[Rafael Lozano-Hemmer:
"Una grieta en el reloj de arena"]
Pienso que los monumentos más interesantes
son los monumentos que desaparecen,
se cuestionan a sí mismos,
o que complican
algunas de esas historias
que nos contamos a nosotros mismos.
(sonido de sirena)
[Museo de Brooklyn]
He propuesto
desde hace mucho tiempo
un enfoque más anti-monumental,
un enfoque que es más
una plataforma
para que la gente se autorrepresente.
Tuve COVID a principios
de marzo, aquí, en Nueva York.
Estuve bastante grave, tengo asma.
Fue una lección de humildad
el sentir esta incapacidad para respirar.
Sentí que muchas de las historias
que estaba escuchando
tenían que ver con familiares
que iban al hospital, enfermos,
y cómo no podías ir con ellos.
Dos semanas más tarde estaban muertos
y no podías ni siquiera
asistir a sus funerales.
Como Mejicano, creo que
pensamos mucho en la muerte
y en todos los rituales, los brindis,
y que las cosas que hacemos
para conseguir aceptarlo
y para decir adiós son críticas
para nuestra supervivencia como comunidad.
Y todo eso no pudo hacerse.
El Museo de Brooklyn está
trabajando en crear conexiones
entre estas obras de arte
y las comunidades de aquí,
de Nueva York, para crear una forma
de que la gente pueda juntarse
para recordar nuestra pérdida.
[Harry Trinh]
En la cultura china, la gente
no habla realmente sobre la muerte.
Se ve como una superstición
que podría atraer
más muerte o más mala suerte.
Aparte de la pandemia,
esto siempre ha sido así.
Y creo que con la pandemia,
la gente está muy asustada
o muy aprensiva para hablar de ello.
Mi tía falleció el pasado marzo.
Lo era todo para nosotros.
Fue difícil para nosotros
procesar o incluso admitir
que mi tía había muerto
porque la última vez
que la vimos fue durante
el Año Nuevo Lunar, poco antes.
Una cosa que la gente china hace
durante un funeral es
quemar billetes funerarios.
Y hay unas esculturas
de papel maché
que representan
a los dioses materiales.
Podrían ser una casa,
un coche, un iPhone...
Debido a que no pudimos
experimentar eso,
no tuvimos un espacio físico
para hablar de nuestros recuerdos
y tener el consuelo
de estar físicamente con gente cercana
para, con suerte,
llegar al día siguiente
sin estar tan triste sobre ello.
[Artist]
Mi estudio y yo decidimos hacer una obra
que permitiera que la gente se juntase
y viera un evento en vivo.
Consideramos importante
que fuera algo en vivo
a lo que pudiera acceder
gente de cualquier franja horaria
y que se pudiera experimentar
junto con los seres queridos.
"Una grieta en el reloj de arena" es
básicamente un brazo robótico
controlado por un software a medida.
Envías una fotografía de un ser querido,
un familiar o un amigo
en una página web llamada
"acrackinthehourglass.net".
La foto se analiza
y se va dibujando poco a poco
mediante arena cayendo
desde un reloj de arena.
Mientras la imagen va apareciendo,
hay dos cámaras que retransmiten
la acción en tiempo real.
Así que cuando participas,
puedes invitar a amigos para que
accedan a la página web y lo vean.
La obra es el resultado
de una colaboración
entre gente la de mi estudio.
La obra surge de un debate,
surge del deseo común de hacer algo
que nos permita, supongo,
no sentirnos tan solos.
Cuando entras al vestíbulo
del Museo de Brooklyn,
y ves todas estas caras,
te das cuenta de que hay
un intercambio de miradas
por toda la sala.
La mayoría de las personas
en los retratos te devuelven la mirada.
La mayoría de la gente elige
fotografías en las que el sujeto
no parece distante
ni mira hacia otro lado
sino que mira
directamente a la cámara.
Hay un momento en el que
la imagen se inclina poco a poco
y la gravedad tira de la arena hacia abajo
haciendo que el retrato desaparezca
y recuperando toda la arena,
que es reciclada en otros retratos.
Todos los retratos hasta el momento,
cientos de ellos, son todos hechos
con la misma pequeña cantidad de arena.
Y para mí, eso era muy importante
porque había un sentimiento
de solidaridad universal alrededor de esto
y un sentimiento de conexión.
Cuando me siento optimista,
pienso que hay un sentimiento de empatía,
y que la idea
de que esto le podría pasar
a cualquier persona del planeta
nos une, hasta cierto punto
y nos une en la comprensión
de algo que es invisible.
A veces, la desaparición,
lo efímero te ayuda a recordar.