Nunca conocí a mi madre porque murió siete días después de traerme al mundo. Nací en una pequeña localidad llamada Myaung, en la división de Sagaing, cuando la Segunda Guerra Mundial llegaba a su fin. Mi abuelo paterno me dio un nombre birmano poco común: Nay Oke, que significa "gobernante del sol", porque nací en una época en la que los fascistas japoneses, con el emblema del sol en sus banderas, eran derrotados en Myanmar. También porque nací en sábado. Después de la guerra, la familia volvió a mudarse a Rangún y empezó mi educación en una escuela misionera católica llamada St. Paul's. Desde el primer año de primaria tuvimos que estudiar canciones infantiles escritas por nuestro poeta nacional, Min Thu Wun. Es el único poeta birmano incluido entre los 100 mejores poetas del mundo. En total escribió 13 canciones infantiles y eran muy populares, como ahora, y todos los escolares birmanos las pueden cantar de memoria. Esta es mi favorita: "သပြေသီးကောက် ဝါဆိုဝါခေါင် ရေတွေကြီးလို့ သပြေသီးမှည့် ကောက်စို့ကွယ်။ ခရာဆူးချုံ ဟိုအထဲက မျှော့နက်မည်းကြီး တွယ်တတ်တယ်။ မျှော့နက်ဆိုတာ ချိုနဲ့လားကွဲ့ မြွေနဂါးတောင် ကြောက်ဘူးကွယ်။ တို့လည်းကြောက်ပေါင် အတူသွားစို့ အုန်းလက်နွားလေးထားခဲ့မယ်။ သွားကွယ်၊ သွားကွယ်။". El catedrático G.H. Luce lo tradujo como: "Los recolectores de pomarrosa". "Julio, agosto, lluvia y diluvio, vamos a recoger la pomarrosa. Hola, cuidado con las espinas y el barro. Ahí es donde pelean las grandes sanguijuelas negras. ¿Sanguijuelas? ¡Puaj! Las criaturas sin cuernos. Lucharé contra serpientes o víboras. ¿Quién tiene miedo? Vamos todos ahora. Dejaré mi coco. ¡Vamos! ¡Vamos!" Estas canciones las tuvimos que estudiar de memoria y cantarlas en clase. Un día, estaba en segundo de primaria, mi profesor birmano me preguntó: "¿Conoces al poeta que escribió esta rima infantil?" Yo respondí: "Sí, por supuesto. Es Min Thu Wun". Él dijo: "No, no. Quiero decir, ¿le conoces personalmente?" Cuando respondí que no, él dijo: "El poeta es el amado de tu madre la universidad". Estaba totalmente atónito. La clase enmudeció, todos los ojos me miraban. Me sentí muy avergonzado. Tan pronto como llegué a casa, pregunté a mi hermana, que era siete años mayor que yo, y me lo explicó todo. Siempre pensé que mi madrastra, una mujer muy buena que me cuidaba con cariño, siempre pensé que era mi madre biológica. Me impactó, sí. Pero también agradecí el enterarme de quién era mi madre en realidad. Cuando llegué a la secundaria, encontré tanto el poema de mi madre como el de Min Thu Wun en mi libro de texto otra vez. Para entonces, todos los profesores y los estudiantes ya conocían la relación entre los dos poetas. Me sentí bastante cómodo al aprenderlos. Encontré que los poemas de mi madre eran sensibles, personales, a veces románticos y a veces melancólicos, mientras que los poemas de Min Thu Wun eran siempre cautivadores y ricos, a veces filosóficos, porque en su mayoría trataban de la vida rural y sus tradiciones. Solo tras estudiar los poemas pude visualizar a mi madre. Por supuesto que en casa tengo bellas pinturas y retratos de ella. Pero parecen bastante inertes. Sus poemas la resucitaron en mi mente. Cuando era joven, cuando me presentaban como el hijo de Khin Saw Mu, ese es el nombre de mi madre, el primer cumplido que escuchaba era: "Oh, tu madre era una verdadera belleza". Aunque nunca la había visto en persona, deduje que había sido bastante guapa. Pero, ¿qué pasa con sus pensamientos, sus emociones y sus sentimientos? Sus poemas me revelaron que había algo más que belleza en ella. Descubrí que era encantadora, amable, cariñosa y una buena persona, una madre devota, una hija obediente, una hermana afectuosa, y, sobre todo, una esposa dedicada. Me sentí muy gratificado de que compusiera esos poemas, esos maravillosos poemas. Sin