Algunas personas creen
que todos tienen dos vidas
y que moriremos dos veces.
La primera muerte es la del cuerpo físico.
Y la segunda,
ocurrre cuando la última persona
que te conocía muere
y no hay nadie más que sepa quién fuiste.
Cuando era joven,
practicaba caligrafía con agua.
Lo que más me gustaba era ver cada letra
desaparecer tras escribirla.
A comienzos de los años 1990,
recogí una piedra de la naturaleza
y comencé a escribir mi diario en ella
con agua.
Poco a poco, esto llevó a una serie
de trabajos usando escritura de agua.
La memoria es
una parte esencial de nuestra vida.
Si pintamos o escribimos algo,
es porque queremos recordarlo.
Así que pensé en dibujar algo
que comience a desaparecer
antes que pueda terminar el resto.
Algo que no pueda completarse.
Siempre sera un trabajo en proceso.
Casi llegamos a la calle en la que vivía.
Mi padre fue muy estricto conmigo.
De pequeño lo respetaba y pensaba que
no había nada que no pudiera hacer.
Pero en la adolescencia,
creía que él no sabía nada.
Me abrazaba cuando era pequeño.
Todavía recuerdo sentir cosquillas por
su barba cuando tenía tres años.
Pero después,
ni siquiera nos dábamos la mano.
Yo quería tocarlo,
pero no me atrevía a hacerlo.