Si me conocen, conocen a mi hermana. Muchos seguro esperan que ella entre en cualquier momento para dar esta charla junto conmigo Porque somos mellizas, ¿no? Hacemos todo juntas. De la cuna a la tumba. Lamento decirles que hoy estoy sola. Sorprendente. Lo sé "Las mellizas hacen cosas por separado" pero, es cierto, estoy yo sola. Ahora muchos se deben estar preguntando por qué. Kat, ¿por qué decidiste venir sola? Bueno, como melliza, la verdad que diferenciarme es algo que siempre me ha costado. A muchos les cuesta notar no solo las diferencias físicas entre mi hermana y yo, sino que también nuestras personalidades. Sí, en el fondo sé que somos diferentes. Y hoy estoy sola para demostrarlo, no solo a Uds., sino a mi también. Porque por mucho que yo me pare aquí y hable mucho acerca del concepto de que somos dos individuos únicos y distintos, aún lucho por entender qué es lo que nos hace ser así. Para mi sorpresa, cuando me preguntan: ¿En que se diferencian las dos? Me cuesta encontrar la respuesta. Tenemos gustos muy similares. Hablamos de los mismos temas, odiamos lo mismo. nos apasionan las mismas cosas, hacemos lo mismo. Solo nos aseguramos de no usar la misma ropa. Les prometo que es pura coincidencia: no tratamos de ser iguales. Simplemente sucede. Así que al menos trato de llevar el pelo corto. Más corto que el de ella. El pelo corto me hace sentir distinta, única. Me recuerda que soy una sola persona, que soy la rebelde, la que se arriesga, la que se atreve a no pensar demasiado, la de lágrima fácil, la torpe, la que muchas veces mete la pata. Mi pelo es como un recordatorio de que en realidad soy diferente, de que soy una sola persona, de que soy una entre muchos, no una del par, no parte de una unidad, sino que soy Katherine De Jesus. Kat, simplemente. Yo. A mi hermana y a mi siempre nos comparan. Como melliza, entiendo por qué Sin embargo, aún espero el día en que los resultados de nuestros exámenes y logros no sean comparados. Espero que llegue el día en el no me digan: "Sacaste dos puntos más que tu hermana" "Dos puntos menos, dos puntos más". Espero que llegue el día en el cual me comparen con quien era. Disculpen si parezco egoísta, pero espero que llegue el día en el cual el peso de mis logros no sea medido de acuerdo a los de mi hermana. En realidad, no existe rivalidad entre mi hermana y yo. Me siento muy orgullosa de sus logros, y sé que ella también esta orgullosa de mi. No me importa si soy mejor que mi hermana. Me interesa saber si soy mejor que ayer porque como individuo que soy, aspiro a mejorar. Aunque creo que siempre me apoyé en mi hermana porque es más fácil. Es fácil tener siempre a mi lado a mi mejor amiga, mi compañera en el vientre para que me ayude a tomar decisiones, para que me ayude a decidirme qué ponerme, qué comprar, qué pedir en un restaurante. Es hasta más fácil entrar en conversación. No hace falta que digamos nada. La gente se nos acerca y nos dice: "Aah, son mellizas, ¿cómo se siente serlo?" Y así empieza una conversación. Es muy fácil, más fácil que no tener a nadie. El miedo a estar solo es humillante. Sin embargo, no es hasta que estamos solos que crecemos como personas, que aprendemos cuán fuertes y capaces somos; cuán cómodos nos sentimos con lo que incomoda. Amo cada momento, cada recuerdo, cada premio, cada título, cada risa, cada llanto que tuve el placer de compartir con mi hermana; pero ahora estoy lista para empezar un nuevo capítulo, un nuevo libro. Me entusiasma empezar a hacer mi propio camino para ser yo misma. Me entusiasma ver que es mi historia la que voy a contar, y rezo para que sea una buena. Por supuesto que eso hace que se pregunten: "¿Qué dice Katherine De Jesus, y no Kimberly y Katherine? ¿Qué tienen Uds., no sus padres, no sus amigos, no sus maestros para contar? Nunca sabremos las respuestas hasta que estemos solos. hasta que escuchemos nuestras voces, nuestros pensamientos y corazones, a nuestro propio instinto. No me gusta sonar cursi ni trillada, pero no se me ocurre otra manera de explicar lo que estoy tratando de decir. Al momento de escribir su propia historia recuerden que son Uds. mismos los que tienen el lápiz o el crayón o el marcador o el Sharpie, el que más les guste. Porque lo único que siempre van a tener, y nadie más, es a Uds. mismos, a su corazón, a su alma, a su esencia. Esas cosas son de Uds. y de nadie más. Forman quiénes son, su identidad. Por eso, ¿quiénes son? ¿Quién soy yo? Nunca me di cuenta cuán difícil puede llegar a ser esa pregunta hasta que traté de responderla yo misma. Entonces, ¿quién soy? Sí, soy una melliza, pero soy más que eso. Soy Katherine De Jesus. Soy una mujer negra hispana; primera generación de norteamericanos. Soy artista, soy cineasta. Soy experta en todo lo viral y fanática de todo lo que sea superhéroes. Soy ñoña y ratona de biblioteca, soy muchas cosas, pero más que nada, simplemente soy yo misma, yo siendo una chica que quiere ser feliz, que quiere hacer lo que ama. Una chica hambrienta por superarse, por aprender, por crecer. Soy una chica que quiere algo distinto, algo bueno, algo que me diga mi instinto. Lo voy a empezar a encontrar valiéndome por mi misma. Gracias.