Como ya tenía la dirección
de Chato Montesinos en Dolores Hidalgo,
llamé a Linda
para invitarla a ir conmigo.
Con la habitación número 16, por favor
¿Linda?
Habla Roberto.
Oye, mañana voy a ir a Dolores Hidalgo
para hablar con un señor que fue amigo
de mi abuelo. ¿Quieres ir conmigo?
Y este hombre en Dolores Hidalgo, ¿qué conexión
tiene con tu abuelo?
No sé. Se llama Chato.
Creo que podrá decirnos algo.
Tu abuelo...
Y Uds. saben poco de él.
¡Qué lástima!
Pues sí: él desapareció.
¿Y el tuyo, digo, tu abuelo Federico?
Mi abuelo tampoco habló mucho de él.
Todo lo que sabemos es que llegó de México.
Así, Linda y yo llegamos a Dolores Hidalgo.
Paseamos por el centro,
tomamos un helado
y hablamos de muchas cosas.
Dolores Hidalgo es una ciudad
con mucha cultura e historia.
Yo he estado varias veces allí
y sabía más o menos dónde estaba la casa de Chato Montesinos.
Tú estudias historia, ¿verdad?
Sí
A ver...¿Sabes quién era el padre Hidalgo?
Era el líder de un pequeño grupo
que empezó el movimiento de la indepencia
mexicana de España.
Muy bien.
Impresionante.
Mira, la casa de Chato
está al final de esa calle.
¿Señor Montesinos?
¿Sí...?
Me llamo Roberto Toledo.
Soy nieto de Federico Zúñiga.
Federico Zúñiga...
Sí, mi abuelo Federico.
Se casó con Nela, mi abuela.
Ah, sí, Federico. Claro, claro.
Hace tanto tiempo...
Pero, por favor, pasen.
Y está es mi amiga Linda, de los Estados Unidos.
Qué bien.
Por aquí. ¿Les puedo ofrecer un café?
Muchas gracias, señor.
Y bien, ¿Qué los trae por aquí?
¿Y cómo está Federico?
Es lo que no sabemos.
Nadie ha visto a mi abuelo
desde que se fue a los Estados Unidos
con Usted. Por eso
pensamos que tal vez Usted podría decirnos algo.
Hmmm. Pues sí,
Federico y yo nos fuimos juntos.
Nuestros padres eran compañeros de Zapata,
hombres de honor.
Llegamos a Tejas, a San Antonio, y entramos
en el ejército de los Estados Unidos.
Luego él desapareció...
quería hacerse ciudadano y tener dinero,
para poder traer a su esposa.
¿Cómo está ella..
Nela?
Está bien. Vive en San Miguel de Allende.
¿Y Usted no ha oído algo de mi abuelo:
una carta, un mensaje?
No, no sé nada.
Esperen. Tengo algo que
tal vez pueda ayudarles.
Cuando Federico y yo entramos al ejército,
abrimos nuestras cuentas en este banco,
el Banco de la Frontera, en San Antonio.
Tal vez allí puedan darles más información.
Buena idea.
¿Y Usted cuándo regresó a México?
Uy... Es una larga historia...
Después de salir del ejército...
Al diá siguiente llamé al Banco de la Frontera
en San Antonio. Hablé con el departamento de Cuentas Cerradas.
Cuentas cerradas. Habla De León.
¿En qué puedo servirle?
Buenos días, Señor. Busco información sobre
mi abuelo, Federico Zúñiga.
Otra vez: ¿el apellido?
z - u - ñ - i - g - a. Zúñiga.
Um.
no lo encuentro en la computadora.
Tengo que buscar en los archivos.
Pero antes, ¿de parte de quién?
Me llamo Roberto Toledo.
¿Cuál es su relación con este señor?
Como le dije, él es mi abuelo
y desapareció hace muchos años.
Soy su nieto; mi padre - el doctor Tomás Toledo-
es su hijo.
Pero Ud. dice que su apellido es Toledo.
Y su abuelo se llama Federico Zúñiga.
Hay un error.
No, no, lo que le digo es correcto.
él es Zúñiga.
No puedo darle esa información por teléfono.
Alguien de la familia
del Sr. Zúñiga tiene que presentarse
aquí en San Antonio...
con documentos, y tiene que ser una
persona mayor, un adulto...
¡Yo soy un adulto!
Con documentos, entiende, o no se puede hacer nada.
¿Turrón? Aquí De León.
Aquí Turrón.
Mire, un joven de Guanajuato, México,
acaba de llamar.
Pregunta por Federico Zúñiga...
sí, exactamente ése...
una cuenta antigua, pero de bastante dinero.
¿Estás seguro?
Sí, pero no entiendo lo de "Toledo".
Se llama Roberto Toledo, el joven.
Déjelo en mis manos. Y no hable con nadie, ¿eh?
Entendido.
Aquí Turrón. Sí, necesito un boleto
para Guanajuato. El próximo vuelo, hoy si es posible.