Gracias, damas y caballeros. Comencemos rápidamente con una pregunta que quizás sea sacrílega. ¿Para qué estudiar gerontología? Creo que aquellos que reciben dinero de los contribuyentes deberían preguntarse si realmente podrán, en algún momento, devolverle algo a la sociedad. La respuesta es bastante evidente. En la actualidad, sabemos que la esperanza de vida de una persona al momento de su nacimiento depende de factores genéticos solo en un 25 %, lo que significa que debe haber factores medioambientales o dietarios que influyen en el proceso de envejecimiento. ¿Por qué seguimos teniendo tan poca información sobre el tema? ¿Por qué somos bombardeados con mensajes confusos, enviados por aquellos que están en la industria de la nutrición, que de alguna manera se contradicen entre sí? Algo que todos recordarán: Hace 15 años, parecía que habían encontrado al culpable, las grasas. La gente creía que si eliminábamos las grasas de nuestra dieta, todos nos volveríamos delgados y gozaríamos de buena salud, lo cual hizo que las góndolas de los supermercados de EE.UU. se llenaran de una cantidad ridícula de productos bajos en grasas, lo cual no cambió en nada el hecho de que, año tras año, hubiera cada vez más estadounidenses obesos. Entonces todos dijeron: "Ah, no, ¡el problema no son las grasas! ¡Son los carbohidratos!" Lo cual luego condujo a la aparición de aberraciones como la dieta paleolítica, la dieta baja en carbohidratos, la Atkins, entre otras. Siempre hay alguna otra dieta de moda que se anuncia con bombo y platillo. (Risas) ¿Cómo se originan estas ideas? Creo yo que surgen, al menos parcialmente, del hecho de que permitamos que dudosas formulaciones periodísticas exageren casos anecdóticos aislados hasta elevarlos a la categoría de conocimiento científico. Aquí tenemos un ejemplo típico de un caso anecdótico aislado: Todos conocen a este hombre. En 1968, un periódico muy leído publicó una nueva sección: El top 10 de los famosos que son candidatos a morir el año próximo. (Risas) Keith Richards apareció en el primer lugar siete años seguidos. Luego, el periódico llegó a su final. (Risas) O esta señora que vemos aquí, Jean Calmet. El ser humano que más tiempo se sabe que ha vivido sobre la faz de la Tierra: 122 años. Sé que hay gente que anda diciendo que tiene 600 años, pero justo ahora no pueden encontrar su certificado de nacimiento. Jean Calmet realmente llegó a los 122 años y dejó de fumar a los 117. (Risas) Pero volvió al cigarrillo a los 118. (Risas) Solo para volver al buen camino a los 120 y dejar de fumar de una vez por todas. Falleció más tarde, a los 122 años. ¿Qué nos dice esto? No que los cigarrillos sean saludables, sino que envejecer es un proceso muy complejo y que necesitamos estadísticas claras y significativas. Necesitamos sistemas experimentales simples, y necesitamos hacer preguntas simples. Aquí una pregunta y una respuesta bien claras, que se repite en varios países. Las mujeres viven más que los hombres. ¿Cuál es la razón detrás de esto? Ahora lo sabemos. Tiene que ver con la testosterona, una hormona sexual que se genera en el epidídimo del hombre. Hay evidencia muy simple que lo demuestra: Los hombres que han sido castrados viven tanto como las mujeres. Ahora, cada uno puede decidir por sí mismo- (Risas) si es o no una opción viable para evitar el envejecimiento. Austria es un país libre. Pero no se preocupen, les voy a dar mejores consejos. (Risas) Por lo general, debemos tener cuidado de no confundir la correlación con la causalidad. Suena complicado, pero puede ilustrarse con técnicas de interrogación normales. Alguien visita a una señora de 100 años y le pregunta: "¿Qué ha hecho diferente, o qué ha comido, para vivir tantos años?" Ah, esta señora ha fumado 10 cigarrillos por día. Ese debe ser el secreto de su longevidad. Tal vez los 10 cigarrillos no le hacían daño, o tal vez sí, y la señora podría haber vivido aún más sin los 10 cigarrillos diarios. Incluso las frías estadísticas pueden no significar mucho a veces. Por ejemplo, hay pruebas