- ¿Es usted el hombre? - Yo soy el hombre. - ¿Puedo tener algo para desayunar? - Lo que sea. - Un verdadero desayuno? - Lo que usted diga, hijo. Jugo de naranja y exprimir fresco. ¿Entonces? Una montón de panqueques de trigo con mucha mantequilla derretida ... sirope de arce. Y freírme tres, cuatro, cinco huevos con un plato de salchichas y una montaña de pan blanco tostado con mermelada de fresa y ... siga trayendo el café. - Y frijoles? - ¿Tienes frijoles? - La más, señor. - Ellos también. ¿Usted toma leche? - No. - Le dije fresco. - Los exprimé yo mismo esta mañana. ¿Qué más quiere? OK. Muy bueno. Muy bueno. Ahora ... derrite un poco de queso sobre los frijoles. - ¿Qué le pasa que no está en la iglesia? - Soy Bautista. - ¿Qué hace trabajando para las hermanas? - Yo trabajo por mí mismo. - ¿Cómo es que usted no está en la iglesia? - Tengo un negocio. - Pero usted es católico. - ¡No! Nací uno, pero ... - El padre Murphy ... - ¿Qué le pasa a él? - Él bebe. - Él es un sacerdote. - Él es irlandés. - Oh. Santo, santo, santo, ¿eh? Oras lo suficiente y su estómago no se siente vacía más. Orar no paga el alquiler y la oración no llena el gas. Dios no va a estar detrás de esta encimera y servir hash. Yo? Tengo que llenar mi cartera. - Hey. - ¿Qué? - Te pagan? - Claro. Sólo me preguntaba. He oído que no tienen un centavo. Ni un centavo. Son locas las hermanas tratando de cultivar esa tierra. Ellas no son perversas. Esa vieja Madre, ella lo hará. Oh-h-h! El Viejo Gus Ritter - él era dueño del lugar. Él podía cultivar papas en la roca pelada. Él dejó el lugar para una orden religiosa en Alemania. Alemania del Este. Las hermanas pasaron el Muro. Ellas le dijeron sobre eso? - No. Al igual que en Berlín? - Sí. A lo largo del Muro, a través del océano, todo el país para qué? Esto. - Ni siquiera pueden hablar el idioma. - He estado enderezandolas en ese aspecto. - ¿Sí? - Efectivamente! Hey, escucha. Usted no va a andar con las hermanas? - Nah. Yo sólo estoy de paso. - ¡Eso es! Las hermanas le pregunta algo, les dices que no. Manténgase en su camino. - Esa tarta allí? - Claro. - Toda entera. ¿Puedo tenerla? - Le va a costar. Envuélvala. Yo soy un millonario. De Wall Street. - Mi nombre es Homer Smith. - Juan Acalito.