Noto que me pregunto, Jonathan, en un
lugar como este, por qué algo tan trágico
y doloroso como la guerra es a menudo
recordado mediante la belleza, el agua,
la luz, mediante símbolos
que parecen tan lejanos.
¿No le parece que eso es una ironía?
Bueno, así es, y creo que
los soldados en actividad
buscan la paz que se ve
en este tipo de ambientes.
Los soldados y los militares
ven la guerra como un mal necesario,
pero buscan la paz.
Para usted, al pensar en la figura
en la que está pensando
gran parte del mundo
este próximo fin de semana,
con el estreno de "Hacksaw Ridge",
¿cuáles son las cualidades de la vida
de Doss que usted, como capellán,
ve que vale la pena enfocarse?
Bueno, como capellanes,
trabajamos en un ambiente secular.
Parte de lo que veo en la sociedad es esta
fragmentación real de los seres humanos,
de que lo que hacemos en el trabajo y en
la vida privada van por caminos distintos.
Por ello, los seres humanos están
más fragmentados en la sociedad actual.
Y lo que Desmond Doss hace
es mostrar su integridad,
- Así es.
- La integridad de su cuerpo, mente,
corazón y espíritu son una.
Y creo que nos da una gran oportunidad
de hablar de Dios con las personas.
¿Cuál es la diferencia que Dios
hace en nuestra vida?
A medida que se desarrolla la historia de
cómo los caramadas de Doss lo veían,
acaso algunos creyeron que él era alguien
que les traería buena suerte,
otros parecieron respetar
auténticamente su fe,
y no querían estar en el conflicto
si él no estaba allí,
porque lo vieron como cierto tipo de...
...no sé,
una fuerza espiritual en ese momento.
Entonces creo que se podría decir que hubo
un sentido sobrenatural de lo que sucedió,
porque si vemos lo que pasó en Okinawa,
de su compañía de 130 personas,
solo treinta se fueron; los otros cien
fueron dejados en la cima.
Y él permaneció allí,
y cómo lo muestran en la película,
--y lo hemos visto en sus documentales--
solo pidió: "Señor, dame uno más".
Un recordatorio vivo, dirían algunos,
de cómo podríamos esperar que
Jesús actuara en una situación semejante.
De que, sí, la despreocupación
por sí mismo,
la preocupación por los demás que pasaban
por momentos difíciles y desesperados.
Doss tiene cierta capacidad de resistir
las presiones que lo rodean
para adaptarse a lo que hacen todos, aun
cuando se refiere a su propia seguridad.
Cuénteme por un momento sobre
esa valía como un valor adventista.
Nuestra visión de dónde nos encontramos en
la historia suele destacar la importancia
de ser distintos,
de diferenciarnos de la cultura.
Doss pareció hacer eso
de una manera destacada.
Lo hizo mientras seguía
estando en la cultura.
Creo que parte de lo que olvidamos es que
era tan buen soldado como los demás.
Entendía las habilidades necesarias para
el campo de batalla, y así decidió operar.
Pero lo que veo en Doss es,
nuestro enfoque en la creación,
de que Dios nos creó a imagen de Dios.
Y como adventistas, tomamos
eso con seriedad de muchas maneras.
Hace poco escuché un sermón
sobre Mateo 14, sobre Pedro
que caminó sobre el agua
cuando Cristo lo llamó,
y Jesús le pregunta: "¿Por qué dudaste?"
cuando comienza a hundirse.
Confió en el poder de las olas por sobre
el poder de Cristo, y comenzó...
y creo que en Doss, hallamos un ser humano
que lo que hizo en esa cresta,
fue confiar plenamente
en el poder de Cristo.
Pero veo algo allí, a los
héroes y santos a lo largo de la historia,
de alguna manera ya han alcanzado la
sensación de paz sobre sus circunstancias,
y por ello actúan de maneras que a los
demás nos parecen intrépidas.
Así es. Sea que sobrevivamos o no,
está presente ese sentido de abnegación,
pero también creo que con Desmond,
cuando analizamos su caso,
sacar de 75 a 100 soldados
del campo de batalla,
había un claro sentido de que
no tenía dudas de que Dios lo usaría.
Reconocer que hay alguien allí,
herido, que está sufriendo,
que realmente necesita ayuda
en ese momento...
ni siquiera sabemos aún quiénes son.
- Así es.
- Ese es el compromiso de Doss,
no solo con sus compañeros,
sino con cualquiera que está por ahí.
Así es.