estadísticas que demuestran que las personas que toman cursos de cerámica en la Toscana viven más que aquellas que no. (Risas) Es indiscutible. ¿Es por la arcilla toscana? No, es porque la gente tiene suficiente dinero en sus bolsillos como para cuidarse en su vejez de las enfermedades de la edad. Sin embargo, si pongo un aditivo en la comida de un grupo de animales de laboratorio, y dicho grupo vive un 20 % más de tiempo que un grupo de control que no recibió el aditivo pero que recibió el mismo tratamiento en todos los demás aspectos, entonces es posible que haya encontrado un factor causal en su dieta. Y experimentos de este tipo realmente se han llevado a cabo. Debo decirles que la comunidad de estudiosos del envejecimiento está muy dividida. Pero si hay algo en lo que coincido con mis oponentes, es en que ayunar de forma regular prolonga nuestra vida - y funciona para toda clase de organismos. Tomemos como ejemplo a las bacterias. Aquí vemos un gráfico que muestra la esperanza de vida de una bacteria. Cuando practican el ayuno, representado aquí por una línea punteada, viven muchos más años. Lo mismo aplica para los hongos, los gusanos, las moscas, los ratones, y hace solo dos años se demostró en EE.UU. que aplica también para los simios. El problema aquí no tiene que ver con ser o no delgado. Funciona también para los amantes de la gastronomía. Aquí vemos otro experimento que fue realizado en EE.UU. ¿Qué fue lo que hicieron aquí? Un grupo de ratones fue alimentado en base a una dieta alta en grasas, algo así como la de McDonald's, con la cual pudieron comer tantos trozos de queso, de día y de noche, que, quién lo hubiera imaginado, los ratones engordaron, se enfermaron, y su hígado se tornó graso y mostró valores anormales. A otro grupo de ratones se le dio la misma cantidad de queso, con la diferencia de que a este grupo se lo alimentó con pausas. No se le permitió comer nada durante el día, pero comieron el doble por la noche. Estos ratones eran delgados, sanos y no sufrían de hígado graso. Incluso a pesar de que ambos grupos de ratones consumían las mismas calorías, las mismas cantidades, uno de los grupos era sano y el otro no. ¿Qué fue lo que sucedió? El proceso denominado "limpieza celular", o "autofagia", se activó. Cada vez que un organismo o una célula deja de recibir alimento, el organismo comienza a desintegrar los componentes innecesarios de la célula o aquellos que estén dañados, para recuperar energía a través de ellos. Y tiene sentido que así sea. Aquí vemos cómo las "bolsas de basura" se forman de manera regular en la célula, principalmente alrededor de los restos que se van acumulando con la edad, y luego se fusionan con el "estómago" de la célula. Estos componentes son cortados en pequeños trozos y están listos para ser reutilizados por la célula como energía. De esta forma, se limita el daño que se acumula con la edad. Es el equivalente molecular a la catarsis, o la purificación del espíritu, de la cual suelen hablar las personas que practican el ayuno. Así que, en resumen, el ayuno habitual prolonga la vida de los organismos más diversos y, por lo tanto, quizás podamos suponer que también funciona para los humanos. Lo que aprendemos con esto es que, al contrario de lo que recomiendan las revistas sobre dietas, no deberíamos reprimir cada pequeña sensación de hambre con 20 porciones pequeñas de comida al día. No, cuando tengan hambre, deben pensar lo siguiente: "Tal vez la autofagia acaba de iniciarse". Recibamos al hambre con los brazos abiertos. Esto también tiene sentido desde la biología evolutiva. ¿Qué hicieron los humanos durante el 99,99 % de la historia humana cada vez que tenían hambre? Exacto, salían a cazar. Nosotros solemos salir a cazar a la nevera cuando tenemos hambre, y eso definitivamente va en contra de la biología. Ahora lo sabemos, por supuesto, ya que aparece en la Biblia, en Mateo, capítulo 26, versículo 41: "El espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil". El paraíso se ve totalmente distinto para nosotros. Aquí