(música) "Alma de ochentas, quiero estar junto a ti Necesito que regreses hoy aquí" La historia de un país no solo es la lista de sus presidentes, ni el registro de sus eventos históricos más importantes. La historia de un país también sucede dentro de las casas de cada uno de nosotros. Pasa, y queda dentro de los recuerdos de toda la familia. Y esos recuerdos van tejiendo la tela. De cada uno de esos viene el hilo de algo inmenso que forma la identidad de una nación, compuesta de millones de vidas. Por eso de vez en cuando es importante detenerse, mirar atrás y entender. Entender cómo llegamos aquí. Cómo todos somos producto de lo que sucedió en nuestros tiempos. Y de nuestras decisiones. Tengo cincuenta y tres años. Me llamo Francisco Robles, igual que mi padre. Paco, para quienes me conocen desde siempre. Y hoy siento la necesidad de recordar mis dieciséis años, en 1978, cuando dejé de ser un niño, para convertirme en el hombre que día a día construye su historia. Nuestra historia. (el sonido del claxón) ¡Buenos días! Buenos días. Diez panes tolete por favor. Buenos días. Buenas. Buenos días, Paquito. H-hola Rosita, ¿qué tal? Dieciocho soles, joven. ¿Cómo, diez toletes no son quince soles? Ayer la Unidad subió solo ochenta, Paquito. Siempre algo sube de precio. ¿Lo de siempre? Um-hm. Paco, ¡qué tal pinta! (risas) La próxima vez que salgas a comprar pan, ven bien bañadito y bien tiso para que la Verónica te vea churro. ¿Qué me importa cómo me ve ella? Si total, nos conocemos desde los cuatro años. Chao. Chao. ¿Qué va a llevar, joven? ¿El chancay también ha subido? ¿Y los cachitos? (retumbo de moto) (música rock) ¿Salió mi papá? Se fue tempranito a la comisaría. Tu mamá te va a rezongar. ¿Por qué no avisas que no vas a llegar a dormir si en la casa hay teléfono. ¡Bruno! Mi mamá se va a morir. Si vas a estar fuera toda la noche, por lo menos avisa. Hay toque de queda, venga. ¡Nancy! ¿Amor? ¿Has visto mi máquina de afeitar? No, mi vida. Gracias, papi. Milagros, ya no seas fresca. Sal del baño. Ya tienes media hora allí. Sal. No puedo, estoy calata. Qué fresco eres tú, porque tú también te demoras en el baño. Los chicos tienen que bañarse, ya. Bueno, que se bañen más temprano, pues. Solo hay un baño y somos cuatro. Hace tiempo te lo digo: Tenemos que mudarnos, la casa ya nos quedó chica. Y en San Borja, los terrenos no están tan caros. Nancy, por favor. San Borja queda por donde el diablo perdió el poncho. Exagerado. Ya lo tengo todo planificado. Podemos construir una casa linda, preciosa, a nuestro gusto. El pan subió, no es mi culpa. ¿Ya ves, ya ves? Todo sube. Y tú quieres que nos metamos en una deuda que tal vez no podamos pagar. ¿Y qué van a comprar? Un terreno en San Borja. Sí. Pacho, por favor no seas miedoso. Yo ya hice los cálculos. Y si nos ajustamos, podemos sacar un hipoteca. Los intereses no están tan altos. Milagros, hija, apúrate, falta tu hermano. Yo no pienso a mudarme, ah. ¡Ni hablar! Ay, ¿por qué chillan tanto, eh? Ya salí. ¡Mi mamá quiere mudarse al fin del mundo, a la derecha! Por San Borja no pasa ni un solo micro. ¡Qué mentiroso! Pasa la doce. Y tampoco es que nos vayamos a mudar mañana. Cielo, míralo como un negocio. Tu madre se cree ministro de economía, mismo Silva Ruete. Ríanse, no más. Pero acuérdense que si compramos esta casa fue porque yo insistí. Fue lo mejor que nos pudo pasar. Amor, por favor. Piénsalo