(Chasquidos) Nací con retinoblastoma bilateral, cáncer de retina. Me extirparon el ojo derecho a los siete meses de edad. Tenía 13 meses cuando me extirparon el ojo izquierdo. Lo primero que hice al despertar de esa última cirugía fue salir de la cuna y empezar a deambular por la sala de cuidados intensivos, probablemente en busca de la persona que me hizo esto. (Risas) Evidentemente, deambular por la unidad de pediatría no fue un problema para mí sin ojos. El problema era que me descubrieran. Son las impresiones sobre la ceguera mucho más amenazantes para los ciegos que la propia ceguera. Piensen por un momento en sus propias impresiones sobre la ceguera. Piensen en sus propias reacciones cuando yo llegué al escenario, o en la perspectiva de su propia ceguera, o en la ceguera de un ser querido. El terror es incomprensible para la mayoría de nosotros, porque la ceguera se ve como compendio de la ignorancia y el desconocimiento, una exposición desafortunada a los estragos de la oscuridad desconocida. Qué poético. Afortunadamente para mí, mis padres no eran poéticos. Eran pragmáticos. Sabían que la ignorancia y el miedo no eran más que cuestiones mentales y la mente es adaptable. Creían que debían educarme gozando de las mismas libertades y responsabilidades que los demás. En sus propias palabras, tenía que salir de casa, algo que hice a los 18 años. Tenía que pagar impuestos... Gracias. (Risas) Y ellos eran conscientes de la diferencia entre el amor y el miedo. El miedo nos inmoviliza de cara a los desafíos. Sabían que la ceguera sería un gran desafío. No me educaron con miedo. Antepusieron mi libertad a todo lo demás, porque eso es lo que hace el amor. Saltando al presente, ¿cómo me las arreglo hoy? El mundo es una unidad pediátrica mucho más grande. Afortunadamente, tengo un bastón largo de confianza, uno más largo que los que usan la mayoría de los ciegos. Yo lo llamo mi equipo de libertad. Impedirá, por ejemplo, que haga una salida indigna del escenario. (Risas) Veo el borde del precipicio. Ya nos advirtieron que cualquier accidente imaginable ya ha sucedido a los oradores en el escenario. No me importa sentar un nuevo precedente. Pero más allá de eso, muchos habrán oído que hacía chasquidos, al entrar al escenario... (Chasquidos) con la lengua. Son emisiones de sonido que salen y rebotan en las superficies de mi alrededor, al igual que la ecolocalización de un murciélago, regresan a mí con patrones, con información, igual que la luz lo hace para con Uds. Y mi cerebro, gracias a mis padres, se ha activado para formar imágenes en mi corteza visual, que ahora llamamos sistema de imágenes, a partir de esos patrones de información, como también lo hace su cerebro. Yo llamo a este proceso actualización de la ecolocalización. Es la forma en que he aprendido a ver a través de mi ceguera, para navegar a través de mi viaje, a través de la oscuridad desconocida de mis propios desafíos, por lo que me he ganado el apodo de "Batman excepcional". Acepto lo de "Batman". Los murciélagos son fantásticos. Batman es fantástico. Pero no me educaron para considerarme "excepcional". Siempre me he considerado igual a cualquier otra persona que navega por la oscuridad desconocida de sus propios desafíos. ¿Es eso tan excepcional? Yo no uso los ojos, uso el cerebro. Ahora, alguien, en algún lugar, debe pensar que eso es excepcional, de lo contrario no estaría yo hoy aquí, pero reflexionemos sobre esto por un momento. Todo aquel que enfrenta o que ha tenido que enfrentarse a algún desafío, que levante la mano. Guau. Bien. Muchas manos alzadas, déjenme hacer un recuento. (Chasquidos) Esto tomará un tiempo. (Chasquidos) (Risas) Bien, muchas manos alzadas. Manténganlas alzadas. Tengo una idea. Aquellos que usen el cerebro para navegar estos desafíos, que bajen las manos. Bueno, alguno todavía con las manos alzadas tiene desafíos propios. (Risas) Así que todos se enfrentan a retos, y todos nos enfrentamos a la oscuridad desconocida, endémica en la mayoría de los desafíos, a lo que la mayoría tenemos miedo. Pero todos tenemos cerebro que nos permite, que nos permite activar la navegación a través del viaje de estos