Return to Video

Por qué lucho por la educación de niñas refugiadas (como yo)

  • 0:01 - 0:04
    No elegimos dónde nacemos.
  • 0:05 - 0:08
    No elegimos a nuestros padres.
  • 0:09 - 0:13
    Pero decidimos cómo vivir nuestras vidas.
  • 0:15 - 0:18
    Yo no decidí nacer en Sudán del Sur,
  • 0:18 - 0:20
    un país con numerosos conflictos.
  • 0:21 - 0:23
    No elegí mi nombre,
  • 0:23 - 0:25
    Nyiriak,
  • 0:25 - 0:26
    que significa "guerra".
  • 0:27 - 0:29
    Siempre lo he rechazado
  • 0:29 - 0:33
    así como todo el legado con el que nací.
  • 0:33 - 0:35
    Decidí llamarme Mary.
  • 0:36 - 0:40
    Como profesora, he estado
    frente a 120 estudiantes,
  • 0:40 - 0:43
    así que este escenario no me intimida.
  • 0:44 - 0:48
    Mis alumnos proceden de países
    desgarrados por la guerra.
  • 0:48 - 0:51
    Son muy diferentes entre ellos,
  • 0:51 - 0:53
    pero todos tienen algo en común:
  • 0:54 - 0:57
    huyeron de sus hogares
    para permanecer con vida.
  • 0:59 - 1:02
    Algunos de ellos provienen de padres
    que están en Sudán del Sur,
  • 1:02 - 1:03
    matándose unos a otros
  • 1:03 - 1:08
    porque pertenecen a tribus diferentes
    o tienen creencias distintas.
  • 1:09 - 1:13
    Los demás proceden de otros
    países africanos devastados por la guerra.
  • 1:14 - 1:17
    Pero cuando entran
    en mi aula, hacen amigos,
  • 1:17 - 1:19
    caminan juntos a casa,
  • 1:19 - 1:21
    hacen los deberes juntos.
  • 1:22 - 1:25
    El odio no se permite en mi clase.
  • 1:26 - 1:30
    Mi historia es como
    la de muchos otros refugiados.
  • 1:31 - 1:33
    La guerra empezó
    cuando yo todavía era bebé.
  • 1:34 - 1:35
    Y mi padre,
  • 1:35 - 1:38
    quien estuvo ausente
    la mayor parte de mi infancia,
  • 1:38 - 1:41
    hacía lo que los demás hombres hacían:
  • 1:41 - 1:43
    luchar por el país.
  • 1:43 - 1:46
    Tenía dos esposas y muchos hijos.
  • 1:48 - 1:51
    Mi madre era su segunda esposa;
  • 1:51 - 1:53
    se casó con él a los 16 años.
  • 1:54 - 1:58
    Fue así simplemente porque
    mi madre era de origen pobre
  • 1:58 - 2:00
    y no tuvo elección.
  • 2:00 - 2:03
    Mi padre, por otro lado, era rico.
  • 2:03 - 2:04
    Poseía muchas vacas.
  • 2:07 - 2:10
    Los balazos estaban a la orden del día.
  • 2:13 - 2:16
    Mi comunidad era atacada constantemente.
  • 2:17 - 2:21
    Las comunidades luchaban entre sí
    aun cuando sacaban agua del Nilo.
  • 2:21 - 2:22
    Pero eso no era todo.
  • 2:23 - 2:27
    Los aviones lanzaban
    terribles bombas de rebote
  • 2:27 - 2:29
    que amputaban los miembros de la gente.
  • 2:29 - 2:33
    Pero lo más aterrador para cualquier padre
  • 2:33 - 2:39
    era ver a sus hijos ser secuestrados
    y convertidos en jóvenes soldados.
  • 2:40 - 2:42
    Mi madre cavó una trinchera
  • 2:42 - 2:44
    que pronto se convirtió en nuestro hogar.
  • 2:45 - 2:48
    Pero aún así, no nos sentíamos protegidos.
  • 2:48 - 2:52
    Tuvo que huir en busca
    de un lugar seguro para nosotros.