bien. ¡Dile que no! ¡Cállate y anda a bañarte! ¿Leche? Yo. (Paco grita.) (risa) Lo dejé sin agua caliente. ¡Anabel, apúrate o me voy sin ti! Tanto te demoras. No seas pesada, ay, pareces bebita. Es que la otra vez por esperarte las dos llegamos tarde. Uy. ¡Mili! Hola. Mili, préstame tu tarea de química. La mía está del queso, pero si quieres. Hola. Vero, ¿y si tu me das tu tarea de química? No te pongas esos ojos. No seas así. Hola Paquito. Oye, ¿estás juntando el album del mundial? Ya que nunca me sale ni la del Kemi ni del Plati ni Cuñao. Tato, que pavo eres. ¿Qué haces juntando albumes? Tenemos dieciséis años, no siete. Oye, ¿has visto la revista de calatas peruanas? Sí, sí, se llama Zeta. Te la presto pero si me prestas las figuritas, ah. ¿Pero me la prestas? Sí, vamos. Este dieciocho de junio será un día histórico para el país. Lu última vez que se votó fue las presidenciales de 1963, hace exactamente quince años. Por eso la importancia de estas eleciones para la asamblea constituyente, de la cual saldrá una nueva constitución, que reemplazará la vigente que data de 1933. ¿Profe, y si justo ese día pone un partido con Perú, que hacemos? Bueno, igual los mayores de dieciocho años tendrán que ir a votar. Esa fecha fue elegida antes que supieramos que el Perú pasaría a la segunda ronda. Profe Profe, tenemos que pasar, menos hay eta, pues Profe. Obviamente, yo también quiero que pasemos. Tenemos muy buen equipo. Cubillas es una de nuestros mejores jugadores. (burbullo) Ay, ay, ay, ay, tranquilo. Tranquilo, recuerden que estamos en clase de historia, no en clase de fútbol. Papi, pero, tú crees que puedes seguir hablando del mundial, no, eso es lo que a la gente le encanta. Y tú quieres pochar el peleo así. Okay, tarea. Tarea. Anoten. Averiguar qué partidos y qué candidatos postularon a las elecciones presidenciales de 1963. El que va no fue Belaunde, no, el que derrocaron. El arquitecto Fernando Belaunde. Profe, y según la historia, ¿usted nos puede decir porque todos los argentinos son tan churros, tan guapos y tan blancos? (oooo) En Argentina hay una gran inmigración europea, por eso hay muchos apellidos italianos. Y aunque tu pregunta va por otro sentido, nos sirve para aprender algo útil. A ver, ¿quién me puede decir quién es el actual presidente de la República de Argentina.? General Rafel Videla. Y llegó a poder por un golpe militar. A no pues profe, no vale responde su hijo. Pues, es trampa. Okay, ¿notaron toda la tarea? Sí. (en coro) No quiero que después me vengan con "no escuché," "estaba mirando por otro lado," "no sabía." Yo los conozco bien a todos ustedes. Profe, pero no sea maldito, pues, que nos mande averiguar unos datos que ya pasaron hace mucho. ¿De dónde vamos a sacar eso? (risa) Fue hace poco, Ánabel. Siempre se puede encontrar algo. Pucha, profesor, sería bien bacán tener una de esas computadores como, como en las películas, dónde apretas un botón, y "pah." Te parecen todas las respuestas. Me imagino que algún día será así, cuando todos de ustedes tengan mi edad. "Uuuh" Por el momento, a buscar el número "deca" del colegio ¿Una mero- qué, Profe? Ay, Paquito, dictame las respuestas a las preguntas que ha dejado tu papi, todo lo que falta no más. En un segundito rapidito no más. En el sesenta y tres tenía un año, ni que fuera mandara para recordarme. En mi casa solo hay enciclopedia de aquí. Allí yo creó que está. Si