Tommy, yo
Tommy, Tommy, escúchame,
él es el proveedor.
Él es el
proveedor, ¿sí?
No puedo perder este trabajo.
Yo entiendo...
Hablemos de esto mañana temprano, ¿ sí?
Hablaremos de esto mañana.
Está bien, buenas noches.
Hola.
Hazte para allá.
Estuvo divertido el trabajo, ¿eh?
¿Qué Haces aún despierta?
Ya es tarde.
Oh diablos, ¿qué hora es?
Ya pasó tu hora de dormir.
Pero aún es hoy
Nena, por favor, ahorita no.
No tengo energía para esto.
Toma.
¿Qué es esto?
Tu cumpleaños.
No dejabas de
quejarte de tu reloj roto...
Así que pensé que…
¿Te gusta?
Nena, esto es...
-¿Qué?
-Es bonito, pero...
Creo que está
trabado. No está...
¿Qué? No, no, no, no, no.
Ah, ja, ja.
¿De dónde sacaste
el dinero para esto?
Drogas.
Vendo drogas ilegales.
Ah, bueno.
Ya puedes empezar
a ayudar con la hipoteca.
Sí, ya quisieras.
Buenas noches, nena.
¿Hola?
Sarah, nena,
necesito hablar con tu papá.
Tío Tommy,
¿qué hora es?
Necesito hablar con
tu padre ahora. Hay algo...
¿Tío Tommy?
¿Hola?
¿Qué habrá pasado?
El teléfono no funciona.
Ay, diablos.
Olvidé darle esto.
¿Papá?
¿Papá?
Parece que lo que
inicialmente informamos como revueltas
-¿Estás aquí?
-Parece estar conectado...
-con la Pandemia Nacional.
-¿Dónde diablos estás?
Recibimos informes
de qué víctimas infectadas...
-muestran signos...
-Eso está cerca.
de mayor agresividad y...
Tenemos que
sacar a todos ahorita.
Hay una fuga de gas.
¡Oye!
¡Muévete!
-Fuera de aquí.
-Hay un alboroto detrás...
Señorita,
lárguese de aquí ahora...
Eh...
¿Qué fue eso?
¿Papá?
¿Papá?
¿Qué está pasando?
Ahí está su teléfono.
8 llamadas perdidas.
¿Dónde diablos estás?
¡Llámame!
Ya voy para allá.
-Llegaste.
-Sarah.
-¿Estás bien?
-Sí.
¿Entró alguien aquí?
No. ¿Quién podría haber entrado?
Aléjate de las puertas.
Solo...
Solo quédate ahí.
Pa, como que me estás asustando un poco.
¿Qué sucede?
Son los Cooper.
Algo no anda bien con ellos.
Creo que están enfermos.
¿Cómo que enfermos?
¡Jesús!
-¡Jimmy!
-¿Papá?
Nena, vamos, vamos.
Jimmy.
¡Jimmy, atrás!
¡Jimmy, te lo advierto!
-¡Santo cielo!
-¡No!
¡Sal, sal!
-Le disparaste...
-Sarah...
Lo vi esta mañana.
Escúchame, algo malo está sucediendo.
Tenemos que salir de aquí. ¿Entiendes?
Sí.
Tommy, sálgamos.
-¡Vamos!
-Sí.
¿Dónde diablos estaban?
¿Tienen idea de lo que está
sucediendo allá afuera?
Más o menos.
-¡Mierda! Estás lleno de sangre.
-Vamos, nena. Entra al auto.
No es mía. Hay que irnos de aquí.
Dicen que la mitad
de la ciudad enloqueció.
-¿Podemos irnos y ya?
-Algún tipo de parásito o algo.
-¿No me vas a decir que pasó?
-Después.
Oye, Sarah. ¿Cómo te sientes, nena?
Estoy bien.
¿Podemos escuchar la radio?
¡Sí, claro!
Gracias.
Sin teléfonos, sin radio.
Sí. ¡Maravilloso!
Hace un minuto,
el de las noticias no se hubiera callado.
¿Dijeron a donde ir?
Dijeron que... Que el ejercito
hizo bloqueos en las carreteras.
No hay paso al pueblo de Travis.
Entonces debemos
salir de aquí. Toma la 71.
La 71. ¡Allá vamos!
¿Ya dijeron cuántos muertos hay?
Probablemente muchos.
Hallaron a una familia mutilada en su casa.
¡Tommy!
Cierto.
Perdón.
¡Jesucristo! ¿Cómo pasó todo esto?
Nadie sabe nada.
Pero no somos el único pueblo.
Al principio dijeron que solo era el sur.
Ahora dicen que
también la Costa Este y Oeste.
¡Mierda!
Esa es la granja de Louis.
Espero que ese cabrón esté bien.
Estoy seguro que sí.
¿Estamos enfermos?
No, claro que no.
¿Cómo sabes?
Dicen que solo son...
Eh... Gente de la ciudad. Estamos bien.
¿Que no Jimmy trabaja en la ciudad?
Es cierto, lo hacía.
Pero estamos bien. Confía.
De acuerdo.
