Lo que vamos a describir, se ha denominado "El Secreto de los Secretos", la sabiduría esotérica que conduce al Samadhi. Samadhi es la meta de toda espiritualidad, su unión con la fuente. La verdad sobre quién o qué eres. Esta verdad que trasciende la mente limitada, no puede alcanzarse por medio de la mente limitada. El estado de quietud no puede alcanzarse mediante el movimiento. Si quieres darte cuenta del punto de quietud más allá del pensamiento, abandona todo interés por pensamientos, sensaciones, toda preferencia, todo fenómeno generado por la mente y los sentidos, y descansa en conciencia pura. Hay dos dimensiones fundamentales de la existencia en este momento. Está lo que cambia y lo que no cambia. Pensamientos y sensaciones son un campo de fenómenos que cambian constantemente. Lo que no cambia es la conciencia de ese dominio cambiante. Solemos estar tan atrapados en el campo de fenomenos cambiantes, tan fijados en sus objetos, que ignoramos la dimensión de la consciencia. Así que comenzamos nuestra examinación de la Consciencia, siendo conscientes de la Consciencia. El reto de descansar en la Consciencia durante largos periodos de tiempo, es que la mayoría de la gente no ha cultivado la concentración y la ecuanimidad para permanecer consciente Somos adictos a la comodidad y la mente limitada querrá escapar de este ejercicio, lo encontrará profundamente incómodo y creará todo tipo de obstáculos o distracciones. Hay dos nudos principales que nos atan a la identificación con el ego. El cuerpo está apegado a la comodidad y la mente quiere saber. Si seguimos buscando la comodidad del cuerpo y seguimos buscando el conocimiento con la mente, nunca llegaremos más allá del cuerpo y la mente limitada. Seguiremos siendo como un animal de rebaño, una criatura que ansía el placer y evita el dolor, respondiendo a estímulos sin cesar, siempre 'haciendo', totalmente inconsciente de la dimensión de 'Ser'. Ser consciente, estar plenamente atento a lo que ocurre, sin la mediación del condicionamiento egoico, sin conceptos, sin controlar, manipular ni distorsionar, sin el filtro de la mente limitada, es estar 'Presente sin Elegir'. Presente sin elegir y, por tanto, sin operador o selector. Cada vez que la mente se mueve sin tu voluntad, incluso el más mínimo movimiento, se debe al filtrado mediante la autoestructura condicionada. El camino espiritual conduce a la cesación del torbellino de la mente. A observar a todos los niveles del Ser como vacíos. ¿Cómo abandono todo el hacer, cómo abandono la actividad mental? Escucha atentamente, ésta es la paradoja. La mente egoica limitada oye esa pregunta y quiere saber cómo, pero esa mente limitada no puede hacerlo. La mente siempre fracasará en cualquier intento de realizar la quietud, porque la mente es movimiento. La mente misma es movimiento, es un proceso interminable de hacer. Debemos lograr un cambio del 'hacer' al SER. El TÚ que crees quien eres es un proceso, un movimiento constante, una colección de patrones. Ese TÚ tiene que morir. Ese patrón patológico sobre ti debe terminar para entender Samadhi. Permite asimilar este concepto. Los maestros espirituales marcan esta instrucción para alcanzar el Samadhi: ‘Quedate quieto y sabe’. Permanece quieto y conoce el Verdadero YO. La Conciencia Primordial más allá del nombre y la forma. Permanece quieto y descubre que eres Dios. ¿Pero, qué quieren decir exactamente? ¿Qué es lo que se aquieta? Evidentemente, ningún cuerpo físico puede quedarse absolutamente quieto, existiendo dentro del tiempo y el espacio. Porque el propio tiempo-espacio en si mismo es movimiento. El tiempo-espacio es mente, el Universo es gran mente o Logos. El primer principio hermético es que 'El Todo' es mente, el Universo es mental. Si el Universo es mente y la mente es movimiento, ¿cómo puedes permanecer inmovil y saber? ¿Cómo puedes estar quieto en un globo terráqueo que gira a mil millas por hora alrededor de su eje, que gira a 67.000 millas por hora alrededor del Sol, que transita a 500.000 millas por hora alrededor de la Galaxia, y millones más a través del Universo? Tu corazón late, las células se mueven en tu interior, se digieren los