá. - Si, te vas a casar.

- No lo voy a hacer! - No me hables en ese tono. Te vas a casar. - No lo voy a hacer, mamá.

- Bien! Esta bien. hija! No te cases!

- Dios, pide que después del resultado nos podamos deshacer de ellas. Esa mujer es el fondo completo! El fondo completo!

- Hermana, me pregunto con quién me casaré. Necesito a alguien adecuado.

Después de todo, el dinero atrae dinero, no sin razón, como dice el dicho.

Siento que falta poco para conseguir un esposo. Y luego será tu turno.

- Dios quiera! - ¿Quién llama?

- La amarga verdad de mi vida.

Ves, no quiere renunciar ni a mí, ni a ninguna de sus conquistas. ¿Qué debería hacer?

Ya sé lo que debería hacer, si no fuera por la niña.

Gulszah lo quiere mucho, y lloraría por su papá.

- Tienes razón, hermana, tienes que hablar con él, pero sé fuerte.

- Claro que lo seré. Especialmente después de algo como esto.

Te escucho Kurtulus. ¿Qué quieres? - Nada.

Estoy en la puerta, vamos a hablar. - Bueno. ¿qué deseas?

- En este momento, es todo. Nile, ven a ver...

¿Te tele-transportaste? - ¿Quién te crees que eres?

- Mi Nile Nile.... - ¿Qué?

Arruinaste mucho, asi que yo no... Sabes a lo que me refiero! Pero no, más nunca!

- Mi amor, el diablo me engañó. Estaba equivocado.

- Tú eres el diablo! Vete de aquí! No te quiero ver más!

- Querida, pero, vamos a hablar. Tenemos una hija.

- Agradécele a nuestra hija, que si no fuera por ella no me verías más nunca.

No estoy de humor para hablar contigo. Vamos, vete!

- Ahora qué le pasa a ella?

En el pasado, se me escapó algo. Quizás era el bigote!.

Crece lentamente.

- Bien hecho, hermana! Bien hecho!

- De ahora en adelante será así. Dame cinco.

Mira.

- El doctor vendrá enseguida para darles el resultado. - Gracias.

- Espero que no tarde tanto.

Quiero ver el resultado y volver a mi vida normal.

- Lale, en los siguientes seis meses continuaremos lidiando con este embarazo.

-Mamá...

- Habla por ti sola.

Porque no nos vamos a preocupar por el resultado.