Era el imperio más grande
del hemisferio occidental,
con una población de
casi 10 millones de personas.
En un área de más de
900 000 km2,
su gente construyó
grandes centros administrativos,
templos y extensos sistemas
de carreteras y canales.
Lo hicieron en un terreno
inhóspito y extremo,
todo sin usar ruedas, caballos,
hierro o incluso lenguaje escrito.
Sin embargo, 100 años tras
su ascenso en el siglo XV,
el Imperio inca dejó de existir.
De acuerdo con la leyenda,
los antepasados de los gobernantes
incas fueron creados por el dios sol Inti,
y salieron de una cueva
llamada Tambo Toco.
Liderando a cuatro hermanos
y cuatro hermanas,
Ayar Manco llevaba
un bastón dorado con instrucciones
para encontrar el lugar
donde se hundiría en el suelo,
mostrando suelo fértil.
Después de muchas aventuras
y búsquedas extensas,
Ayar Manco y sus hermanos
llegaron al Valle del Cuzco,
donde el bastón perforó el suelo.
Después de luchar contra
la feroz población local nativa,
fundaron su capital,
y Ayar Manco se convirtió en Manco Capac,
el primer Sapa inca o rey de los incas.
La evidencia arqueológica sugiere
que los incas se asentaron primero
en este valle alrededor del 1200 d. C.
Siguieron siendo
un pequeño reino hasta 1438,
cuando casi fueron invadidos
por la vecina tribu Chanka.
El rey inca en este momento, Viracocha, y
su heredero designado huyeron atemorizados
pero uno de sus otros hijos permaneció
y con éxito reorganizó
las defensas de la ciudad.
Por su habilidad militar,
se convirtió en el noveno gobernante inca,
asumiendo el nombre
de Pachacuti o "Cataclismo".
Pachacuti expandió el dominio inca
a través de las montañas de los Andes,
transformando el reino en un
imperio mediante grandes reformas.
El territorio del imperio fue reorganizado
como Tahuantinsuyu, o "cuatro cuartos"
con cuatro divisiones gobernadas
por gobernadores que informan al rey.
Aunque los incas no tenían escritura,
usaron un complejo sistema
de cuerdas anudadas llamado quipu
para registrar números
y tal vez otra información.
Una burocracia basada
en decimales permitió una sistemática
y eficiente tributación
de los sujetos del imperio.
A cambio, el imperio proporcionó
seguridad, infraestructura y sustento,
con grandes depósitos con lo necesario
para vivir, para cuando hiciera falta.
Se construyeron
grandes terrazas y obras de riego
y varias especies
se cultivaron en diferentes altitudes
para ser transportadas
por todo el imperio.
Y fue durante el reinado de Pachacuti
cuando se construyó
el famoso estado de Machu Picchu.
El hijo de Pachacuti, Topa Inca,
continuó la expansión militar del imperio.
y finalmente se convirtió
en gobernante en 1471 d. C.
Al final del reinado, el imperio cubría
gran parte del occidente de Sudamérica.
El hijo de Topa, Huayna Capac,
lo sucedió en 1493.
Pero las campañas militares del nuevo
gobernante forzaron el tejido social.
Y en 1524 Huayna Capac sufrió la fiebre.
Los conquistadores españoles habían
llegado al Caribe algún tiempo antes,
trayendo enfermedades contra las que
los pueblos nativos no tenían resistencia.
Millones murieron en el brote,
incluyendo Huayna Capac
y su heredero designado.
El trono vacante encendió la guerra civil
entre dos de los hermanos sobrevivientes,
Atahualpa y Huascar,
debilitando en gran medida el imperio.
En 1532, después de finalmente
ganar la guerra civil inca,
Atahualpa y su ejército se encontraron
con los invasores europeos.
Aunque en gran medida superado en número,
Francisco Pizarro y
su pequeño grupo de conquistadores
anonadaron la fuerza mucho mayor
del rey con armas y caballos,
que nunca antes habían visto.
Atahualpa fue capturado y asesinado
alrededor de un año después.
Los conquistadores españoles quedaron
impresionados con la capital de Cuzco.
Pizarro la describió como tan hermosa
que "sería notable incluso en España".
Aunque la capital había caído
y la población nativa había sido destruida
por la guerra civil y la enfermedad,
algunos incas se replegaron
a una nueva capital en Vilcabamba
y resistieron durante 40 años.
Pero en 1572 los españoles habían
destruido toda la resistencia restante
junto con gran parte del legado físico
y cultural de los incas.
Así, el gran imperio inca cayó
aun más rápido de lo que había surgido.