El 99% de las personas no están dispuestas a hacer lo que sea necesario para hacer realidad sus sueños, los soldados de la Marina tienen un dicho: "Todos quieren ir al cielo, pero nadie quiere morir". La clave para hacer realidad cualquier sueño es la auto-disciplina. Ya sabes, algo tan simple como: comida y alimentarse. No se trata de tu cuerpo, sino de tu mente. Tener el control de tu mente para que puedas elegir las acciones que te beneficien. Todos los días elegimos basura que no nos beneficia. Así que, si el mundo te ataca, si el mundo lucha en tu contra, si el mundo te tiene presionado. ¿Te darías a ti mismo un golpe bajo? ¿Tu mismo vas a evitar conseguir lo que sueñas? Creo que a la palabra "disciplina" le han dado un mal nombre. Pensamos en ella como un castigo, no me refiero a la disciplina de esa manera. Estoy hablando de disciplina en el sentido de que sacrificas al placer inmediato a cambio del auto-respeto a largo plazo. Creo que la auto-disciplina es la definición de amor a uno mismo, cuando dices que te amas a ti mismo, eso significa que te comportartas de una manera que demuestra ese ese amor propio. La auto-disciplina es la clave de todo éxito material. No puedes ganar la guerra contra el mundo, si no puedes ganar la guerra contra tu propia mente. El amor propio es cuando te dices a ti mismo: "Ay hombre, mira, sé que tú y esa chica tienen una conexión real y realmente te gusta... pero, esa es la prima de tu novia, así que... Te amo demasiado para dejarte hacer eso". Es como si te dijeras a ti mismo: "Oye, hombre, mira. Sé que quieres comer esa pizza y sería muy bueno que lo hicieras... pero no puedo dejar que la comas, porque si comes esa pizza te vas a sentir como una basura, y te sentiras horrible. Te amo demasiado como para dejar que te la comas". El amor propio es: " Oye, mira, sé que tienes una prueba el lunes, sabes y sé que realmente quieres salir con tus amigos. Es sábado por la noche... quieres salir pero, si fallas en esa prueba vas a sentirte mal contigo mismo, lo sabes. Te amo demasiado para dejarte salir esta noche". La auto-disciplina es el amor propio. Si quieres ser feliz tienes que amarte a ti mismo, lo que significa que tienes que ser disciplinado en tu comportamiento. El camino hacia la felicidad permante es a través de disciplinar tu comportamiento. Tendemos a basar nuestra autoestima en lo que piensan los demás y esa no es realmente la autoestima. La autoestima se trata de lo que sentimos por nosotros mismos, y es peligroso permitir que otras personas determinen lo que sentimos por nosotros mismos. Es como mirarse un espejo roto. Al mirarte un espejo roto vas a querer cambiar tu rostro para verte bien en ese espejo roto y sucio. Las opiniones de los demás son otra basura para determinar cómo nos sentimos acerca de nosotros mismos. No importa de quién es la culpa si algo está roto, si es tu responsabilidad arreglarlo. Por ejemplo, no es culpa de alguien que su padre fuera un alcohólico abusivo, pero si es tu responsabilidad aprender a lidiar con esos traumas y construir una vida a pesar de todo. No es culpa tuya si tu pareja te engañó y arruinó tu matrimonio, pero sí es tu responsabilidad, encontrar una forma de tomar ese dolor y superar eso y cómo construir una vida feliz para ti. La culpa y la responsabilidad no van juntas... apesta, pero así es. Pero cuando alguien es culpable, queremos que sufran, queremos castigarlos, queremos que paguen, queremos que sea su responsabilidad arreglarlo. Pero no es así como funciona, especialmente cuando se trata de tu corazón. Tu corazón, tu vida, tu felicidad es tu responsabilidad y es tu responsabilidad únicamente. Mientras estemos señalando a los demás, y atrapados en encontrar culpables, estaremos atrapados en el papel de la víctima. Cuando estás atrapado en ese papel, estás atrapado y sufriendo. El camino al poder es asumir la responsabilidad. Tu corazón, tu vida, tu felicidad es tu responsabilidad y es tu responsabilidad únicamente. Puedes hacer sonreír a una persona, hacer que esa persona se sienta bien, puedes hacerla reír. Pero la felicidad de una persona, está completa y totalmente, fuera de tus manos. El requisito para pasar tiempo con cualquier persona es que te alienten y te inspiren y que alimenten tu llama. Mira tus últimos 5 mensajes de texto, ¿Son personas que aumentan tu llama? ¿O la están apagando? Deja el teléfono por un segundo y mira a tu alrededor, Mire a las personas que te rodean. ¿Están esas personas poniendo leña en tu fuego? ¿ O se están orinando en el? Quiero que mi vida, que mi trabajo, y que mi familia quiero que signifiquen algo. Y es como que tiene... Si no estás haciendo que la vida de otra persona sea mejor, estás perdiendo el tiempo. La diferencia entre talento y habilidad es uno de los conceptos más incomprendidos para las personas que buscan la excelencia. El talento viene naturalmente. La habilidad solo se desarrolla con horas y horas y horas de entrenamiento. Tú... ...tú no intentas construir un muro. No dices: "Voy a construir el muro más grande, el más grandioso muro de todo el mundo que jamás se haya construido". Así no se empieza. Dices: "Voy a poner este ladrillo de la forma más perfectamente posible. No habrá otro ladrillo en la faz de la tierra que se colocará mejor que este ladrillo que voy a poner en los próximos diez minutos". Y lo haces todos los días y de pronto tienes un muro y creo que, psicológicamente, la ventaja que me da sobre muchas personas con las que he estado compitiendo en diferentes situaciones es lo difícil de dar el primer paso, al ver la magnitud de la tarea. La definición de quién soy, queda muy clara. También re-define quién quiero ser. Y que sé con seguridad, que soy más fuerte de lo que pensaba. Lo sabes. No puedes evitar, hacerte la pregunta: ¿Qué haría yo si estuviera en los zapatos de Mohammed Ali? Me motiva el miedo. Odio tener miedo de hacer algo. Creo que lo desarrollé en mi juventud fue la actitud de atacar cosas las cosas que temía. ¿Por qué te asustaste en tu cama la noche anterior? ¿Para qué necesitas ese miedo? ¡Tan solo no vayas! ¿Por qué tienes miedo en tu cama 16 horas antes de saltar? ¿Por qué tienes miedo en el carro? ¿Por qué no puedes disfrutar del desayuno? El miedo es... ¡¿Miedo de qué?! No estás ni siquiera cerca de subirte al avión. Hasta que llegue el momento de saltar, en realidad, no hay razón para tener miedo. Solo arruina tu día. No tienes que saltar y en ese momento, cuando deberías estar aterrorizado, vives la experiencia más hermosa de tu vida. Dios puso las mejores cosas de la vida al otro lado del terror.