Viene alguien muy especial.
¡Bienvenido!
Los espíritus me susurraron
sobre tu llegada,
¡pero no me dijeron que
serías tan encantador en persona!
Bueno, antes de que pienses en decir algo,
deja que eche un vistazo a esas manos,
¡las líneas nunca mienten!
¿Te importa si te toco un poco?
Me han dicho que soy muy cuidadosa.
No seas tímido, no muerdo,
te lo prometo.
Bueno, a menos que me lo pidas.
A ver que tenemos por aquí.
¡Fascinante!
Has tenido que viajar
mucho para llegar aquí.
Te han traído los susurros, ¿verdad?
La gente siempre
descubre que los susurros
viajan mucho más
rápidos que cualquier tren...
Tren... Espera.
¿Nos hemos visto antes?
Tus manos...
me resultan terriblemente familiares.
O quizá... solo interesantes.
Muy interesantes.
Tu vida nunca es aburrida,
eso por descontado.
Fíjate en la línea del destino, aquí
gira y se retuerce casi como
si fueras de una aventura a la siguiente.
Y, sin embargo tu futuro,
¡oh, cielos!
Tu futuro es tan
impredecible como el viento.
Aunque me atrevo a decir,
puedo decirte un par de cosas,
y no te preocupes,
son todas maravillosas... ¡Amor!
Sí, tesoro.
Te enamorarás de alguien
cuando menos te lo esperes,
si es que no lo has hecho ya.
Ahora, entre tú y yo:
Una bruja enamorada es mucho
peor que una condesa enamorada.
Hazme caso, sé lo que digo.
Calma, tesoro.
Va a ser divertido.
Curioso.
Sigo pensando en un tren,
qué raro, ¿no?
¿Por qué pensaría yo en semejante cosa?
¿Cómo me has encontrado?
La mayoría de los que
me visitan me encuentran
porque alguien les ha susurrado mi nombre.
Aquí viene todo tipo de gente,
ya sabes, escéticos,
creyentes, nobles...
Incluso los difuntos
se pasan de vez en cuando.
Oh.
¡Pues claro!
Esto no ha sido mera casualidad, tesoro,
¿verdad?
Es uno de ESOS encuentros.
En seguida nos encargaremos
de esto, tesoro,
pero déjame decirte,
que estas genial para alguien
con un trabajo tan difícil.
Aunque he de decir,
que también pareces
alguien que bebió su última
taza de té el siglo pasado.
Antes de que sigamos,
no puedo ignorar lo evidente,
tienes una cosita pegada a ti.
Creo que el término científico
es «residuo temporal».
Sí, son cosas que pasan.
Sobre todo a aquellos que, digamos,
juegan con las fronteras
del propio tiempo.
No te preocupes, tesoro. Lo limpiaré.
Bueno, vamos a limpiar
esos remanentes del pasado y el futuro.
No podemos dejar que
cargues tanto peso en los hombros.
Sí, mucho mejor.
Estoy muy contenta de que estés aquí.
Esta acogedora casita,
hasta el primer piso
está dedicada
por completo a mi arte.
Sí, debo admitir
que navegar las
expectativas de la sociedad
puede ser todo un reto.
Lo que ofrezco aquí, digamos que
no siempre se gana la aprobación
de aquellos que se consideran
más pudorosos.
Sin embargo,
cuento con el favor de la
Condesa de Dearlington,
así que los mantiene a raya.
Aún así, la discreción es clave
en estos asuntos... Antes de nada,
tengo un mensaje para ti,
algo que los espíritus
querían que te contase.
Podría decírtelo sin más,
pero eso no tendría gracia.
Es más seguro si
te lo escribo en la espalda.
Nunca se sabe quién
o qué nos escucha.
A ver si estás prestando atención.
Voy a escribir la primera letra
y me dices cual es, ¿vamos?
Seguro lo adivinas
es solo una letra.
¿No sabes?
Bueno,
Intentémoslo otra vez.
Esta es más fácil. La sacarás.
¿Qué crees que es?
Es el inicio de algo importante.
Más fácil aún,
algo que seguro te suena,
¿no?
¿Sabes ya cuál?
¿Vas a estar así todo el día?
Bueno.
¿por qué no tomas al de té?
Lo he hecho antes de que llegaras.