quieres, te ayudo hacer la tarea. Es bien papaya. Ay, bien papaya. No claro, pero si la Verito te lo pidiera sí se la darías todo, ¿No? Eh nos dimos cuenta. Ella quiere que la ayude, no que la haga toda la tarea. Es diferente. Ay, es diferente. No te pongas rojo. Anacruel, ¿vamos al kiosko? Acuérdate que a mi mamá no le alcanzó el tiempo ni para hacer el arroz, así que no tenemos almuerzo. ¿Te dio plata? Algo....No. No no no no no. No me mires con esa cara porque le prometí que le iba a llevar su vuelto. Mi mamá te dijo que no tenía sencillo, tenía en billetes de cincuenta así que lo que sobra es para mí porque soy la mayor. Dame la mitad porque.... No. NO. Hola. Está decidido. Este fin, le caigo a Vero. Vas a perder. Te va a tirar arroz. Na' que ver, oye. Me ha pedido ayuda. Es una señal. (música) Escuché una salsa bien bacán, pero, en una baja, de un pata panameño, Rubén Bláez Qué lumpen. Es la música de delincuentes, pués, ande. A mi, en cambio, Las Ocho me parece pajasa y me encanta Hectór Lavoe. Y esa canción, la que dice todopoderoso es el señor. Yo quiero ver por la segunda vez Fiebre de Sábado por la noche, porque me encantan los labios de John Travolta. Sé si imaginen que sería chapar esa boca. Quiero escuchar por cuarta vez su Loveplay. Anacruel baila moviendo sus brazos así... Ay no seas gracioso chocolate. (risas) ¿Ay, Mila, te acuerdas de la coreografía que hicimos el año pasado por mis quince? Sí sí sí. La Betina Sharp. ¿Cómo era? I love to love, but my baby just love to dance, ooh oh ¡Sandra, Anabél, llegó su papá! (gritos) Papi. Hola, preciosa (besan). Hola muchachos. Adivinen que este pichito traiga de la selva para ver el mundial. No. ¡Una telecolores! A todo color. Y este es importado de, eh a mi no me importa. Adiós al triste blanco y negro, bienvenida a la modernidad. Primera casa con televisor a colores en todo el barrio. ¡Es nuestra! Y Señor Hualdo, nos va a dejar ver los partidos del mundial en su televisor. Porsupuestamente que sí, muchacho. Mi casa es su casa. ¡Al fin! Desde mañana, desde mañana vamos a ver la victoria de la gloriosa selección peruana que llegue al mundial '78. Y se lo trajo de Brazil, ¿cuánto verde le costó? Ya pues Brunito, tranquilo, ¿qué pasa? Después su papa me acusa de contrabandista También dile que le consiga uno. No, mi papa no cuenta. Cierto, no habla mucho. Ay ay, oye. Mi jefe estudió bien tus papeles. Califican para un hipoteca, hasta 900,000 soles. Ay Pati, no. El terreno que me gusta puesta un millón doscientos mil. Nancy, yo no puedo hacer nada más. Búscanse un lote más chico. No, en San Borja no hay. Pero igual me mando. Estuve haciendo cálculos antes de venir, y jalando de todas partes, creo que puedo llegar a dar una inicial de ciento cincuenta mil soles. ¿Ciento cincuenta mil soles? Pero que esa es una fortuna. No sabes del esfuerzo que me ha costado montar esa platita, pero de verdad, tengo casi lo completo y lo resto, ya veo cómo me consigo. Ay Pati, gracias, amiga. De nada. Ahora solamente me queda covencer a mi marido. Tiene que firmar. Ay, pero Francisco te adora. Él va a firmar todo lo que tú le pides. Se ve que no y cómo. Es más cerco que una mula. Ay. Es un sueño. Mi chalecito con jardín. Mira. Solo sé que ajustándonos al máximo, vamos a lograr juntar todo el dinero para pagar el hipoteca del terreno y la construcción. Sí que sí. Ay no, pues, Prudencia. La Rosa me ha dicho que