(Nicole) Si paseaste en góndola en Venecia, comiste gelato en Florencia, y piensas que ya lo viste todo en Italia, pues no. Nadie puede decir que lo ha visto todo si no ha estado en Nápoles. Nápoles no es para todo el mundo, hay un gentío, es caótica, y está llena de marcas. Pero, ¡vaya el carácter que tiene! Está llena de personajes diversos y cada esquina es como un diamante en bruto. Es la razón por la que siempre vuelvo, desde hace dos décadas. Y cuando creo que ya la estoy comenzando a conocer, me sorprende. Así que esta vez regresé con compañía. Buenos días. Buenos días, Nicole. (Nicole) Visitaré la sección histórica con Francesca, mi guía local. Es una experta local de Context, que guía a exploradores urbanos que quieren conocer mejor la ciudad. Esta área de Nápoles fue la que me enamoró de la ciudad porque está llena de vida. - (Francesca) ¡De motos! - (Nicole) ¡Cierto! (Risas) - (Nicole) ¡Nunca es aburrida! - (Francesca) ¡Es cierto! (Música) (Nicole) Estoy aquí con un propósito. En el episodio pasado, pasamos el día en Amalfi donde descubrimos cómo los limones estaban salvando el pueblo de un desastre. Ahora estoy en la gran ciudad, para conocer cómo los limones inspiran la cocina y la cultura italiana. (Música) Después del café obligatorio... Comenzamos desde el principio. (Francesca) Mi ciudad ha existido por casi 3000 años. (Nicole) Nápoles fue fundada por los antiguos griegos, aquí estaba el Ágora y luego, el foro romano. Francesca me muestra dos columnas corintias, los últimos restos de un templo del siglo I que han sido agregadas a la estructura de una iglesia del siglo XVII. Esto es lo más emocionante de Nápoles, con capas de historias sobrepuestas al azar; historias que puedes tocar directamente, si sabes lo que estás viendo. Para los forasteros, Nápoles pareciera inescrutable, es difícil saber dónde termina la historia y comienza el mito, dónde la fe se mezcla con la superstición. Observen estos nacimientos artesanales, objetos en esencia muy Napolitanos. Hay figuras modernas presenciando el alumbramiento de la virgen, y ahí, entre los frutos de terracota, los vi... (Francesca) Esto era muy típico, había gente vendiendo jugo de limón fresco en las calles. (Nicole) Y esos limones vendrían de la costa. (Francesca) Los mejores limones vienen de Amalfi y de Sorrento. (Música) (Nicole) Todos estos limones falsos hacen que me apetezca algo real, así que decidimos ir a Cafeteria Ippolito donde tienen... (Francesca) Delizie al limone, o delicia de limón. Usamos bastante limones. De hecho, hay muchos limones en nuestros jardines... - (Nicole) Cierto. - (Francesca) y en nuestros balcones. Habían muchos claustros de monasterio que tenían estas plantas, donde también se las consideraban como plantas sanadoras. - (Nicole) Medicinales ¿cierto? - (Francesca) Sí, medicinales. Creo que deberíamos ir por un poco de medicina, ¿no crees? Sí, creo que deberíamos. (Música) (Nicole) ¡Gracias! Esto parece... ¡una bomba de azúcar! (Risas) Capas de torta esponjosa rellenas con crema de limón, cubierta con crema Chantilly. (Música) Bien, delizie al limone no es realmente lo mío, quizá demasiado azucarado y demasiado cremoso, pero fue divertido, es limón, y a eso fue que venimos. Con suerte, era la hora del almuerzo, así que nos encaminamos al apartamento de una amiga donde Francesca acordó con un chef local para me enseñara a preparar un perfecto plato veraniego napolitano; pero claro que no podíamos llegar con las manos vacías. Esta es una charcutería que data de 1864, ¡entremos a ver! (Música) (Nicole) ¡Gracias! Compramos el queso, el pan y los limones. Por ser Nápoles, lo compramos todo de proveedores especializados que llevan toda la vida vendiendo. ¡Es hora para el espagueti al limón! ¡Vamos! (Música) Llegamos al apartamento fabuloso de la amiga, a cocinar con Antonio, que ha preparado platillos en restaurantes de alta cocina en Italia e Inglaterra. ¡Hola! (Risas) (Música) (Nicole) ¡Esto es espagueti al limón! Un platillo favorito de los napolitanos durante el verano, la mejor época para los limones. Para prepararlo necesitarás: (Antonio) Crema espesa, queso parmesano, pimiento rojo seco, ajo, mantequilla, limones de Sorrento, perejil y, por supuesto, el linguini. ¡Comencemos! (Nicole) La ralladura y el jugo de medio limón. (Música) (Nicole) ¿Más? - (Antonio) Más, más... - (Nicole) ¡Nunca es demasiado limón! (Antonio) Sí, especialmente si son de la costa amalfitana. (Nicole) ¿Y todo va para la crema? (Antonio) Sí. La razón es porque no queremos cocinar la ralladura porque es amarga, y si la cocinamos, se hará más amarga. Perfecto. Huele fantástico. (Nicole) Huele esto, ¡está buenísimo! (Música) (Nicole) El próximo paso es picar el ajo, el pimiento y el perejil. Mucha gente, al menos de donde vengo, piensa que la comida italiana es salsa de tomate y aceite de oliva, no mantequilla y crema. (Antonio) Ya tenemos los limones que son amargos, combinados con el aceite de oliva extra virgen que también es amargo, no quieres que se haga... - (Nicole) Demasiado amargo. - (Antonio) Exacto. (Nicole) Antonio derrite la mantequilla con el perejil, el ajo y el pimiento. (Antonio) Es básicamente un plato muy sencillo y todo el mudo puede prepararlo, pero necesitas los ingredientes adecuados. (Nicole) Ingredientes buenos y de calidad. (Antonio) Exactamente. (Nicole) Y paciencia, que es el ingrediente más difícil de conseguir. (Antonio) Siempre necesitas paciencia. (Nicole) Agregamos la crema de limón para que se caliente. (Antonio) Ahora, lo que llamo el rey de Italia, queso parmesano. Bien, la pasta está hirviendo... perdón, el agua está hirviendo, y ahora abriremos la pasta al estilo italiano... (Nicole) Guaooo! (Música) (Risas) (Nicole) Antonio dice que la pasta debería quedar un poco cruda pero, ¿cómo sabemos cuándo es eso? (Antonio) Solo lo voy a tocar y sabré que está listo. (Nicole) El susurrador de pasta... (Risas) (Antonio) Sí, me dirá, "Ya estoy lista"... (Nicole) Voy a escuchar a ver si me dice lo mismo... (Risas) (Nicole) Pues no, pero ocho minutos más tarde le dice a Antonio que está lista para la salsa. Antonio sacude la pasta como solo un cocinero profesional podría hacerlo. Si yo lo hiciera ya tendría espagueti en toda la blusa. Le echa un poco de sal y unas cuantas cucharadas del agua de la pasta hasta que el linguini esté completamente cocido. Más queso parmesano y más ralladura de limón. (Antonio) Esto te dará el aroma. - (Nicole) ¿Listo para la mesa? - (Antonio) Listo para la mesa. (Música) Usamos linguini en vez de espagueti porque tiene más superficie y la salsa se le adhiere mejor. Aquí vamos... (Nicole) Después de una larga caminata, finalmente te daremos de comer. (Risas) (Francesca) ¡Buen provecho! (Antonio and Nicole) ¡Buen provecho! (Música) ¡Por los nuevos amigos de Nápoles y los limones! (Risas) (Música)