Hace seis años tomé una clase
de habilidades para presentación.
Fue un taller intensivo de cuatro días,
en el que fui videograbada continuamente,
y aprendí el ABC de las presentaciones:
A de autenticidad, B de credibilidad
y C de claridad.
Cuando llegó mi turno de ser evaluada,
los participantes del taller me dijeron que,
en materia de claridad,
yo era excelente: ¡bravo!
En cuanto a credibilidad, era buena;
pero en la A de autenticidad, era una lástima.
Prácticamente me dijeron que
no se me daba bien ser yo misma.
(Risas)
Al principio pensé:
"¿Cómo saben? ¡Ni siquiera me conocen!"
Y luego vi los mismos videos,
y supe que estaban en lo correcto.
Bien, eso significó mucho para mí;
soy asesora de altos ejecutivos,
a quienes ayudo para que sean mejores líderes,
y la autenticidad es un rasgo
muy importante del liderazgo;
si no me muestro como auténtica,
realmente no estoy dando
una impresión creíble de lo que hago.
Así que, por muy dolorosa, que fue esta experiencia
me hizo advertir que
quería aprender una nueva manera de ser.
Y di mi primer paso en este proceso,
el cual es obtener retroalimentación
de mis puntos débiles.
Aunque no lo crean, cuando recibí
esta retroalimentación
diciéndome que no parecía auténtica,
no lo sabía. No tenía idea,
no estaba consciente.
Entonces me hicieron darme cuenta de algo
que no estaba funcionando bien para mí,
y mi vida no volvió a ser la misma,
fue un regalo.
Ahora, quiero decir algo
acerca de aceptar retroalimentación.
Si alguien se tomó el tiempo de dártela,
simplemente tómala.
Desafortunadamente, en mi experiencia,
las personas pueden reaccionar
de cuatro maneras:
las cuales llamo las cuatro D.
Defensiva, denegación, desestimación y drama.
¿De acuerdo? (Risas)
Así que, la actitud defensiva es:
"No, no simplemente no entiendes,
no me comprendes".
La denegación es:
"No, estás equivocado, se trata de ti".
La desestimación es como:
"Tú sabes, es sólo... tú sabes, no es la gran cosa".
Y el drama; bueno, todos sabemos cómo es.
Bien, una vez que experimenté
la retroalimentación,
me di cuenta que quería más,
porque si tenía una manera de ser
que no me estaba ayudando,
probablemente, tenía más de una cosa que mejorar.
Así que tomé una evaluación
llamada Perfil EQ,
y una de las cosas que el perfil EQ hace es
evaluar tu orientación positiva-negativa.
Es otra manera de pensar
en qué tan optimista o pesimista eres.
Es algo como esta imagen:
Algunos de Uds. verán dos caras,
algunos verán el candelero,
pero están viendo la misma imagen.
es sólo cómo la están viendo.
Bien, lo que aprendí al tomar esta evaluación,
es que veo riesgos donde otros
ven oportunidades.
De nuevo, eso es un problema para mí.
Trabajo con emprendedores
que viven del riesgo.
(Risas)
Si estoy viendo riesgo donde ellos ven oportunidad,
no voy a ser capaz de ayudarlos mucho.
Bien, así es mi trabajo:
organizo mesas redondas de altos ejecutivos,
y uno de ellos vino a una mesa redonda un día
y quería usar el grupo para explorar
las posibilidades de un nuevo negocio.
Nos explicó el nuevo negocio,
recibió todo tipo de retroalimentación de los demás.
Le dijeron:
"Eh, sólo necesitas verificar tus estadísticas,
usar tus estadísticas para hacer un estudio de caso,
usar el estudio de caso para obtener fondos,
hacer crecer esto y venderle tu idea a Facebook.
Y yo sólo podía pensar:
"No vayas a dejar tu trabajo".
(Risas)
De nuevo, me di cuenta
de que ese era mi patrón.
Esa era yo haciendo eso que hago,
que es ver riesgo donde otros ven posibilidades.