no quisiste apuntar unas cositas que te quiso llevar el otro día. Cositas, no, Charo. Rosa llegó con una lista de diez tazos de leche, dos kilos de azúcar, aceite, frijol canario, todo tu menú de una semana. Y discúlpame pero tu cuenta ya suma mil cien soles y hay varias cosas que ahorita ya subieron de precio. ¿Ay no, pues, Prudencia, cómo vas a subir el precio si acaba de haber paquetazo? Charo, Charo, comprende, por favor. Todo sube cada semana. Ya no podemos fiarle a nadie. Nunca. Pues. A ustedes, en fin, por la amistad que tenemos con Ramiro. Bueno, me parece muy bien que tengan esa consideración con nosotros. Ustedes saben que Ramiro es muy respetado por esta zona, y es por eso que a usted nunca le han robado nada, y... Prudencia, tengo que llamar a mi mamá. Sí. ¿Qué, qué pasa, mataron a alguien? ¿Se murió alguien, qué pasó? Mi papá llegó de Quito y trajo un televisor a colores a lo máximo. Televisor a color, hm. Debe ser recontrabando. Están prohibidos. Acá no transmiten a color, hijita. El mundial, sí. Todo el mundo se va a morir de envidia, ya veo. ¿A quíén habrá estafado el Hualdo, hm? Bueno, me voy con mis cositas. Permiso. Me apuntas, ya. Tu no eres una osiosa como Charo. ¿Por qué no trabajas? Con el sueldo de Francisco más el tuyo, todo sería más fácil, ¿no? Claro que lo he pensado. Mis hijos ya están grandes. Pero, ahorita, si le digo a Francisco que quiero trabajar en las calles, será para él un impacto. El pobre no sabe ni freír un huevo. Perdón. Halo. Ay, mamá, por fin. Tienes que llegar a la casa más rápido que inmediatamente. Mi papá ha venido de Quito y si no sabes lo que ha traído, te vas a caer de espaldas. ¿Qué tu papá ha llegado con qué? "Tengo ganas de reír, disfrutar del nuevo día, y al mundo entero contar que hay en mi canción. Chi. Chi. Qué linda Regina Alcobar, me encanta. No sabía que los comerciales también lleguen a colores. Casi todo es a color. Y ahora yo puedo ver de ahí en mi casa gracias a mi papito. Don Hualdo, me invites una cerveza para celebrar la compra de su nuevo televisor. Bruno, no seas tan fresco. Mejor no, Brunito. Tu papá se vaya a molestar conmigo. Él es muy recto. Y ¿porque se va a molestar mi papá? Yo soy mayor de edad, incluso voy a votar. Oye, no pueden cambiar el canal, puro regla, no más pasan. Ya ya ya. Mucha televisión atrófia el cerebro. Yo mejor me voy. Pero vas a volver para ver el partido con Escocia, ¿no? Tal vez. Hola, chicos. Señora. Mami, hola. Hualdo, ¿y eso? Eh, por lo menos saluda a tu marido, ¿no? Hace más de tres semanas que no nos vemos. Es un televisor, pues. No vamos a ver una radiola, ¿no? ¿De dónde salió? ¿Quién se lo compraste? Sabía que no iba a alegrarte, te vas a molestarte y toda la vina grita. A todo el mundo le gusta. ¿A ti no? Hablamos después. Domingo, trae de tu tienda unas chiclas y unos cigarros y unas gaseosas para ustedes, yo invito. Dile a tu papá que me anote en la cuenta. No le ponga mala cara a mi papá. Porque está feliz. Oye, paja la tele a colores, ¿no? Paco. Paco. ...