vemos la representación de Jan Brueghel de un paraíso medieval. Los tres hombres de esta foto están bien, comen todo el día, dejan que otros les sirvan. Eso es, se podría decir, lo que deseamos en nuestra imaginación. Teniendo eso en mente, comenzamos a buscar sustancias que activan la respuesta molecular al ayuno incluso aunque el organismo esté alimentándose. Esto puede que le interese a las personas cuya fuerza de voluntad no es lo suficientemente fuerte como para soportar un ayuno ocasional. Y puede que nos salve de una de las peores encrucijadas en la vida. (Risas) La pregunta es la siguiente: ¿Podemos activar la respuesta al ayuno, la autofagia, la autodigestión celular, incluso mientras estamos comiendo? Hemos analizado cientos de sustancias, cerca de mil sustancias naturales. De hecho, hemos encontrado una, llamada espermidina. La espermidina es una sustancia que se genera de forma natural en todo organismo, pero que también disminuye a medida que el organismo envejece. Se encuentra mayormente en la piel. Una persona de 30 años tiene mucha menos espermidina en la piel que una de 25. Si agregamos espermidina a las células humanas, veremos lo siguiente: Esta es una célula humana, el cuerpo de la célula, el núcleo. Si le agregamos espermidina, veremos miles y miles de esas pequeñas bolsas de basura desarrollándose en la célula, las cuales se deshacen de los deshechos que se acumulan con la edad. Las células en ayuno se verían exactamente así. Y esto funciona incluso en los organismos más variados. Aquí, por ejemplo, se ve parte del músculo de una mosca. Entonces, hemos encontrado una sustancia que activa la respuesta molecular de ayuno, la autofagia. ¿Esto quiere decir que los organismos que la tienen viven más tiempo? La respuesta, nuevamente, es sí. Aquí vemos la típica curva de supervivencia de una población de moscas. Estas son simples Drosophilas, moscas de la fruta. Todas mueren dentro de los 80 días, cerca de la mitad muere en los 40. Pero siempre que agregamos espermidina al agua para beber, mostrado en color, estos insectos viven más tiempo y tienen mejores posibilidades de supervivencia. También sabemos que las células humanas que tomamos de donantes ex vivo sobreviven en cultivo cerca de tres veces más si agregamos espermidina. Los estudios más recientes sugieren que la espermidina incluso alarga la vida de los ratones en sí. Y no solo mejora la expectativa de vida, sino que la hace libre de enfermedades, dado que estos ratones son mucho más inmunocompetentes. Por supuesto, ahora querrán saber dónde podemos encontrar la espermidina. Tal como su nombre lo indica, fue descubierta en el esperma, donde aparece en grandes cantidades. Pero quédense tranquilos, también hay mucha espermidina en el germen de trigo, en el pimiento verde fresco, en los champiñones, en el queso y en un producto hecho de soja fermentada, muy popular en Japón, conocido por el nombre de "Natto". Luego nos preguntamos, si la espermidina ayuda a contrarrestar los procesos de envejecimiento al deshacerse de los restos, entonces ¿puede que también ayude a contrarrestar la neurodegeneración? Seguramente saben que el común denominador de las enfermedades neurodegenerativas es la acumulación en el cerebro de "basura" hecha de proteínas en la vejez. De hecho, hemos realizado experimentos en relación a esto. Se sorprenderían. Lo hicimos en moscas de la fruta. Las moscas de la fruta también se vuelven olvidadizas cuando envejecen. Tienen más "basura" de proteína en sus cerebros cuando envejecen, y los mecanismos moleculares responsables de la memoria son muy similares a los de los humanos. Es posible que se estén preguntando: "¿Cómo rayos hizo este tipo para medir la memoria de las moscas de la fruta?" Este es el experimento que hicimos con Stefan Sigrist, de la Universidad de Berlín. Primero tomamos 100 moscas de la fruta, las dejamos encerradas aquí, les hacemos oler un aroma que ellas amen: el de la ciruela. Dejamos que se dejen llevar por el aroma a ciruela. Luego, tomamos a las mismas