  • 2:52 - 2:56
    Yo tenía cuatro años
    y mi hermana menor, dos.
  • 2:57 - 2:59
    Nos unimos a una muchedumbre
  • 2:59 - 3:03
    y juntos anduvimos durante
    muchos días agonizantes
  • 3:03 - 3:05
    en busca de un lugar seguro.
  • 3:05 - 3:07
    Pero apenas podíamos descansar
  • 3:08 - 3:11
    antes de ser atacados de nuevo.
  • 3:12 - 3:15
    Recuerdo que mi madre estaba embarazada
  • 3:15 - 3:18
    y que nos cargaba
    a mi hermana y a mí por turnos.
  • 3:18 - 3:21
    Finalmente logramos cruzar
    la frontera con Kenia.
  • 3:22 - 3:27
    Fue el viaje más largo
    que he hecho en mi vida.
  • 3:28 - 3:32
    Tenía los pies en carne viva
    por las ampollas.
  • 3:34 - 3:35
    Para nuestra sorpresa,
  • 3:35 - 3:39
    encontramos a miembros de la familia
    que habían huido al campamento antes,
  • 3:39 - 3:40
    este donde estamos hoy,
  • 3:40 - 3:42
    el campamento de Kakuma.
  • 3:42 - 3:46
    Quiero que permanezcan
    en silencio por un momento.
  • 3:49 - 3:50
    ¿Oyen eso?
  • 3:52 - 3:55
    El sonido del silencio.
  • 3:56 - 3:58
    Sin balazos.
  • 3:59 - 4:02
    Paz, al fin.
  • 4:02 - 4:06
    Ese fue mi primer recuerdo
    de este campamento.
  • 4:07 - 4:10
    Desplazarse de una zona de guerra
  • 4:10 - 4:12
    a un lugar seguro como Kakuma,
  • 4:12 - 4:14
    es llegar muy lejos.
  • 4:16 - 4:19
    Estuve en el campamento
    solo durante tres años.
  • 4:19 - 4:22
    Mi padre, que había estado ausente
    la mayor parte de mi infancia,
  • 4:22 - 4:23
    volvió a mi vida.
  • 4:24 - 4:27
    Y lo dispuso todo
    para que me mudara con mi tío
  • 4:27 - 4:29
    y la familia que vivía en Nakuru.
  • 4:29 - 4:32
    Allí conocí a la primera
    esposa de mi padre,
  • 4:32 - 4:35
    a mis hermanastras y hermanastros.
  • 4:35 - 4:37
    Me matriculé en la escuela.
  • 4:38 - 4:42
    Recuerdo mi primer día de escuela
    --podía cantar y reír de nuevo--
  • 4:42 - 4:45
    y mi primer uniforme de la escuela.
  • 4:46 - 4:48
    Era maravilloso.
  • 4:49 - 4:52
    Pero entonces me di cuenta
  • 4:53 - 4:57
    de que a mi tío no le gustaba
    que yo fuera a la escuela
  • 4:58 - 5:01
    simplemente por ser mujer.
  • 5:03 - 5:06
    Mis hermanastros eran su prioridad.
  • 5:07 - 5:10
    Solía decir, "Educar a una niña
    es una pérdida de tiempo".
  • 5:11 - 5:16
    Y por ese motivo perdí
    muchos días de escuela
  • 5:16 - 5:18
    porque no pagaba las cuotas.
  • 5:19 - 5:21
    Mi padre intervino
  • 5:21 - 5:24
    y dispuso que me fuera a un internado.
  • 5:25 - 5:29
    Recuerdo la fe que tuvo en mí
    en los dos años siguientes.
  • 5:29 - 5:35
    Decía, "La educación es un
    animal que hay que vencer.
  • 5:36 - 5:39
    Con estudios, puedes sobrevivir.
  • 5:40 - 5:44
    Estudiar debe ser tu primer marido".
  • 5:45 - 5:50
    Y con estas palabras vino
    su primera gran inversión.
  • 5:50 - 5:51
    ¡Me sentía afortunada!
