[ JEFF WALL: UNA FOTOGRAFÍA IMPOSIBLE ]
Te hago una pregunta.
El caballero en la pared
que está mirando a la ventana
y que tiene puestos
esos fantásticos pantalones...
¿tú hiciste esos pantalones?,
¿los hizo él?, ¿se los impusiste?
¿Hay algún artificio allí?
¿Cómo describes eso?
(Jeff Wall) Es información confidencial.
(Risas)
(Entrevistador) Lo mismo con la otra foto:
con la mujer que se prueba un vestido.
(JW) Eso también es clasificado.
Lo que estás viendo que pasa, pasó.
Es todo lo que te puedo decir.
Cómo sucedió es secundario
al hecho de que sucedió.
Imaginemos que encontré
a este hombre en la acera
y le pedí que hiciera
lo que ya estaba haciendo
o si lo hubiera reconstruido
de manera elaborada,
¿cuál es la diferencia?
Quiero decir, obviamente,
hay una diferencia factual, histórica...
y en fotografía esa diferencia importa.
Artísticamente, en fotografía,
no debe importar más
que en otras formas de arte.
En la pintura no importa.
En la escultura no importa.
En el teatro no importa.
En el cine no importa.
Solo importa en una forma de arte:
en la fotografía.
Por eso tienes que lidiar con eso.
(Entrevistador)
¿Cuál fue el punto de partida?
(JW) Una memoria de hace unos 30, 40 años
que me vino inesperadamente.
Cuando me gustó el tema
enfrenté la pregunta:
¿Cómo hago para fotografiarlo?
La imposibilidad de verlo
hizo que se vuelva más interesante.
Así que, de ese lado del vestidor,
sabes que habrá un espejo
porque del otro lado hay una cortina.
Pero no es una imagen reflejada.
Porque si miras a los armadores
dicen "Barneys"
y no está deletreado al revés.
La cortina está cerrada,
nadie puede ver adentro del vestidor.
No se permite tener espejos
de dos caras en los vestidores.
No se puede tener cámaras
de vigilancia en los vestidores.
Todos estos son hechos.
Y si analizas la foto, vas a tener
que llegar a esta conclusión:
lo único que puedes ver
es lo que el espejo ve.
Así que es una foto
que no se puede tomar.
Esto causó muchas
dificultades interesantes.
Barneys es una tienda
en la cual puedes robar.
Así que tuve que ir a Barneys
y tomar fotografías de los vestidores,
medirlos, obtener cada detalle
y de ahí copiarlos.
(Clicks)
Te he contado algo en lo que creo:
si le pones atención a ese cuadro,
lo disfrutas, lo miras y te involucras...
entenderás todo eso.
Y cuando lo entiendas será apasionante.
El arte más hermoso está escondido,
pero no hay secretos.
No es como un secreto. Es una condición.