moscas, las dejamos pasar a la cámara siguiente y les damos a oler otro aroma que aman: la cereza. Dejamos que saboreen el aroma y mientras les damos una golosina. El clásico experimento con recompensa. Luego, tomamos a las mismas moscas y las ponemos aquí dentro. Entonces bajan en un ascensor, como se ve aquí, y cuando llegan al fondo, se las expone al aroma a ciruela desde un lado, y al aroma a cereza desde el otro. ¿Hacia dónde van todas? Obviamente, hacia el aroma a cereza. Excepto por estas dos, que son medio tontas. (Risas) O, mejor dicho, tienen personalidad: (Risas) Amo mis ciruelas y no voy a dejarme sobornar por una recompensa tan desdeñosa. (Risas) Esa sería una faceta de la personalidad que se intensifica con la edad... ...Y no solo en las moscas. (Risas) De hecho, descubrimos que podíamos hacer que la capacidad de recordar de las moscas volviera a los niveles de cuando eran jóvenes alimentándolas con espermidina, y que los cúmulos de proteína que se habían formado en sus cerebros se habían deshecho. Esto quiere decir que la espermidina no solo ayuda a combatir el envejecimiento sino también a las enfermedades relacionadas. Esto es muy importante porque lo que buscamos es extender una vida sana, y no solo extender la expectativa de vida, ya que no tendría sentido extender una vida llena de sufrimiento. No quiero irme sin antes darles algunos consejos prácticos sobre cómo mantenerse jóvenes. Como ya dije, el ayuno ocasional. No se trata de perder peso. Por cierto, ya existe un grupo de 20 000 personas en Austria que comen un día sí y un día no. Es la llamada "10in2 Community", bajo el liderazgo de Bernhard Ludwig y Erwin Haas. Y lo llevan muy bien, lo cual quiere decir que es viable. Otro consejo: eviten consumir demasiada azúcar de repente. El problema no son los carbohidratos, los carbohidratos complejos no parecen ser para nada peligrosos. El problema son los dulces. Ya es sabido que los shocks de azúcar pueden causar diabetes, incluso aunque uno sea delgado. También es sabido que el azúcar puede acelerar el crecimiento de túmores. Aquí vemos una población de lombrices envejeciendo. Luego de 30 días, todas están muertas. Pequeñas dosis de glucosa bastan para contribuir al envejecimiento. Ese es solo un ejemplo, pero funciona de forma similar en todos los organismos. Coman frutas y verduras de forma regular. Eviten tomar demasiados suplementos vitamínicos, o directamente eviten las vitaminas en pastillas. Se sabe que tomar suplementos de vitamina A y E puede provocar cáncer. Puede que eso no aplique para la vitamina D, ya que, durante el invierno, es fácil que tengamos una deficiencia de vitamina D dado que esta necesita que la piel reciba luz solar para producirse. Hagan ejercicio al menos tres veces por semana durante media hora. Esto es bastante obvio. El cigarrillo, a pesar de los ejemplos que les conté al principio, nos cuestan entre 10 y 15 años de vida, de acuerdo con estudios epidemiológicos. En esta era tecnológica, tómense un tiempo para relajarse de vez en cuando. La influencia de la oración y la presión arterial sobre la expectativa de vida es bien conocida. Porque los monjes viven casi tanto como las mujeres. (RIsas) La gente que bebe alcohol moderadamente vive más que la que no bebe. Las personas que beben vino viven más que las que beben cerveza, pero las que beben cerveza igualmente viven más que las que no beben alcohol. (Risas) (Aplausos) Los que toman bebidas alcohólicas destiladas mueren antes que los que no toman alcohol. ¿Por qué sucede esto? La gente supone que tiene algo que ver con ciertas sustancias. No, no, es muy simple. Si hay una mancha de grasa aquí en la ventana, la limpio con una solución a base de alcohol. Puede que algo similar pase en nuestro sistema cardiovascular. Depósitos de grasa, placas de colesterol, ambos podrían ser disueltos con alcohol. Esta es la razón por la cual el alcohol tiene un efecto cardioprotector. Tener una pareja o una familia está asociado a la longevidad; es recomendable no vivir cerca de una calle