  • 5:52 - 5:55
    Pero me faltaba algo:
  • 5:56 - 5:58
    mi madre.
  • 5:59 - 6:02
    Mi madre se había quedado atrás
    en el campamento
  • 6:03 - 6:05
    y no la había vuelto a ver
    desde que lo abandoné.
  • 6:06 - 6:11
    Seis años sin verla era mucho tiempo.
  • 6:12 - 6:13
    Estaba sola,
  • 6:14 - 6:15
    en la escuela,
  • 6:16 - 6:18
    cuando supe que había muerto.
  • 6:20 - 6:23
    He visto a mucha gente en Sudán del Sur
  • 6:24 - 6:26
    perder la vida.
  • 6:26 - 6:28
    He oído de vecinos
  • 6:28 - 6:30
    que han perdido a sus hijos y maridos,
  • 6:31 - 6:32
    a sus niños.
  • 6:33 - 6:37
    Pero nunca pensé que me ocurriría a mí.
  • 6:38 - 6:41
    Un mes antes, mi madrastra,
  • 6:41 - 6:45
    que había sido muy buena conmigo
    en Nakuru, había muerto primero.
  • 6:48 - 6:53
    Después, me di cuenta de que
    tras dar a luz a cuatro niñas,
  • 6:53 - 6:57
    mi madre por fin había dado a luz algo
  • 6:57 - 7:00
    que podría hacer que
    la comunidad la aceptase:
  • 7:00 - 7:02
    un niño,
  • 7:02 - 7:03
    mi hermano recién nacido.
  • 7:05 - 7:07
    Pero también él
  • 7:07 - 7:09
    se sumó a la lista de muertos.
  • 7:12 - 7:14
    Lo más doloroso para mí
  • 7:15 - 7:19
    fue no poder asistir
    al funeral de mi madre.
  • 7:20 - 7:21
    No me lo permitieron.
  • 7:23 - 7:27
    Dijeron que su familia no veía bien
  • 7:27 - 7:31
    que sus hijas, todas mujeres,
    asistiéramos al funeral
  • 7:32 - 7:34
    simplemente por ser mujeres.
  • 7:35 - 7:37
    Me daban sus condolencias,
  • 7:38 - 7:40
    "Nos apena tu pérdida, Mary.
  • 7:41 - 7:46
    Nos entristece que tus padres
    no dejaran descendencia".
  • 7:47 - 7:49
    Y yo me preguntaba:
  • 7:50 - 7:51
    Y, ¿qué somos nosotras?
  • 7:52 - 7:53
    ¿No somos su descendencia?
  • 7:55 - 7:58
    En la mentalidad de mi comunidad
  • 7:58 - 8:00
    solo cuentan los hijos varones.
  • 8:01 - 8:05
    Por ese motivo supe
    que había llegado mi fin.
  • 8:08 - 8:09
    Pero yo era la mayor
  • 8:10 - 8:12
    y debía hacerme cargo de mis hermanas.
  • 8:12 - 8:14
    Debía asegurarme de que fueran al colegio.
  • 8:15 - 8:17
    Yo tenía 13 años.
  • 8:18 - 8:20
    ¿Cómo podía conseguirlo?
  • 8:21 - 8:25
    Volví al campamento
    para hacerme cargo de mis hermanas.
  • 8:25 - 8:27
    Nunca me había sentido tan frustrada.
  • 8:28 - 8:32
    Entonces, una de mis tías, la tía Okoi,
  • 8:32 - 8:34
    decidió encargarse de mis hermanas.
  • 8:35 - 8:38
    Mi padre me envió dinero de Juba
    para que volviera a la escuela.
  • 8:39 - 8:43
    El internado era un paraíso,
    pero también era muy duro.
  • 8:43 - 8:47
    Recuerdo que en los días de visita,
    cuando los padres podían vernos,
  • 8:47 - 8:48
    mi padre no venía.
  • 8:48 - 8:50
    Pero cuando venía,
  • 8:50 - 8:52
    reiteraba la misma fe en mí.
