En África, los agricultores son importantes para la economía, pero también están expuestos al cambio climático. La agricultura regenerativa es una práctica agrícola que rehabilita el suelo haciéndolo saludable y productivo, restaura la biodiversidad y mejora la nutrición. Es el futuro. Regenerando la naturaleza a través de la producción de alimento Hay dos granjas innovadoras en Kenia que practican la agricultura regenerativa. Tenemos a Tamalu que usa agrosilvicultura y a Farmer Max que usa ganado para regenerar el suelo. La historia de esta granja no se trata solo de pollos, sino de usar pollos como herramienta para regenerar el suelo. Era lo habitual en cualquier granja pequeña, estaba muy pastoreada, labrada. Conseguimos 100 polluelos y a partir de eso creció. Durante muchos años el suelo fue cultivado con formas convencionales, lo que significa que con el paso del tiempo se pierden microorganismos al labrarlo. Se libera carbono, que es el alimento de los microorganismos. Estamos tratando de evitar cualquier alteración en el suelo y rehabilitarlo utilizando ganado, el cual fertiliza el suelo de manera natural. Las granjas avícolas convencionales se ubican en casas confinadas donde hay desde 3000 a 4000 pollos. Nosotros nos deshacemos de esa presión al trasladar los gallineros. En el prado de los pollos tenemos un rebaño vacuno que movemos unos 10 días antes que a los pollos. Pastan la hierba hasta unos 15 cm. Cuando los pollos se alimentan, los prados contienen proteína natural. Por lo tanto, sustituye su alimento en términos de proteína natural que pueden buscar y picotear en el suelo. Su excremento es nuestro recurso para el suelo. Ya que contiene gran cantidad de nitrógeno que fertiliza el suelo. Tratamos de rehabilitar la salud del ecosistema y es efectivo. Las ovejas vienen después de los pollos, estas mantienen la hierba a un determinado nivel que queremos para los pollos. En otras actividades avícolas el excremento es un problema, mientras que para nosotros es una herramienta para el suelo. Nuestro sistema agrícola mejora la naturaleza. Si tuvieras una vista panorámica de nuestra granja, verías dónde exactamente han estado los gallineros. La idea es que si tu suelo es saludable, tus pastizales están sanos, tus animales están sanos, nosotros y el planeta estamos sanos. La agrosilvicultura consiste, ya sea en agricultura en sistemas forestales o silvicultura en sistemas agrícolas. Por lo tanto, árboles y cultivos están en el mismo terreno durante largos periodos de tiempo. Los agricultores pueden producir un amplio catálogo de alimentos y de esta forma obtener más ganancias, en vez de ser dependientes de un cultivo o de una empresa. Estamos parados sobre túneles en los que solían crecer flores y hace dos años solo había arbustos, mucha maleza crecida y sin vida. Es increíble que se haya rehabilitado en menos de dos años. Nos decidimos por la agrosilvicultura, porque queríamos un sistema de producción alimenticia que generara una calidad superior, mejorara el suelo y retuviera tanto carbono como fuera posible. Y por supuesto, que mejorara la biodiversidad. Cuando fuimos a Brasil descubrimos las ventajas de la agrosilvicultura sintrópica sobre los demás tipos de agrosilvicultura. Nos dimos cuenta de que en Brasil usaban muchos de los cultivos que se usaban en Africa. Por lo tanto podíamos hacerlo aquí haciendo cambios mínimos para adecuarlo al contexto local. Si imaginas un bosque natural hay gran variedad de niveles. Tienes los cultivos de dosel, sobre eso los emergentes, el sub-dosel y el nivel del suelo. En algunas circunstancias, hay alimento creciendo bajo tierra. Estamos imitando eso en un sistema como este. En la agrosilvicultura sintrópica, todo se planta al mismo tiempo, ya sea a partir de semillas o de plántulas. Se empieza plantando árboles y otros cultivos que crecen lentamente y se ayudan mutuamente. Los que crecen rápidamente diversifican el sistema y producen alimento al inicio del sistema. Así tienes una familia de plantas que se autorreproduce preparando el suelo para ti. La diferencia entre Tamalu y sus vecinos es muy evidente. Las tierras de nuestros vecinos están desiertas o son monocultivos. Si es una temporada seca, todo está seco. Pero con nuestro sistema siempre hay vegetación. En Tamalu vivimos en un bosque de alimento. Incluso un tomate común y corriente, no solo es jugoso, sino que tiene sabor. Sin importar lo que sea cuando lo pruebas es delicioso. Hemos cosechado productos con una calidad muy superior. Empezamos con familias, pero ahora llegamos a tiendas en línea. Hemos vendido a restaurantes locales en Nanyuki y Nairobi. También vendemos nuestros productos a tiendas en Mombasa. La meta es suministrar sistemáticamente a los grandes supermercados urbanos, porque es parte de la visión circular de esta granja. Como chefs, nuestro deber es conseguir los alimentos con productores que se preocupen por el medio ambiente. Desde el punto de vista de un chef, aquí es donde empieza, se empieza a crear el sabor. Cada vez más, los clientes se manifiestan y exigen que su comida venga de fuentes responsables. El futuro tiene alimento para todos, no deberíamos pensar solo en nosotros. Somos parte de la naturaleza. Necesitamos un sistema agrícola estable con el que se almacene gran cantidad de carbono en el suelo y así producir alimento saludable para los seres humanos y otras partes del ecosistema. De esta forma, podremos seguir un camino de crecimiento basado en el concepto de economía circular.