muy transitada. Tal vez estén pensando que es por las partículas de materia en suspensión, pero no, es por el ruido. Cuanto más cerca vive una persona de una calle muy transitada, mayor es la cantidad de hormonas de estrés que hay en su sangre. Incluso cuando uno dice: "Ya me acostumbré. Duermo bien. El ruido no me afecta". Eso no es verdad; esa persona igualmente tiene más hormonas de estrés en la sangre, lo cual no es bueno. La exposición al sol debe ser reducida para evitar daños en la piel. Sabemos que el ajo es bueno para el metabolismo. Por sobre todas las cosas, disminuye el nivel de colesterol. También descubrimos que la cebolla y el ajo protegen a los ratones de las enfermedades infecciosas. Nuestras abuelas ya lo sabían. por eso nos perseguían con su sopa de ajo, ciertamente no sin razón. Varios estudios demuestran que el chocolate amargo puede protegernos de la demencia. Hace no mucho salió un estudio que demostró que media barra de chocolate amargo al día puede hacer que una persona de 60 años tenga la memoria de una de 30. Se cree que el café tiene efectos similares. Sin embargo, no hay mucha información que demuestre que esto sea así. Hay estudios que dicen que sí, otros que no. Lo que está claro es que el café nos protege de la diabetes y, por tanto, ayuda a que el metabolismo funcione mejor. El café también es de gran ayuda a la hora de hacer ayuno, ya que provoca la autofagia, como ya hemos demostrado con Guido Kroemer, de París. Un muy exhaustivo estudio donde 100 000 personas fueron examinadas durante 15 años demostró que las personas que comen un puñado de nueces todos los días disminuyen su probabilidad de muerte en un 20 %. Este es un número considerable para un estudio epidemiológico. Funciona con la almendra, la nuez de Brasil, el pistacho, la avellana, la nuez de macadamia, el piñón, la nuez, pero no con el maní, ya que, visto desde la botánica, en realidad es una legumbre. Solo "pretenden" ser nueces; en realidad vienen de una leguminosa. Así que este punto no se cumple en cuanto al maní. El siguiente punto es un tanto delicado. Eviten consumir demasiada proteína animal, es decir, carne y lácteos, pero solamente si tienen entre 45 y 65 años. Un nuevo estudio demuestra que si una persona entre esas edades consume demasiada proteína animal, el riesgo de contraer cáncer aumenta tanto como si fuera un fumador compulsivo. Esto no es así para los años subsiguientes, en los que la proteína animal resulta beneficiosa, y tampoco es así, por supuesto, en el caso de los niños y adolescentes en desarrollo, que necesitan consumir proteína animal; tampoco para las mujeres embarazadas y para aquellas que deseen estarlo. Eviten el dogmatismo en la comida. Hagan lo que hagan, traten de estar delgados. (Risas) Friedrich Nietzsche sabía esto y dijo: "La objeción, la travesura, la desconfianza jovial y el gusto por la burla son indicios de salud; todo lo incondicional pertenece a la patología". Este es el señor Salvatore Caruso, que en cierta forma ha vivido de acuerdo a este régimen y ha llegado a los 108 años de edad. Es de la región donde nací, Calabria, de un pueblo vecino. Nunca se ha enfermado y sigue muy bien de salud. Él no es un caso paradigmático aislado, no es una anécdota. Él realmente vive en un lugar donde hay muchos vecinos centenarios de buena salud. Y él siguió las reglas nutricionales que les mencioné hoy a Uds. Entre todos los experimentos que describí, hay un hecho importante que no debemos pasar por alto: el principal problema de envejecer nunca parece ser únicamente un problema biológico, sino que es un problema que involucra a toda la sociedad, y, por tanto, ha sido abordado por la psicología. A las personas mayores no se las deja hacer mucho por sí mismas, y ese puede que sea uno de los peores errores de nuestra cultura. Dostoevsky escribió la mejor novela de la literatura mundial un año antes de morir: "Los hermanos Karamazov". Una obra que los críticos contemporáneos elogiaron por su frescura juvenil. Gracias por su atención. (Aplausos)