[Damián Ortega: Alias] [Ciudad de México] Traté de organizar mi propia carrera trabajando como un dibujante en el periódico izquierdista. Haciendo esas caricaturas, sobreviví durante muchos años. Era divertido, pero era muy exigente. Comenecé a combinar el arte y los cómics. Utilizaba un alias al hacer mis caricaturas porque siento que no es la misma personalidad la que hacía las caricaturas y las obras de arte. Estaba dividido completamente en el propio entendimiento de mi mismo. Pero, fue el primer acercamiento a los libros de Alias. La editorial Alias en un proyecto ambiguo una nueva experiencia porque está traducido en otro idioma. Es la apropiación del conocimiento adaptado a nuestra vida nuestro propio contexto en la Ciudad de México. Gabriel Orozco me regaló la entrevista original de Marcel Duchamp y me dijo "Debes leer cada página de este libro, porque lo amarás". Mi inglés era peor de lo que es ahora e intenté leerlo pero, no pude entenderlo muy bien. Le pregunté a un amigo si podría traducir un poco al español. Y al final, tuve el libro completo traducido con un montón de bromas en la traducción. Es bello, porque al final Duchamp está fuera de contexto lo reinterpretó y se convirtió en un mexicano [RISAS] que vive en la Colonia Roma o algo así. Este, de Cildo Meireles a Lawrence Weiner también hizo la traducción. Le gustó mucho la idea y me propuso hacer la portada. Fue realmente genial. Mi generación no tenía nada de esta información sobre arte contemporáneo. Era una época dónde no teníamos internet o teléfonos celulares. Compartíamos información a través de fotocopias y libros. Uno de nosotros puede viajar a Europa, Estados Unidos o a Sudamérica y traer algunos libro de vuelta sobre artistas internacionales. La apropiación es una declarción porque da la oportunidad de recontextualizar el conocimiento Al final, cada país ofrece una forma especial de pensar.