¡Tenemos tres grupos alimenticios y seguro que no son frituras, galletas y chocolates! Y luego se preguntan por qué sus caras parecen mapas topográficos del Himalaya. Eres una mujer hermosa... Estarás conmigo esta noche. ¡Estuvo padre! ¡Ustedes dos son unos patéticos promotores de la baja autoestima! ¡Nos encargaremos de esta deficiencia de una vez por todas, así es! ¡Véanme en el gimnasio después de clases! ¡Es hora de poner a trabajar esos palitos y empezar a hacer ejercicio de verdad! Hey Beavis... ¿Qué pasó cuando Napoleón fue al Monte de Oliva? ¿Qué? Popeye se encabronó... ¿Le agarraste? Si. Muy bien sacos atrofiados, voy a cambiar sus vidas. Creo que le empezamos a caer bien. ¡Silencio! Disciplina, caballeros, disciplina. Yo hablo y ustedes escuchan. ¡Integridad, respeto, RESPETO PROPIO! El saber que tu cuerpo puede confiar en ti cuando este chafeando y veceversa. Recuerdo esos días en el “Hochee man trail” con el Poderoso “Big Red One”, honrado con mi rifle a mi lado. En la jungla, chavos, nadie era inocente, los matas antes que ellos a ti. Quiero decirles que mi escuadrón destruyó todo a su paso en esas aldeas hostiles. ¡Caray, era algo hermoso! ¡Fuego por doquier! ¡Que padre! ¿!Cuál padre!? ¡Valió madre! Nos metimos en esas chosas machacadas, y esos paganos nos veían como al Mísmisimo Señor Dios. ¡ESO! es autoestima caballeros. ¡FUERZA, CORAJE, ODIO! ¡¿Están conmigo?! ¡¿Están conmigo?! ¡¿E-S-T-A-N C-O-N-M-I-G-O?! ¡Eso es, eso es! ¡Ahora, agárrense unos fierros y pónganse a darle! ¡Nenita! ¡Cállate! Andale mariquita. ¿Eres hombre? Emm… si. ¡¿Qué te hace pensar eso?! Tengo testículos. ¡Ustedes payasitos se hacen los chistosos! Dices ser un hombre, ¡pruébalo! ¡¿Quieres ver un hombre, chavito?! Yo te enseñaré un hombre. Ándale, ¡patéame los huerfanitos! ¡Ni de chiste! ¡TE DIGO QUE LO HAGAS! ¡Si! ¡Hazlo otra vez, hazlo más fuerte! ¡Si! Wow, ¡eso estuvo padre! Ahora pon tu cuerpesillo enclenque en esta barra y ¡levántala! Ñango. ¡Cállate! ¡No tienen remedio! Quítame esta cosa de encima. ¡Chido! Si. ¡Fue una rutina pesada! Eres una mujer h-e-r-m-o-s-a. Un día más y vamos a estar bien mamados. ¡Wey, apestas! Llégale a las regaderas. Báñenla y tráiganla a mí.