ellos, nunca habría conocido a mi madre de forma íntima. Mis abuelos maternos criaron a sus hijos profesando, de forma estricta, las costumbres y las tradiciones de la familia aristocrática de Myanmar. Mi abuelo era un oficial superior del Servicio Colonial Británico. Y transmitió su legado a sus siete hijos. De forma sorprendente, los siete, cuatro hijos y tres hijas, resultaron ser alumnos brillantes. Cuando mi abuelo falleció, mi tío mayor tomó su lugar como cabeza de familia. Fue incluso más estricto que mi abuelo. Las tres hermanas tenían que pasar sus vacaciones escolares y universitarias con él, dondequiera que estuviera. No cabía la posibilidad de que mi madre se comunicara con sus amigos, o, por ende, con su amado, durante las largas vacaciones estivales. Así que, entre ellos, se comunicaban con poesía, a través de un diario muy popular por aquel entonces llamado "Gandha Yatha". Los poemas que escribieron durante las vacaciones de verano se convirtieron en clásicos, y ahora están incluidos en nuestros libros del colegio y universidad. Este es un fragmento de uno de los poemas que mi madre escribió durante los largos meses de verano. "လိပ်ပြာနဲ့ ကြာကုမုဒ် မြကန်သာဝယ် သင်းပျံ့ကြွယ်သည် သွယ်သွယ်ကနုတ် ကြာကုမုဒ်တို့ လဲ့လုတ်လဲ့လီ ဖူးဖွင်ချီသည် ဒေဝီနတ်မိ တို့နှယ်တကား။ ဖူးလိပ်ပြေစ ရွက်ညိုမြတွင် ရွရွနားကာ ပန်းလိပ်ပြာသည် သက်လျာနှမ ကုမုဒါငယ် စောင့်ရနောင့်ကို ချစ်ကြည်ညိုက" Bueno, solo es un fragmento. En el poema, la mariposa y un loto peculiar llamado Kumudra nunca pueden encontrarse porque la mariposa solo sale de día y el loto solo florece a la luz de la luna. Así que la mariposa se sienta en la hoja con suavidad todo el día y ruega al loto que florezca hasta que el sol se ponga. Cuando cae la noche, el loto florece bajo la luna, en busca de la mariposa hasta que amanezca de nuevo. Es un poema muy conmovedor. Creo que cuando mi madre lo escribió, anhelaba ver a su amado, seguro. Y aquí tenemos otro cautivador poema escrito por Min Thy Wun. Es un poema turbador pero cautivador, llamado "Nhinsi Pwint": "နှင်းဆီပွင့်။ လယ်တောက ပြန် ပန်ချင်တယ် ခရေဖူးဆိုလို့ မောင်ခူးကာပေး။ မနက်တုန်းဆီက ကြော့ဆုံးကို မောင်မြင်တော့ သူ့ဆံပင် နှင်းဆီပွင့်တွေနှင့် ဂုဏ်တင့်တယ်လေး။". Y U Khin Zaw lo tradujo al inglés, de manera concisa, como "Rosas": "La pasada víspera, a su señoría le apetecieron unas flores que encontramos en el camino del bosque silvestre. Las arranqué para ella, aquellas flores del bosque. Por desgracia, hoy en su cabello están las rosas, las rosas. ¡Qué guapa está con rosas!" Creo que el poeta dedicó de nuevo la poesía a mi madre. Cuando mi madre acabó su último año de universidad, tuvo que pasar las vacaciones de verano como de costumbre, con su hermano mayor, mi tío. Durante las vacaciones de verano mi tío, a toda prisa, acordó un matrimonio entre mi madre y mi padre. Por aquel entonces, mi tío era comisionado de distrito en Pyay, y mi padre era el comisionado adjunto. Tanto mi padre, U Ba Tint, y mi tío, U Tin Htut, pertenecían a la selecta minoría del Servicio Civil Indio, llamado ICS. Los británicos eligieron a los alumnos universitarios destacados y los enviaron a Reino Unido para una ampliación de sus estudios y les entrenaron en exclusiva para formar parte del Servicio Colonial Británico. Por aquel entonces, eran la crème de la crème. Mi madre, siempre una hermana obediente, no planteó ninguna protesta. Aceptó su destino como esposa de un oficial superior del Gobierno. Durante el mismo periodo, la literatura de Myanmar se enriqueció con una breve historia inmortal escrita por Min Thu Wun, llamada "ဘကြီးအောင်ညာတယ်", es decir, "El tío Aung rompió su promesa". Es una historia conmovedora sobre un joven de 10 años del pueblo que se enamoró de una estatua de una doncella de madera. Amaba el arte y visitaba frecuentemente al