"Cuando la crisis llegó,
enseguida se vieron las
serias limitaciones que tienen
los modelos económicos
y financieros actuales".
"También existe una
fuerte convicción, que comparto,
de que una mala economía o
demasiado simplista y optimista
ayudó a crear la crisis".
Quizás todos Uds. habrán
escuchado críticas similares
dichas por personas que
son escépticas del capitalismo.
Pero esto es diferente,
porque proviene precisamente
del corazón de las finanzas.
La primera cita es de Jean-Claude Trichet,
cuando fue presidente del Banco Central Europeo.
La segunda cita fue dicha por el director de la
Autoridad de Servicios Financieros
(FSA) del Reino Unido.
¿Están ellos sugiriendo
que no entendemos los sistemas económicos
que guían nuestras sociedades modernas?
Más serio aún.
"Gastamos miles de millones de dólares
tratando de comprender
los orígenes del universo
cuando ni aun comprendemos
las condiciones necesarias
para tener una sociedad estable,
una economía operativa o paz".
¿Qué está sucediendo aquí?
¿Cómo puede esto ser posible?
¿Entendemos de verdad más
sobre el tejido de la realidad
que sobre el tejido
que surge de nuestras interacciones humanas?
Desafortunadamente, así es.
Pero existe una solución interesante que se deriva
de lo que se conoce como ciencia de la complejidad.
Para explicar qué significa y qué es,
por favor permítanme retroceder un poco.
Sin querer, terminé explorando en física.
Fue un encuentro casual
que tuve cuando era joven,
y desde entonces, a menudo
me he quedado asombrado
del extraordinario logro de la física
al describir la realidad que enfrentamos cada día.
En pocas palabras,
pueden pensar como físicos así:
tomen un trozo de la
realidad que desean comprender,
conviértanlo en matemáticas
y codifíquenlo en ecuaciones;
como resultado podrán
hacer y probar predicciones.
En realidad tenemos
mucha suerte de que esto funcione
porque nadie sabe realmente
porqué nuestros pensamientos
deberían relacionarse realmente con
los mecanismos fundamentales del universo.
Pese a los logros, la física tiene sus límites.
Como Dirk Helbing señaló en la última cita,
en realidad no comprendemos la complejidad
que se relaciona con nosotros, la que nos rodea.
Esta paradoja es lo que me hizo
interesarme en los sistemas complejos.
Estos sistemas son creados
a partir de varias partes
interconectadas o interactivas:
bandadas de aves, bancos de peces,
colonias de hormigas,
ecosistemas, cerebros, mercados financieros...
por mencionar algunos ejemplos.
Curiosamente, es difícil
representar los sistemas complejos
en ecuaciones matemáticas,
por lo que el enfoque común de la
física en realidad no funciona aquí.
¿Qué sabemos de los sistemas complejos?
Resulta que aquello que exteriormente
parece ser un comportamiento complejo,
en realidad es el resultado
de unas pocas y simples reglas de interacción.
Esto significa que pueden
olvidarse de las ecuaciones
y simplemente comenzar a comprender el sistema
mirando a las interacciones,
así que pueden en realidad
olvidarse de las ecuaciones
y comenzar a mirar únicamente las interacciones.
Y todavía mejor, porque la mayoría
de los sistemas complejos
tienen esta extraordinaria
propiedad llamada emergencia.
Esto significa que el sistema, como un todo,
repentinamente comienza
a mostrar un comportamiento
que no se puede comprender o predecir
al mirar a los componentes del mismo.
El todo es literalmente mayor
que la suma de sus partes.
Y todo esto también significa
que se pueden olvidar de
las partes individuales del sistema,
de cuán complejas son.
Sea una célula, una termita o un pájaro,
solo céntrense en las reglas de la interacción.
Como resultado, las redes
son representaciones ideales
de los sistemas complejos.
Los nodos en la red
son los componentes del sistema
y los vínculos se dan a través de las interacciones.