  • 8:52 - 8:53
    Y me decía,
  • 8:53 - 8:56
    "Mary, no vayas por el mal camino,
  • 8:56 - 8:59
    porque tú eres el futuro de tus hermanas".
  • 9:00 - 9:04
    Pero en 2012,
  • 9:04 - 9:08
    la vida me arrebató
    lo único a lo que me aferraba.
  • 9:08 - 9:10
    Mi padre murió.
  • 9:12 - 9:14
    Mis notas en la escuela empezaron a bajar
  • 9:16 - 9:22
    y cuando hice los exámenes
    finales de bachillerato en 2015,
  • 9:22 - 9:25
    me sentí devastada porque obtuve una C.
  • 9:25 - 9:28
    Siempre les digo a mis alumnos que
  • 9:28 - 9:31
    "no se trata de sacar una A,
    sino de hacerlo lo mejor posible".
  • 9:31 - 9:33
    Yo no lo había hecho.
  • 9:34 - 9:35
    Estaba decidida.
  • 9:35 - 9:38
    Quería volver a intentarlo.
  • 9:39 - 9:40
    Pero mis padres habían muerto.
  • 9:41 - 9:43
    No tenía a nadie que me cuidara
  • 9:43 - 9:44
    ni a nadie que pagara la matrícula.
  • 9:45 - 9:46
    Me sentía desamparada.
  • 9:48 - 9:51
    Entonces, una de mis mejores amigas,
  • 9:51 - 9:54
    una bella keniata, Esther Kaecha,
  • 9:54 - 9:56
    me llamó en esos duros momentos
  • 9:56 - 9:59
    y me dijo, "Mary, tienes
    una voluntad de hierro.
  • 9:59 - 10:02
    Y yo tengo un plan, y va a funcionar".
  • 10:02 - 10:06
    Cuando estamos tan desesperados,
    aceptamos cualquier cosa, ¿verdad?
  • 10:06 - 10:10
    El plan era que había conseguido
    un poco de dinero para viajar
  • 10:10 - 10:13
    al bachillerato para chicas
    Anester Victory.
  • 10:13 - 10:15
    Recuerdo muy bien ese día.
  • 10:15 - 10:18
    Llovía cuando entramos
    en la oficina del director.
  • 10:18 - 10:21
    Temblábamos como
    dos pollitos empapados de lluvia
  • 10:21 - 10:23
    y lo miramos fijamente.
  • 10:23 - 10:24
    Preguntó, "¿Qué quieren?"
  • 10:25 - 10:27
    Ambas lo miramos suplicantes.
  • 10:27 - 10:29
    "Solo queremos volver a estudiar".
  • 10:29 - 10:34
    Lo crean o no, no solo
    pagó nuestros estudios
  • 10:34 - 10:38
    sino también nuestros uniformes
    y nos dio mesadas para comida.
  • 10:38 - 10:39
    Un aplauso para él.
  • 10:39 - 10:41
    (Aplausos)
  • 10:42 - 10:44
    Cuando terminé el bachillerato,
  • 10:44 - 10:45
    iba a la delantera.
  • 10:46 - 10:49
    Y cuando me presenté
    al examen por segunda vez,
  • 10:49 - 10:52
    conseguí una B-. Un aplauso.
  • 10:52 - 10:54
    (Aplausos)
  • 10:54 - 10:55
    Gracias.
  • 10:55 - 11:00
    Quiero dar las gracias de corazón
    a Anester Victory, al Sr. Gatimu
  • 11:00 - 11:04
    y a toda la fraternidad de Anester
    por darme esa oportunidad.
  • 11:05 - 11:07
    A veces
  • 11:07 - 11:12
    algunos familiares insistieron en que
    mi hermana y yo nos casáramos
  • 11:12 - 11:14
    para tener a alguien
    que cuidara de nosotras.
  • 11:15 - 11:16
    Solían decir,
  • 11:16 - 11:17
    "Tenemos un hombre para ti".
  • 11:18 - 11:24
    Realmente detestaba que la gente
    nos considerara una propiedad y no hijas.