¡Temblor! Madura, oye, bebona. (risa) Ay, no te hagas bien que antes morías del susto. Además no me digas bebona porque tenemos la misma edad. Te llevo un día. Soy el mayor. Lo siento por ti. Eres mayor que yo por veintidos minutos. Eso no es un día. A ver. (cantando) Mi mariposa que muere agitando sus alas, yo te aaamooo. Qué mal gusto tienes, oye. Es tu cassette. Tiene tu nombre. Mira. Ay, pero lo divulges. Qué me va a restar puntos. Con qué, ¿con Bruno? ¿Quien que te mueves por bailar excelente con la Verónica? La comida está servida. Ya las he hecho hasta alcanzar, si no, pueden dejar todo arreglado. Dile a Milagros, la desorden es de ella. Mamá no le hagas caso. Todo esto cochinazas son de él. No me deja ni un milimetro para poner mis cosas. Hasta tu mismo se le dejes castigada. Ay, qué quieres que hago, si no me dejas espacio para nada. Mira, ah, qué asco. Mira esta mesca, pese a qué nadie no puede respirar. Mamá, ¿cuándo nos vamos a mudar, eh? Estúpido. (música) Mami, si Paco no nos ayuda, tiene corona. Ahora no es momento de pelear. Necesito conversar con tu padre. Llevate a tu cuarto, ya. He conseguido que me aprueben el hipoteca del terreno. Pero, shh, calladita. Paco, dice mi mama que te toca barrer el tendal y recoger toda la ropa. ¿A esta hora? En el sótano no hay luz. Se quemó el foco. Hijo, por favor, no hay que argumentar. Anda con tu hermana. Ella te ayuda, ya. Ya sé lo que vienes a pedirme. Y la respuesta sigue siendo la misma. No. Cielo, necesitamos una casa más grande. Los chicos ya crecieron y no pueden seguir durmiendo en el mismo cuarto. Compremos el terreno. Nancy, tenemos esta casa y un pequeño carrito. ¿Qué es lo que quieres, una mansión? Panco. Comprar propiedades es lo mejor que podemos hacer. Son una respalda. No sabemos qué puede pasar en el país. Justamente porque no sabemos qué puede pasar con el país, no podemos endeudarnos más. Cielo. Me quieres. Me amas. Me adoras. Nancy, no es justo que me obliges a tomar decisiones importantes chantajes sentimentales. ¿Y qué quieres? No me haces caso. Eres un terco. Ya. ¿Cuánto cuesta el dichoso terreno? Un millión doscientos soles. ¿Qué? Pero, no te pongas así. Ya averigué. Y en el banco hipotecario, calificamos para un préstamo. Acá están los papeles. Y por la cuota inicial no te preocupes. Ya lo tenemos. ¿Y de dónde sacaste el tamaño de fortuna? Son mis ahorros. (risa) mi amor. Mira. No queda ningún problema. Solamente todos los meses me tienes que dar tu cheque y listo, yo me los haré. Nunca te he fallado. Hazlo por tus hijos. Nancy, hay más de sesenta porciento de inflación anual. ¿Qué pasa si un día me quedo sin trabajo y todo se va al demonio? Cuando te conocí, no tenías ni medio, y mira. Salimos adelante. Confíe en mi. Firma no más. Mi amor, eres el mejor esposo del mundo. Te adoro, te adoro. Ay, qué lindo. Me imagino nuestra casa preciosa con un jardincito. Podemos tener un árbol, y que de fruta, porque eso sí, me gustaría tener un jardín lleno de frutas de árboles, de plantitas. [música rock] [inaudible] hermano. Estoy de vacaciones. ¿Cómo te llamas? ¿Cómo te llamas? [música disco] Si me quieres tanto, ¿por qué no me lo demuestras? ¿En qué forma quieres que lo haga, hm? Hace más de cuatro meses que somos novios. Desde que empezamos a hacer... Por eso te prometí que nos casaríamos bien pronto. Señora, sirvo la comida, ya llegó el capitán. Este hombre es tarado, se hace, eh. No se da cuenta la polilla de la Gloria le puso una. Qué regia, es una maldita. Te va a ir la razón, linda mujer. Oye, el bonillo, qué papazote. Mire sus brazos. Mamá. Papá ya llegó. Ay, cualquier avisa, pues hijita. Ramiro, he preparado un pollo. Está para chuparse los dedos. Rosa, trae el estofago. Señora, el estofago ya está servido ya. A ver. Aquí está. Ya. Oye, tu