Así que, lo que las ecuaciones son para la física,
las redes complejas lo son para
el estudio de los sistemas complejos.
Este enfoque se ha aplicado
de forma muy exitosa
en muchos sistemas complejos
de la física, biología,
informática y ciencias sociales.
Pero ¿qué de la economía?
¿Dónde están las redes económicas?
Hay una brecha sorprendente
y prominente en la literatura.
El estudio que publicamos el año pasado,
"La Red de Control Corporativo Global"
[The Network of Global Corporate],
fue el primer análisis extenso de las redes económicas.
El estudio se volvió viral en internet
y atrajo mucha atención de los
medios de comunicación internacionales.
Esto es muy notable, porque, otra vez:
¿Por qué nadie había considerado esto antes?
Datos similares han circulado
desde hace bastante tiempo.
Lo que observamos detalladamente
fue las redes de propiedad.
Aquí los nodos son las compañías,
la gente, los gobiernos,
las fundaciones, etc.
Y los vínculos representan
las relaciones accionarias:
el accionista A tiene un x porcentaje
de las acciones en la compañía B.
También asignamos un valor a la compañía
dado por el beneficio operativo.
Las redes de propiedades revelan las pautas
de las relaciones accionarias.
En este pequeño ejemplo pueden ver
unas pocas instituciones financieras
con algunos de los muchos vínculos destacados.
Ahora pueden pensar que
nadie antes había observado esto
porque las redes de propiedades son
muy pero muy aburridas de estudiar.
Bien, siendo que la propiedad
se relaciona con el control,
como lo explicaré después,
observar las redes de propiedades
puede en realidad brindar
respuestas a preguntas como:
¿Quiénes son los jugadores claves?
¿Cómo están organizados? ¿Están aislados?
¿Están interconectados?
¿Cuál es la distribución general del control?
En otras palabras, ¿Quién controla al mundo?
Creo que esta es una pregunta interesante
porque tiene implicaciones en el riesgo sistémico.
Es una medida de cuán vulnerable
es el sistema en general.
Un alto grado de interconectividad
puede ser malo para la estabilidad,
porque entonces el estrés se puede
propagar a través del sistema
como una epidemia.
Los científicos han criticado
a veces a los economistas
que creen que las ideas y los conceptos
son más importantes que los datos empíricos,
porque una directriz fundamental en la ciencia es:
"Deje que los datos hablen". Bien, hagámoslo.
Comenzamos con una base de datos que contiene
13 millones de relaciones de propiedad del 2007.
Es mucha información, y como queríamos descubrir
quién gobierna al mundo,
decidimos centrarnos en
las corporaciones transnacionales,
o TNCs, para abreviar.
Estas son compañías que
operan en más de un país,
y encontramos 43 000.
En el siguiente paso construimos
una red alrededor de estas compañías,
tomamos a todos los accionistas de las TNCs
y a los accionistas de los accionistas, etc.,
hasta el final hacia arriba y luego hacia abajo,
y terminamos con una red de 600 000 nodos
y 1 millón de vínculos.
Esta es la red transnacional que analizamos.
Y la estructura resultó de esta forma:
Hay una periferia y un centro
que contiene cerca del 75% de los jugadores,
y en el centro está este
pequeño pero dominante núcleo
formado por compañías que
están altamente interconectadas.
Para darles una mejor imagen
piensen en la área metropolitana.
Tenemos los suburbios y la periferia,
el centro que es como el distrito financiero,
y luego el núcleo que sería algo como
el edificio más alto en el centro,
y vemos ya signos de organización aquí.
Solamente el 36% de las TNCs está en el núcleo,
pero constituyen el 95% del total
de los beneficios operativos
de todas las TNCs.
Bueno, ya analizamos la estructura,
¿cómo se relaciona esto con el control?
Bien, la propiedad le da
derecho de voto a los accionistas.
Esta es la noción normal de control.
Y existen diferentes modelos
que les permiten calcular
el control que obtienen de la propiedad.
