Cuando era joven, solía hacerlo mucho.
Cortaba caras o fotos de libros
y las pegaba en barras,
las montaba en mi cuarto
y apuntaba luces hacia ellas,
para que cuando apagase las luces,
se reflejasen en las ventanas.
Estaba intentando superar
el miedo a la idea
de su presencia en la ventana.
No diría que eso realmente ayudó.
Pero fue algo estimulante,
fue divertido.
Y fue el inicio de un proceso
que quizás esté ayudandome.
El voyeur de mi trabajo no trata de ser
una presencia intimidante o amenazadora
de la manera en la que creo que a veces
se retrata en películas y novelas.
Quizás es alguien que se siente
fuera de la ecuación.
El voyeur es en realidad lo que
yo soy en el proceso.
[«Dan Herschlein Looks Inside»]
[Dan Herschlein, artista]
Conducía todos los días a Long Island
para trabajar en estas esculturas
en el estudio de la casa de mis padres
en Long Island.
Me dieron la mitad de la habitación
y el resto lo ocupaban las cosas
que estaban allí,
apartadas.
Las esculturas están basadas
principalmente en Long Island
y en haber crecido allí,
y mis sentimientos sobre crecer allí,
y el tipo específico de
soledad que sentí allí.
Parte de mi fantasía sobre este lugar
era que iba a poder pasar toda la
noche despierto trabajando aquí
y estar solo.
Pero mis padres estaban durmiendo
y yo ni siquiera podía
taladrar la madera.
Eso me hizo darme cuenta de
que esta fantasía de soledad
ni siquiera es real.
«Night Pictures»
son un conjunto secuencial de imágenes,
que son relieves de yeso en madera.
Se diferencian de otras piezas
en que han aceptado el hecho de que
están en un plano fotográfico.
Se trata de usar una forma rectangular
para intentar decir lo mismo que
con frecuencia intento decir con
una escultura en el suelo.
Lo que la gente considera aterrador,
lo que categorizan como horror,
ese es el lenguaje
o el género
con el que creo que trabajo,
el horror.
Lo que enfatizo dentro de
de mi trabajo es
el deseo de consuelo o
la necesidad de consuelo,
o incluso la capacidad del
horror para consolar.
Antes de estar haciendo esculturas
o cualquier otra cosa,
un amigo cercano murió en un incendio.
Construí esta pierna
para que pareciese que estaba quemada.
Seguí cubriéndola y cubriéndola
hasta que se convirtió en carne
de una pierna normal.
Ese fue mi inicio con estas
esculturas más figurativas.
Sin duda, hay miedo involucrado.
Hay una especie de dolor en ello.
Pero ayuda más que simplemente
sentarme con mis propios pensamientos.
Creo que era importante
hacer algo con las manos.
Hay ciertas partes del cuerpo
en todas las esculturas que fundo.
Fundo mis manos, mis pies,
mis rodillas, mis pezones.
Esas son las cosas que dan un mayor
sentido de realidad a estas cosas.
Permite que el resto desaparezca
y se descomponga en puntos.
Mi gran misión es revaluar
la masculinidad.
La capacidad de un hombre de enterrar
sus propias emociones
hasta un punto en el que no se
pueden volver a encontrar otra vez
no se puede comparar.
No tiene cabeza porque la
cabeza está totalmente invertida.
Está dentro del cuerpo por completo.
Me hace sentir castrado
de una manera maravillosa.
Es una especie de autoreflexión.
Estoy muy ansioso.
Estoy asustado.
Estoy triste.
Pero están esos momentos en los que,
si puedo verlo tal como es,
ver estas cosas,
quizás está bien estar asustado o triste,
o ansioso.
No es una amenaza o algo así.
Es algo normal.