escultor del pueblo, U Aung. Le miraba crear bellas esculturas desde bloques de madera sin forma. Pensó que la figurita de la doncella era la más bonita que jamás había visto. Así que un día no pudo evitar preguntar tímidamente al escultor: "¿Cuánto costaría comprar la estatua?" Cuando el escultor dijo "una rupia", casi se le rompió el corazón, porque él nunca tendría ese dinero, solo conseguía un paisa al día como propina. En la época colonial, teníamos que utilizar la moneda india en rupias, annas y paisas. Una rupia eran 64 paisas. No obstante, rogó al escultor que la guardara para él, porque algún día volvería a por ella cuando hubiera ahorrado el dinero. El escultor le hizo la solemne promesa de que no la vendería a nadie. Así que el pobre joven dejó de comer sus aperitivos favoritos y empezó a ahorrar sus propinas en un contenedor de bambú. Cada noche, antes de irse a la cama, sacaba las monedas y las contaba. Era un proceso tan lento que decidió complementar sus ingresos con trabajos menudos, como recoger agua o madera para sus vecinos. Cuando había ahorrado lo suficiente casi lo suficiente, fue a informar al escultor de que en pocos días podría comprarla. Pero, por desgracia, la estatua ya no estaba allí. El escultor le dijo, en tono de disculpa, que un inspector de alto rango del Gobierno se la acababa de llevar. Al pobre chico se le rompió el corazón. No comió, ni durmió, ni habló con nadie durante días. Nadie sabía por qué. Pronto, una fiebre severa se apoderó de él y yació en su lecho de muerte. Antes de morir, pidió a su madre que donara sus ahorros del contenedor de bambú al monasterio del pueblo. Sus últimas palabras fueron: "ဘကြီးအောင်ညာတယ်". que significa: "El tío Aung no mantuvo su promesa". Una historia turbadora pero humana, que creó literatura clásica, y los gustos de los que, a menudo, sobrevivían a aquellos que vertían sus emociones en ella. El escritor, mi madre, mi padre, mi tío; todos los mortales han fallecido. Los poemas y las historias --los inmortales-- todavía vivían. La breve historia se convirtió en una obra muy popular, y todavía se interpreta por todo el país en los festivales de las pagodas. La gente del pueblo y los niños conocen la historia desde hace décadas. El año pasado, creo, en un festival literario en Rangún, se representó por un famoso director escénico, y fue el principal atractivo del festival. Bueno, esa es la historia de mi madre, fallecida hace mucho tiempo, pero inmortalizada en sus poemas y en los poemas e historias de Min Thu Wun. Hasta el día de hoy, los literatos de Myanmar todavía discuten y debaten sobre a quién se referían los poetas cuando escribieron estas obras maestras. Creo que ese asunto es irrelevante ahora. Porque lo que importa es que se han convertido en verdaderas joyas de la literatura de Myanmar y existirán mucho después de que nosotros nos hayamos ido. El amor de la gente por la literatura se está acabando en todo el mundo. Los dispositivos electrónicos que la pueden hacer más accesible no ayudan para nada, porque la generación actual cree que hay mejores usos para ellos, en vez de leer literatura clásica. La educación, a día de hoy, está enfocada al mundo laboral. El mundo se ha convertido en un lugar en el que se necesitan habilidades vocacionales para sobrevivir. Cierto, el trabajo te da de comer. Pero, ¿qué pasa con el corazón? ¿Qué pasa con el alma? Es la literatura y es la poesía lo que alimenta el corazón y el espíritu, lo que te hace humano. En conclusión, me gustaría citar un proverbio del Gran Buda. Gran Buda preguntó una vez: "¿Cómo puedes distinguir querer de amar?" Dijo: "cuando quieres una flor, la arrancas, pero cuando amas una flor, la riegas todos los días". "Si entiendes esto, entenderás la vida". Muchas gracias. (Aplausos)