Si tienen más del 50% de
las acciones en una compañía,
tienen el control,
pero generalmente esto depende
de la distribución relativa de las acciones.
Y la red realmente importa.
Cerca de 10 años atrás,
el señor Tronchetti Provera
era el dueño y tenía control
de una pequeña compañía,
que a su vez tenía propiedad
y control de una compañía más grande.
Captan la idea.
Eso le permitió tener control de Telecom Italia
con un apalancamiento de 26.
Esto significa, que por cada euro que invirtió,
pudo mover 26 euros de valor bursátil
a través de la cadena de relaciones de propiedad.
Ahora, lo que en realidad
calculamos en nuestro estudio
fue el control sobre el valor de las TNCs.
Esto nos permitió asignar un grado de influencia
a cada accionista.
Esto es mucho más en el sentido de
la idea de Max Weber sobre el poder potencial,
que es la probabilidad de
imponer a alguien nuestra voluntad
a pesar de la oposición de otros.
Si desean calcular el flujo en una red de propiedad,
esto es lo que tienen que hacer.
En realidad, no es tan difícil de entender.
Permítanme explicarles con esta analogía:
Piensen en el agua que fluye por las tuberías
que tienen diferente grosor.
Así parecido, el control fluye
a través de las redes de propiedades
y es acumulado en los nodos.
¿Qué encontramos después de haber
calculado toda esta red de control?
Bien, resulta que los 737 principales accionistas
tienen el potencial para controlar colectivamente
el 80% del valor de las TNCs.
Ahora, recuerden que
comenzamos con 600 000 nodos,
así que estos 737 jugadores
constituyen poco más del 0,1%.
Son fundamentalmente instituciones
financieras de EE.UU. y del Reino Unido.
Se pone aún más extremo.
En el núcleo hay 146 de los principales jugadores,
quienes en conjunto tienen
la capacidad para controlar colectivamente
el 40% del valor de las TNCs.
¿Qué deben extraer de todo esto?
Bien, el alto grado de control que vieron
es muy extremo desde cualquier punto de vista.
El alto grado de interconectividad
de los principales jugadores en el núcleo
podría representar un importante
riesgo sistémico de la economía global,
y nosotros pudimos reproducir
fácilmente la red de TNCs
con unas pocas y simples reglas.
Esto significa que su estructura
es probablemente el resultado
de la autoorganización.
Es una propiedad emergente que depende
de las reglas de interacción del sistema,
por lo que probablemente no es el
resultado de un abordaje de arriba hacia abajo
como una conspiración global.
Nuestro estudio "es una representación
de la superficie de la luna,
no un mapa de calles".
Por eso Uds. deberían tomar en
nuestro estudio los números exactos
con cautela,
aunque "nos dio una visión tentadora
de un nuevo y desafiante mundo de las finanzas".
Esperamos haber abierto la puerta
para realizar más estudios en esta dirección
para que el restante terreno desconocido
sea trazado en el futuro,
lo que está lentamente iniciando.
Estamos viendo el surgimiento de programas
de largo plazo y fuertemente patrocinados,
cuyo propósito es entender
a nuestro interconectado mundo
desde el punto de vista de la complejidad.
Pero este viaje recién ha comenzado,
y tendremos que esperar hasta
que veamos los primeros resultados.
Pero, en mi opinión, todavía hay un gran problema:
las ideas relacionadas con finanzas, economía, política
y sociedad a menudo están contaminadas
con las ideologías personales de la gente.
Realmente espero que esta
perspectiva de la complejidad
permita que se encuentre alguna afinidad.
Sería grandioso si esto tuviera el poder
para ayudar a eliminar el estancamiento
creado por las ideas opuestas
que parecen estar paralizando
a nuestro mundo globalizado.
La realidad es tan compleja,
que necesitamos separarnos de los dogmas.
Pero esta es solamente
mi propia ideología personal.
Gracias.
(Aplausos)