-Veamos qué necesitan.
-¿Qué haces? Conduce.
-Tienen a un niño, Joel.
-Igual que nosotros.
Pero tenemos espacio.
-¡Hey, hey! ¡Alto, alto!
-No te detengas, Tommy.
No viste lo que vi.
Ya llegará alguien más.
Les debimos haber ayudado.
¡Oh, esto es malo!
Todo el mundo tuvo la misma maldita idea.
Bueno...
Podemos retroceder y...
¿Qué demonios? ¡Salgamos!
¡Carajo!
-Retrocede ya.
-¡Dios mío!
-¡Salgan de aquí!
-¡Tommy!
¡Mierda!
¿Qué diablos está sucediendo?
¿Qué mierda está pasando?
¿Viste eso?
-Sí, lo vi.
-¡Carajo!
Da vuelta aquí. Da vuelta aquí.
No, no, no, no, no...
¡Vamos!
¿Qué pasa? Muévanse.
¿De qué huyen?
-Solo sácanos de aquí.
-Es lo que intento.
Oh, no.
No podemos parar, Tommy.
-¡Carajo, no puedo pasarles por encima!
-¡Entonces retrocede!
¡También hay gente atrás!
¡Ahí, ahí, ahí!
-Espera.
-¡Ya!
¡Cuidado!
¿Papi?
¡Oye!
-¡Oye!
-¿Qué?
¡Atrás, nena! ¡Atrás!
Escucha, estoy bien...
¿Pa?
Aquí estoy, linda.
Aquí estoy. Ven, dame la mano.
¿Qué pasa?
-Me duele la pierna.
-¿Qué tanto?
Bastante.
Tenemos que correr.
¡Dios mío!
Tú nos mantendras a salvo.
Vamos, nena.
-Sujétate bien.
-De acuerdo.
Papá, tengo miedo.
¡Joel, ten cuidado!
Mantén los ojos cerrados cerrados, nena.
¡Dios mío!
¡Sigan corriendo!
Esas personas se están quemando
No dejes de mirarme, nena
-No mires, Sarah.
-De acuerdo.
Vamos a salir de aquí. Te lo prometo.
¡Retrocede, son demasiados!
¡Por aquí! ¡Por el callejón!
¡Corre!
-¡Jesús!
-¡Está muerto!
¡Maldita sea!
Ya casi llegamos. Ya casi llegamos, nena.
¡Están pasando por la cerca!
¡Sigue adelante! ¡Encuentra una salida!
¡Vamos!
¡Joel!
¡Muévete!
-¡Ve a la carretera!
-¿Qué?
¡Ve! ¡Tú tienes a Sarah!
-¡Puedo correr más rápido que ellos!
-¡Tío Tommy!
-Te veré allá.
-¡Date prisa!
¡Papá, no podemos dejarlo!
Él estará bien.
Ya casi llegamos.
Están acercándose.
¿Papá?
Está bien, nena. Estamos a salvo.
¡Oye!
Necesitamos ayuda.
-¡Detente!
-Por favor. Es mi hija.
- Creo que su pierna está rota.
-¡Detente ahí!
De acuerdo.
No estamos infectados.
Hay civiles en el perímetro exterior.
Por favor, confirmar.
Papá, ¿y el tío Tommy?
Te llevamos a salvo y volvemos por él.
Señor, hay una niña pequeña.
Pero...
Sí, señor.
Escucha, amigo. Pasamos por un infierno.
Solo necesitamos...
Mierda
Por favor, no.
¡Oh no!
¡Sarah!
Mueve las manos, nena.
Lo sé, nena. Lo sé...
Escúchame. Sé que duele, nena.
Vas a estar bien, nena. Quédate conmigo
Está bien. Te voy a levantar.
Lo sé, nena. Sé que duele.
Vamos, nena. Por favor.
Lo sé, nena. Lo sé.
Sarah...
Nena...
No me hagas esto, nena.
No me hagas esto, pequeña. Vamos...
No, no...
No, no...
Oh no, no, no... Por favor.
¡Oh, Dios!
Por favor, por favor. No me hagas esto.
Por favor. Dios.
Las muertes confirmadas superan los 200.
El gobernador declaró emergencia estatal.
Había cientos de cuerpos en las calles.
El pánico se extendió mundialmente
tras un informe filtrado de la OMS
mostró que la última prueba de vacuna
falló.
Con los burócratas en el poder, podemos
finalmente tomar las medidas necesarias.
Los Ángeles es ahora la última ciudad
en estar bajo ley marcial.
Todos los residentes deben reportarse
a su lugar designado de cuarentena.
Los disturbios continúan
por tercer día consecutivo
y las raciones de invierno están en su
punto más bajo de la historia.
Un grupo que se hace llamar Luciérnagas
reclama responsabilidad por ambos ataques.
Su carta pública exige el regreso de todas
las ramas del gobierno.
Estallaron protestas tras la ejecución
de seis supuestos Luciérnagas más.
Aún pueden levantarse con nosotros.
Recuerda, si estás perdido en la oscuridad
camina hacia la luz,
cree en las Luciérnagas.