  • 11:24 - 11:26
    A veces nos decían en broma,
  • 11:26 - 11:28
    "Van a perder valor de mercado
  • 11:28 - 11:30
    si siguen estudiando".
  • 11:30 - 11:32
    Y lo cierto es
  • 11:32 - 11:36
    que las mujeres con estudios
    son temidas en mi comunidad.
  • 11:36 - 11:38
    Pero yo les respondía que no quería eso.
  • 11:39 - 11:42
    No quería tener hijos
    a los 16 como mi madre.
  • 11:43 - 11:45
    Esa no era mi vida.
  • 11:46 - 11:48
    Aunque mis hermanas y yo sufríamos,
  • 11:48 - 11:50
    no íbamos a ir en esa dirección.
  • 11:51 - 11:53
    Me negué a que la historia se repitiera.
  • 11:54 - 11:59
    Dar educación a las niñas creará
    sociedades estables e igualitarias.
  • 11:59 - 12:04
    Los refugiados con estudios
    serán la esperanza
  • 12:04 - 12:06
    para reconstruir sus países algún día.
  • 12:07 - 12:11
    Las niñas y las mujeres
    forman parte de esto,
  • 12:11 - 12:13
    al igual que los hombres.
  • 12:13 - 12:16
    Hay hombres en la familia que
    me animaron a salir adelante:
  • 12:16 - 12:19
    mis hermanastros y hermanastras.
  • 12:21 - 12:23
    Cuando acabé el bachillerato,
  • 12:23 - 12:29
    trasladé a mis hermanas a Nairobi,
    donde viven con mi hermanastra.
  • 12:29 - 12:32
    Viven 17 personas en una casa.
  • 12:32 - 12:33
    No nos tengan lástima.
  • 12:34 - 12:39
    Lo más importante es que todas
    reciben una educación decente.
  • 12:42 - 12:43
    Los ganadores de hoy
  • 12:44 - 12:46
    son los perdedores de ayer
  • 12:47 - 12:48
    que no se dieron por vencidos.
  • 12:49 - 12:51
    Esas somos nosotras,
  • 12:51 - 12:52
    mis hermanas y yo.
  • 12:52 - 12:54
    Y me siento muy orgullosa.
  • 12:54 - 12:56
    La mejor inversión de mi vida...
  • 12:56 - 12:57
    (Aplausos)
  • 12:57 - 13:00
    ha sido la educación de mis hermanas.
  • 13:01 - 13:06
    La educación da oportunidades justas
    e iguales a todos para tener éxito.
  • 13:06 - 13:09
    Opino que la educación no es
    solo un programa de estudios.
  • 13:10 - 13:11
    Se trata del compañerismo.
  • 13:12 - 13:14
    Se trata de descubrir nuestros talentos.
  • 13:14 - 13:17
    Se trata de descubrir nuestro destino.
  • 13:18 - 13:20
    Por ejemplo, no olvidaré
    la alegría que sentí
  • 13:20 - 13:23
    en la primera lección
    de canto en la escuela,
  • 13:23 - 13:24
    que sigue siendo mi pasión.
  • 13:24 - 13:26
    No lo habría podido conseguir
  • 13:27 - 13:28
    en ningún otro lugar.
  • 13:29 - 13:33
    Como profesora, veo a mi clase
    como un laboratorio
  • 13:33 - 13:36
    que no solo genera
    habilidades y conocimientos,
  • 13:36 - 13:39
    sino comprensión y esperanza.
  • 13:40 - 13:41
    Por ejemplo, un árbol.
  • 13:42 - 13:44
    Pueden cortar las ramas de un árbol,
  • 13:45 - 13:49
    pero si lo riegan,
    le brotarán nuevas ramas.
  • 13:49 - 13:51
    Para los niños de la guerra,
  • 13:51 - 13:57
    la educación puede transformar
    su llanto de pérdida en pasión por la paz.
  • 13:57 - 14:02
    Por ese motivo, me niego a rendirme
    con ninguno de mis alumnos.
