El dióxido de carbono, o CO2, es el gas principal de efecto invernadero. ¿Cómo entra el CO2 en nuestra atmósfera? Bueno, el carbono es parte de un ciclo. Empieza con el sol que calienta la superficie terrestre con más energía en una hora que lo que el mundo usa en un año. Las plantas, que son como chefs biológicos, toman esa luz solar y luego absorben algo de CO2 del aire, los mezclan y ¡bam! Crean una forma de energía almacenada en forma de carbohidratos como la glucosa y la sacarosa. El proceso se llama fotosíntesis. Cuando los animales como nosotros comemos las plantas nuestros estómagos convierten ese alimento en energía para nuestro propio crecimiento. Los gases de invernadero son un subproducto de este proceso y se liberan a través de los residuos. Al morir esas plantas, se descomponen y microorganismos descomponen los hidratos de carbono y, nuevamente, liberan gases de invernadero como subproducto. La energía proviene del sol. Luego se transfiere al avanzar a través de la cadena alimentaria. Pero a veces los organismos carboníferos, como plantas y animales, quedan atrapados en la tierra. Cuando esto ocurre, se comprimen bajo toneladas de presión, y se convierten en combustibles fósiles carboníferos como el petróleo, el carbón y el gas natural. Desde la Revolución Industrial, los humanos hemos extraído combustibles fósiles de la tierra y quemado, activando la energía almacenada para producir electricidad y motores. Pero eso también libera al aire millones de años de CO2 almacenados. Además, los seres humanos respiramos oxígeno y exhalamos CO2. Pero las plantas hacen lo opuesto. Los árboles absorben grandes cantidades de CO2, lo que equilibra el ciclo. Así, la deforestación reduce las plantas que almacenan CO2. Estamos atacando el ciclo por dos lados. Piénsenlo como una computadora que puede ejecutar pocos programas al mismo tiempo, ¿sí? Por lo general, al terminar un documento, lo grabamos, y lo cerramos, a fin de no sobrecargar a la computadora. Imaginemos que dejan de cerrar los documentos. Y que quedan todos abiertos a la vez. La computadora no podrá procesarlos. Se volvería más lenta, hasta congelarse, y con el tiempo estallaría. Eso podría pasarle a nuestro ambiente si seguimos sobrecargando el ciclo del carbono. ¿Hay alguna forma de reequilibrar el ecosistema? ¿Y la tecnología? La tecnología se define como una técnica que resuelve un problema. Las tecnologías sustentables son aquellas cuya salida es igual a su entrada. No crean externalidades negativas, como CO2, ni en el presente ni en el futuro. Es como que se autocancelan al resolver el problema. Para lograrlo, tenemos que inventar tecnologías sustentables. Si ponemos todas las ideas y tecnologías de la historia en un círculo, la invención sería la expansión de los límites de ese círculo. El área exterior al círculo es infinita, es decir, el potencial de invención no tiene límites. Piensen en tecnologías limpias increíbles que tenemos hoy: Eólica; autos eléctricos y solar, biogas. Biocombustibles, algas fotosintéticas, compost... Todas estas tienen algo en común. Todos proceden de personas. Las personas innovan. Las personas crean. Es el potencial ilimitado de las personas creativas el que creará tecnologías inimaginables que detendrá el cambio climático para reequilibrar el ecosistema. Y eso es algo esperanzador.