No era que yo tuviera o no la razón,
era sólo mi patrón.
Estaba viendo a este emprendedor
caer en la grieta que yo veía
en la silueta de una candelero.
Esto me llevó al segundo paso
en aprender una nueva manera de ser,
que es darse cuenta de
cómo estamos siendo en el momento
en que actuamos
de manera inconsciente.
Le llamo involucrar a mi propio observador
o mirar sobre mi propio hombro.
Ahora, hay una razón muy importante
del porqué tendemos a no aceptar
la retroalimentación,
y por qué tendemos a no advertir
cómo nos comportamos.
Y es debido a esa creencia errónea
de que estamos bien,
o al menos, que todos los demás están mal.
Kathryn Schulz escribió el libro:
"Estar equivocado",
y dio una grandiosa charla TED al respecto.
Lo que encontró al investigar a las personas
que están equivocadas pero creen
estar en lo correcto,
es que hacen: ¿están bien mis dedos?
es que hacen tres suposiciones desafortunadas.
La suposición desafortunada número uno es:
"Todos los demás son simplemente ignorantes".
Suposición número dos:
"Todos los demás son algo idiotas,
son estúpidos".
Y la tercera suposición es que:
"Todos los demás son malvados,
están intentando hacerme daño".
Bien, mi experiencia con las personas
que reciben retroalimentación
es que hacen esas mismas suposiciones
acerca de la gente que les da
dicha retroalimentación.
Un profesor de la Universidad de Chicago,
mi alma mater,
hizo un estudio sobre retroalimentación
en el lugar de trabajo,
y encontró que somos muy malos en predecir
cómo nos ven los demás; y aquí está el porqué:
Experimentamos nuestra vida
como una película en la que conocemos
la historia, los sentimientos y los personajes, todo.
Y los demás nos experimentan como una
instantánea, ¿cierto?
una serie de instantáneas,
y construyen historias entre una otra, ¿no?
Bien, esto explica dos cosas bien importantes:
Primero, explica por qué somos
tan malos en predecir cómo nos ven los demás.
Y explica por qué pensamos que estamos
en lo correcto, ¿verdad?
Porque todos tenemos esta historia,
pero lo que sucede realmente es que
hoy nos comportamos de una manera
basada en algo de nuestro pasado.
Y la manera en que actuamos hoy ya no corresponde,
y las personas en nuestro alrededor puede verlo,
pero nosotros no.
Esto me lleva al tercer paso
de encontrar una nueva manera de ser.
Y es hacer una elección consciente, en el momento,
de ser diferente.
Todos tenemos maneras de ser
que no nos llevan a donde queremos,
ya sea ser controlador, o ser crítico,
o ser criticado, o estar preocupado.
Todos tenemos esas maneras,
y no estoy diciendo que sea fácil ser diferente,
recibir retroalimentación y aceptarla,
y darse cuenta, y tomar una decisión diferente.
No es fácil. No es fácil para mí
ser auténtica.
No es fácil para mí ser positiva.
Y no es fácil para mí ser cálida.
He recibido retroalimentación
de que no soy cálida.
(Risas)
Si puedo darme cuenta de que,
para cumplir con mi objetivo,
que es mejorar las vidas de muchos líderes,
entonces puedo cambiar esas cosas,
y actuar de una manera que
me lleve a donde quiero llegar.
Creo que todos tenemos un propósito en esta vida,
y que tenemos maneras de colocarnos obstáculos
contra nuestra propia expresión
de este propósito, ¿cierto?
Y si podemos simplemente recibir
la retroalimentación
de cómo nos estamos poniendo obstáculos,
y podemos adoptar y aceptar esta retroalimentación,
y darnos cuenta de cómo estamos
siendo en el momento;
entonces podremos tomar una decisión
consciente de ser diferente.
Los invito a echar un vistazo a sus vidas,
a ver qué obstáculos se están poniendo,
y aprendan una nueva manera de ser,
que les de más de lo que quieren.
Gracias.
(Aplausos)