desafíos. ¿Sí? La cuestión es que vine aquí y (Chasquidos) no me dijeron dónde estaba el atril. Así que uno no puede confiar en esa gente de TED. "Encuéntrate a ti mismo", dijeron. Por lo tanto... (Risas) Y la reverberación del sistema de megafonía no ayuda en absoluto. Así que ahora les presento a Uds. un desafío. Cierren todos los ojos por un momento, ¿de acuerdo? Y aprenderán cómo funciona la ecolocalización. Haré un sonido. Mantendré este panel delante de mí, pero no lo moveré. Basta con escuchar el sonido por un momento. Shhhhhhhhhh. Bien, nada muy interesante. Escuchen lo que sucede con ese mismo sonido cuando muevo el panel. Shhhhhhhhhhh. (Tono cada vez más alto y más bajo) Uds. no conocen el poder del lado oscuro. (Risas) No me pude resistir. Ahora mantengan los ojos cerrados porque... ¿han escuchado la diferencia? Asegurémonos. Para su desafío, díganme "ahora", al escuchar que el panel empieza a moverse. ¿Sí? Relajémonos. Shhhhhhh. Público: Ahora. Daniel Kish: Bien. Excelente. Abran los ojos. Bien. Así que solo con unos pocos centímetros se dan cuenta de la diferencia. Uds. han experimentado la ecolocalización. Todos podrán ser grandes ciegos. (Risas) Echemos un vistazo a lo que puede suceder cuando a este proceso de activación se le presta un poco de tiempo y atención. (Video) Juan Ruiz: Es como poder ver con los ojos y poder ver con los oídos. Hombre: No es una cuestión de disfrutar más o menos de esto, se trata de disfrutar de una manera diferente. Mujer: Se ve a través. DK: Sí. Mujer: Y luego vuelve poco a poco desde abajo. DK: ¡Sí! Mujer: Eso es increíble. Puedo ver el auto. ¡Madre mía! Hombre 2: Me encanta estar ciego. Si tuviera la oportunidad, sinceramente, no volvería a tener visión. Hombre 3: Cuanto más grande es la meta, con más obstáculos se enfrenta uno, y en el otro lado de esa meta está la victoria. (Italiano) Ha sido bellísimo verlo... (Aplausos) TK: ¿Parecen personas aterrorizadas? No demasiado. Hemos dado entrenamiento de activación a decenas de miles de ciegos y deficientes visuales muy diversos en casi 40 países. Cuando los ciegos aprenden a ver, los que ven parecen inspirados a querer aprender a ver el camino mejor, con más claridad, con menos miedo, porque este es un ejemplo de la inmensa capacidad que todos llevamos dentro para navegar por cualquier tipo de reto, a través de cualquier forma de oscuridad, hacia descubrimientos insospechados cuando se activan. Les deseo a todos un viaje más activador. Muchas gracias. (Aplausos) Chris Anderson: Daniel, amigo mío. Como puedes ver, hay una gran ovación, todos en pie en TED. Gracias por esta charla extraordinaria. Solo una pregunta más sobre tu mundo, el mundo interior que construyes. Creemos que tenemos cosas en nuestro mundo que tú como ciego no tienes, pero ¿cómo es tu mundo? ¿Qué tienes tú que no tengamos nosotros? TK: Una visión de 360º, porque mi ecolocalización funciona tan bien detrás como delante de mí. Funciona en las esquinas. Funciona a través de las superficies. En general, es una especie de geometría tridimensional difusa. Uno de mis estudiantes, que ahora es instructor, al perder su visión, tras unos meses, estaba sentado en su casa de 3 pisos y se dio cuenta de que podía oír todo lo que sucede en toda la casa: conversaciones, la gente en la cocina, en el baño, a varios pisos de distancia, a varios muros de distancia. Dijo que era algo así como tener visión de rayos X. CA: ¿Cómo te imaginas el lugar donde estás ahora? ¿Cómo te imaginas este teatro? TK: Lleno de altavoces, francamente. Es interesante. Cuando las personas hacen un sonido, cuando se ríen, cuando están inquietas, cuando beben, se suenan la nariz o lo que sea, yo escucho todo. Oigo cada pequeño movimiento que hace cada persona. Nada de ello realmente se me escapa, y luego, desde una perspectiva de ecolocalización, el tamaño de la sala, la curva de la audiencia alrededor del escenario, la altura de la sala. Como digo, toda esta geometría de la superficie tridimensional a mi alrededor. CA: Daniel, has presentado un trabajo espectacular que nos ayuda a ver el mundo de una manera diferente. Muchas gracias por eso, de verdad. DK: Gracias. (Aplausos)