papá primero. ¿Qué te pasa, oye? Malcriado. Ya, ¿cómo te fue en la comisaría? Tranquilo. Con esto del estado de emergencia y la suspensión de las garantías, por el momento no hay manifestaciones en las calles. Ah, deberían deportar a todos esos manifestantes. Así se acaban los problemas Si deportan a todos los manifestantes el Perú se quedaría sin gente. Señora, no soy perra para comer pura papa. Bueno, ya no hay presa, lo siento, no alcanza. Come eso. Mamá, creo que te tienes que poner en el tenedor, porque hay otra presa. Charo, no seas injusta. Rosa trabaja todo el día y tiene hambre. Por favor, sirvele. Gracias, capitán. Usted sí es un caballero. Me voy a mi cuarto. Ya trabajé más de diez horas. Buenas noches. Oye Rosa, no te puedes ir sin lavar el servicio. Rosa. ¡Rosa! Esta chica está cada vez más lisa, a la culpa de ustedes. Porque le dan confianza. Así son las muchachas, pues. Uno agarra la mano y se suben hasta el codo. Mamá, pareces a la madrasta de la Cinicienta. Déjale que descanse. Claro. Una es recta y le dicen que es mala. Por eso estamos rodeados de gente de malvivir. Oye, te cuento que el Hualdo trajo un televisor a color de contrabando. Mañana mismo. Se lo da permiso. Mamá, pero mañana juega Perú. ¿Contra quién? Contra Escocia. Tenemos que ir a ver el partido. No, de ninguna manera tú no vas a ir hasta que tu padre consigue un televisor mejor que la de Fisio que compró el marido, tú no verás en color. Papi, ¿puedo ir? No. Para que nosotros tengamos un televisor a colores aquí en la casa, primero tienen que permitir las importaciones y yo tengo que ganar por lo menos diez meses más. Hija, si quieres, anda. (música) Vero, ¿siempre vamos a ver el partido en la casa Gálvez? Bueno, no es que me muera por el fútbol pero la tele color es otra cosa. Le voy a decir a ver qué me deja ver los especiales de la National Geographic. Sí, son bien volcanes. Tus sueños con viajar yo sé. Sí, la única vez que viajé en avión fue puro para ver a mis abuelitos. Me encantó... si no fuera tan caro. ¿Mañana en la tarde quieres ir al cineclub? Hay películas bien pajas y siempre dejan entrar no hay censura. Podemos ir al del ministerio de trabajo, al Don Bosco, a la cooperativa Santa Elisa... No sé Paco, yo te confirmo ya. Oye, el otro día estaba viendo el canal siete, un... un especial sobre la mitad del mundo. Y la mitad del mundo, pues, que de las afueras de Quito en Ecuador. Ahhh, verdad. Es dónde se divide el hemisferio norte del hemisferio sur. ¿No te parece increíble? Puedes poner un pie en el hemisferio norte y el otro en el hemisferio sur. No es sentirse como que lo abarcas todo, ¿no? Algún día voy a ir, te lo juro. Sí, están bien volcanes. (música) Oye, tú quieres que todo el mundo se entere que ahora llegas, ¿no? ¿Él salió? Sí, él salió. Pero un día te atrapará. ¡Hola Milagros! (música) ...partido entre las selecciones de Escocia y Perú. Perú - Escocia de Mundial de Argentina, 1978. [inaudible] Oye, ¿no hay una forma de fabricar un lente como para que todo se vea más grande? ¿En serio tanto no ves? Ponte lentes la próxima vez. Encima que nos invitó criticas. Oye, silencio. Va a empezar. ...lado derecho el equipo escocés y lado izquierdo el equipo peruano. Comenzó el partido, atención. [gritos entusiastas] ¡No! [gritos] Shhh. Toribio Díaz. Lateral para el equipo peruano. [gritos entusiastas] Díaz. [gritos entusiastas] Pase a Escocia.