alimentos, el cerebro produce ondas cerebrales. Tu sangre circula, la energía se mueve... ¿cómo podemos estar totalmente inmóviles? Cuando los Maestros espirituales dicen permanece quieto y sabe, deben estar hablando de algo mas, algo más allá del tiempo y del espacio, que trasciende lo físico y lo mental. Lo que se entiende por quietud carece de una palabra en nuestro sistema lingüístico moderno. La lengua sánscrita, la lengua de los yoguis, tiene términos más precisos que apuntan a lo no dual. El término 'shunyata' se traduce a menudo como "vacuidad", quietud o vacío. Es lo que se utiliza en relación con 'anata' o ‘no-yo’, la realización de la naturaleza de Buda. Quietud es quizá la palabra Hispana más cercana, pero es inadecuada para describir algo que no pertenece a este mundo dualista. Lo que se alcanza en realidad es la Conciencia Primordial, que está más allá de la quietud y el movimiento, más allá del tiempo. Es eterna, es el fundamento de Tu Ser, la naturaleza esencial de la realidad permanente. En realidad, está más allá del cambio y lo inmutable. Cuando alcanzamos nuestra verdadera naturaleza, resulta evidente que la quietud y el movimiento son una dualidad creada por la mente, el silencio y el ruido son una dualidad creada por la mente. Todo es ya inherente a esa quietud primordial, el movimiento del mundo es idéntico a la quietud. Estate quieto y sabe, permanece en movimiento y conoce. Todo es vacío danzando. No se trata de algo filosófico, sino de una forma totalmente distinta de interactuar con el mundo. En realidad se trata de soltar la interfaz, soltar la válvula reductora que es la autoestructura, y experimentar tu verdadera naturaleza sin la mediación de la mente limitada. El llamado mundo exterior se trasciende al realizar la quietud, que cuando se realiza, incluye aquello que trasciende. La dualidad de quietud y movimiento se derrumba. Realizar el samadhi, este gran despertar, es sólo el principio del camino. Patanjali dice que todo el esfuerzo del yoga está encaminado a la cesación del torbellino de la mente. Chitta vritti nirodha. Se podría decir que es la cesación del karma, la cesación de patrones inconscientes profundos en varios niveles diferentes. Cuando nos damos cuenta de nuestra verdadera naturaleza, cesa temporalmente nuestra identificación y reacción a la mente. Es como desenchufar un ventilador. Cuando desenchufamos un ventilador, la inercia de sus aspas lo mantiene en marcha y mientras no lo volvamos a enchufar, eventualmente acabará por aquietarse. El karma es simplemente la tendencia de la energía a seguir los caminos establecidos. Cuando la Conciencia vuelve a retomar el patrón, es como volver a enchufar el ventilador. La energía sigue a la Conciencia. La energía vuelve a los viejos patrones. Otra forma de describirlo es mediante la ley de la inercia. Una mente en movimiento permanece en movimiento, a menos que actúe sobre ella una fuerza exterior. En la matriz de la mente condicionada que llamamos Universo, la energía y el pensamiento recorren un ciclo a través de laberintos fractales que existen en un Continuo, desde los niveles micro a los macro, ramificándose y explorando sin cesar. Toda práctica espiritual es una intervención, una fuerza exterior, una Conciencia que desvía la energía para que no fluya por las vías condicionadas. Tienes que estar dispuesto a cambiar tu vida. Alguien puede practicar toda la meditación del mundo, pero si vuelve a sus mismos viejos patrones, a su vieja rutina, entonces el cableado permanece en su sitio. Debemos excavar y enfrentarnos a nuestras motivaciones inconscientes. Si a través de gran perseverancia y determinación, conseguimos no enchufar el ventilador, entonces se produce un cese real de las 'Vrittis'. Un silencio profundo que nace dentro de la autoestructura. Cada vez que nos identificamos con alguna preferencia producida por la mente y reaccionamos ante ella, volvemos a enchufar el ventilador. Cuanto más tiempo permanecemos descansando en la consciencia, más se purifican los samskaras. Cuanto más se desacelera el ventilador y el recipiente humano se hace más permeable a la Consciencia, más vaciamos el YO limitado.