Hola, soy la doctora Amanda Cohn. Soy médico y asesora médica en el CDC del Centro Nacional de Inmunización y Enfermedades Respiratorias y actualmente sirvo como secretaria ejecutiva para el Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización - o ACIP. Me gustaría compartir con Uds. cómo este consagrado grupo de expertos desarrolla las recomendaciones y asesora al CDC sobre el uso de las vacunas en nuestro país. El ACIP se dedica a hacer recomendaciones basadas en hechos y ciencia para prevenir y controlar enfermedades evitables con vacunación, como la COVID-19. Están motivados por su intención de salvar vidas, están libres de influencias políticas, y aseguran la transparencia al mantener todas sus reuniones abiertas al público y haciéndolas accesibles en línea. El comité se compone de quince miembros con voto, que son expertos en medicina y salud pública de todo Estados Unidos incluyendo a una persona que representa a la población general. Revisan información sobre la seguridad y efectividad de las vacunas y los resultados de los ensayos clínicos y votan para recomendar si estas vacunas deben utilizarse en los Estados Unidos El comité también tiene miembros sin derecho a voto, como representantes de la Asociación Americana de Enfermería, la Asociación Médica Americana, la Asociación estadounidense de Pediatría, y el Colegio Americano de Médicos. Es importante tener a estos individuos en el comité, porque ofrecen la perspectiva de médicos, enfermeros, y otros profesionales de la salud, que siguen las recomendaciones de vacunas de los CDC y las ponen en práctica Se ha realizado un gran esfuerzo para desarrollar, estudiar y autorizar rápidamente las vacunas COVID-19, para responder a la pandemia que afrontamos. Es comprensible que les preocupe la seguridad de las vacunas COVID-19, teniendo en cuenta lo rápido que han sido desarrolladas. A pesar del ritmo rápido, las vacunas COVID-19 pasan por el mismo proceso riguroso de revisión, que todas las otras vacunas, antes de que este comité vote su recomendación. La seguridad de las vacunas es siempre nuestra mayor prioridad, y no es diferente con las vacunas COVID-19. Desde el principio de la pandemia, el ACIP se ha reunido a menudo, para mantenerse informado sobre las vacunas COVID-19. Después de que se autorice cada vacuna COVID-19 o sea aprobada para su uso en los Estados Unidos, el ACIP se reunirá rápidamente para revisar los datos disponibles de los estudios rigurosos llevados a cabo por los fabricantes de la vacuna, para demostrar que cada vacuna cumple con los estándares de seguridad y efectividad. Después de debates y comentarios públicos, el comité vota si recomendar la vacuna o no, y si la recomienda, quién debería recibirla. Este es el mismo proceso que ACIP utiliza para todas las vacunas. El mismo proceso que ha recomendado las vacunas seguras y exitosas que protegen a nuestras comunidades de enfermedades que hace tiempo mataban a cientos de miles de personas cada año. Tengo la más sincera esperanza que se salven cientos de vidas más con vacunas seguras contra la COVID-19. Sin embargo, ninguna herramienta por sí sola detendrá la pandemia de la COVID-19. Por ahora, su mejor protección es una combinación de recibir la vacuna COVID-19, cuando se lo recomienden, y seguir cubriendo su nariz y boca con una mascarilla, mantener la distancia mínima de 2 metros, y lavarse las manos a menudo. Las vacunas contra la COVID-19 serán una ayuda vital para detener esta pandemia. Para más información, visite CDC.gov/coronavirus