¿Podría la civilización humana
extenderse por la Vía Láctea?
¿Podríamos ir más allá de
nuestro pequeño planeta azul
a establecer colonias en la multitud
de sistemas de estrellas que existen?
Esta pregunta es muy desalentadora.
Hay unos 300 000 millones
de estrellas en la galaxia,
en un espacio de unos 160 000 años luz.
Hasta ahora hemos enviado una sola nave
fuera del sistema solar,
que va a un paso cansino de 0,006 %
de la velocidad de la luz.
A ese ritmo tardaría
más de 2500 millones de años
en ir de una punta a la otra
de la galaxia.
Y luego está la cuestión
de la supervivencia humana.
La brecha entre las estrellas
es simplemente enorme.
No podríamos vivir de forma sostenible
en la mayoría de los planetas,
y requerimos gran cantidad
de recursos para seguir vivos.
Y, sin embargo, hace décadas,
los eruditos encontraron
que es teóricamente posible
no solo expandir la civilización humana
por la galaxia,
sino hacerlo con bastante rapidez,
sin romper ninguna ley
conocida de la física.
Su idea se basa en el trabajo de un
matemático llamado John von Neumann,
que diseñó en papel máquinas
que podrían autoreplicarse
y crear nuevas generaciones de sí mismas.
Estas más tarde se conocerían
como máquinas de von Neumann.
En el contexto de la exploración espacial,
las máquinas von Neumann podrían
construirse en la Tierra
y lanzarse al espacio.
Allí, las máquinas autosuficientes
bajarían en planetas distantes.
Luego extraerían los recursos
disponibles y colectarían energía,
construirían réplicas de sí mismas,
las lanzarían a los planetas más cercanos,
y continuaría el ciclo.
El resultado es la creación
de millones de sondas
que se expanden al universo como
una gota de tinta en una pecera.
Los eruditos echaron cuentas y hallaron
que una sola máquina de von Neumann
viajando al 5 % de la velocidad de la luz
debería poder replicarse en la galaxia
en 4 millones de años más o menos.
Eso puede parecer mucho tiempo,
pero considerando que el universo
tiene 14 000 millones de años,
en una escala cósmica,
es increíblemente rápido...
el equivalente de unas
2,5 horas en todo un año.
Crear máquinas de von Neumann
requeriría unas pocas tecnologías
que aún no tenemos,
incluyendo inteligencia
artificial avanzada,
miniaturización,
y mejores sistemas de propulsión.
Si quisiéramos usarlos para enviar
seres humanos a la galaxia,
necesitaríamos otro salto tecnológico...
poder cultivar artificialmente
organismos y cuerpos biológicos
con elementos primarios
e información genética.
En cualquier caso, si en los
últimos mil millones de años
una civilización extraterrestre
creó una máquina tal
y la puso a multiplicarse
hacia nosotros,
nuestra galaxia ahora
estaría repleta de ellas.
Así que ¿dónde están esas máquinas?
Algunos astrónomos, como
Carl Sagan, dicen que
alienígenas inteligentes no construirían
máquinas auto-replicantes en absoluto.
Puede que se saliera de control,
reduciendo a los planetas a cenizas
para seguir replicándose.
Otros toman la ausencia
de máquinas como prueba
de que las civilizaciones extraterrestres
inteligentes no existen,
o que se extinguen antes de poder
desarrollar las tecnologías necesarias.
Pero todo esto no ha impedido que
los humanos imaginemos cómo sería
si existieran.
El escritor de ciencia ficción David Brin
escribe sobre un universo en el que
existen muchas máquinas de von Neumann
y proliferan de forma simultánea.
Algunas están diseñadas para
saludar a civilizaciones jóvenes,
otras para ubicarlas y destruirlas
antes de que sean una amenaza.
De hecho, en la historia
de Brin, "Lungfish",
máquinas de von Neumann mantienen ahora
estrecha vigilancia sobre la Tierra,
esperando que lleguemos a un
cierto nivel de sofisticación
antes de hacer su movimiento.
Por ahora, todo lo que tenemos
es la curiosidad y la teoría.
Pero la próxima vez que
mires el cielo nocturno,
considera que los miles de millones
de máquinas auto-replicantes
podrían avanzar entre las estrellas
de la galaxia en este momento.
Si existen, una eventualmente
llegará a la Tierra,
o quizá, solo tal vez, ya estén aquí.