  • 14:02 - 14:05
    (Aplausos)
  • 14:05 - 14:06
    La educación cura.
  • 14:07 - 14:09
    El entorno escolar
  • 14:09 - 14:12
    permite concentrarse en el futuro.
  • 14:13 - 14:15
    Digámoslo así:
  • 14:15 - 14:17
    si están ocupados resolviendo
    ecuaciones matemáticas
  • 14:17 - 14:19
    y memorizando poesía,
  • 14:19 - 14:23
    olvidan la violencia que
    han visto en su hogar.
  • 14:24 - 14:27
    Ese es el poder de la educación.
  • 14:27 - 14:30
    Crea un lugar para la paz.
  • 14:31 - 14:33
    En Kakuma abundan estudiantes.
  • 14:33 - 14:38
    Cerca de 85 000 estudiantes están
    matriculados en escuelas de aquí,
  • 14:38 - 14:42
    lo que supone un 40 %
    de la población refugiada,
  • 14:42 - 14:49
    incluyendo niños que han perdido
    años de educación a causa de la guerra.
  • 14:50 - 14:51
    Quiero hacerles una pregunta:
  • 14:53 - 14:57
    ¿Si la educación construye
    una generación de esperanza,
  • 14:58 - 15:02
    por qué hay 120 estudiantes
    hacinados en mi aula?
  • 15:04 - 15:08
    ¿Por qué solo el 6 % de los
    estudiantes de escuela primaria
  • 15:08 - 15:10
    consiguen llegar al bachillerato
  • 15:10 - 15:14
    simplemente porque
    no tenemos sitio para todos?
  • 15:14 - 15:19
    ¿Y por qué solo el 1%
    de los graduados de educación secundaria
  • 15:19 - 15:21
    logran ir a la universidad?
  • 15:22 - 15:25
    He empezado diciendo que soy profesora.
  • 15:26 - 15:29
    Pero he vuelto a ser estudiante de nuevo.
  • 15:30 - 15:32
    En marzo me mudé a Ruanda
  • 15:33 - 15:37
    con una beca de estudios
    llamada "Bridge2Rwanda",
  • 15:38 - 15:40
    que prepara a los becados
    para la universidad.
  • 15:41 - 15:46
    Les da la oportunidad de aspirar
    a una universidad extranjera.
  • 15:46 - 15:49
    Ahora tengo profesores
    que me dicen qué debo hacer
  • 15:49 - 15:51
    en vez de ser al revés.
  • 15:51 - 15:55
    La gente vuelve a invertir en mí.
  • 15:56 - 16:00
    Por eso quiero pedirles a Uds.
    que inviertan en los jóvenes refugiados.
  • 16:01 - 16:03
    Piensen en el árbol
    del que les he hablado.
  • 16:04 - 16:07
    Somos la generación que lo plantará
  • 16:07 - 16:11
    para que la próxima lo riegue
  • 16:11 - 16:16
    y la siguiente disfrute
    de la sombra que dé.
  • 16:16 - 16:18
    Ellos cosecharán los beneficios.
  • 16:19 - 16:21
    Y el mayor beneficio de todos
  • 16:22 - 16:25
    es una educación que perdurará.
  • 16:26 - 16:27
    Gracias.
  • 16:28 - 16:34
    (Aplausos)
Title:
Por qué lucho por la educación de niñas refugiadas (como yo)
Speaker:
Mary Maker
Description:

Tras huir siendo niña de Sudán del Sur, un país desgarrado por la guerra, Mary Maker encontró seguridad y esperanza en la escuela del campamento de refugiados de Kakuma, en Kenia. Ahora es profesora de niños refugiados y considera que la educación es una herramienta clave para reconstruir sus vidas y para empoderar a una generación de niñas, a quienes a menudo se les niega el acceso al aula. "Para un niño de la guerra, la educación puede transformar su llanto de pérdida en pasión por la paz", afirma Maker.

more » « less
Video Language:
English
Team:
closed TED
Project:
TEDTalks
Duration:
16:47

Spanish subtitles

Revisions