Personas que vuelven al trabajo
después de un paréntesis laboral:
Yo las llamo "relanzadores".
Esas son personas que han tomado una pausa
laboral para cuidar a personas mayores,
para cuidar a sus hijos,
perseguir algún interés personal,
o por algún problema de salud.
Similares son los transicionistas
laborales de cualquier tipo:
veteranos, cónyuges de militares,
jubilados que vienen del retiro
o los emigrantes repatriados.
Volver al trabajo después de un
paréntesis laboral es difícil,
por la desconexión entre los empleadores
y los "relanzadores".
Los empleadores pueden ver a los
candidatos con un intervalo en su CV
como una proposición de alto riesgo,
y los individuos en el paréntesis laboral
pueden dudar de sus habilidades
para relanzar su carrera,
Especialmente si han estado fuera
por mucho tiempo.
Esta desconexión es un problema
que intento ayudar a resolver.
Los relanzadores exitosos están
en todas partes y en cualquier campo.
Este es Sami Kafala.
Es un físico nuclear en Reino Unido
que tomó un descanso laboral de cinco años
para estar con sus cinco hijos.
Recientemente, la prensa de Singapur
escribió sobre las enfermeras que retoman
su trabajo después de largos descansos.
Y hablando de largos descansos laborales,
ella es Mimi Kahn.
Ella es una trabajadora social
en el Condado de Orange, California,
que regresó al trabajo
en una organización de servicios sociales
luego de una pausa laboral de 25 años.
Este es el mayor paréntesis laboral
que conozco.
Personas prominentes
toman pausas laborales.
La juez de la Corte Suprema
Sandra Day O'Connor
tomó una pausa laboral de 5 años
a principios de su carrera.
Y existen los relanzadores ficticios.
Probablemente la más famosa
es Alicia Florrick,
personaje interpretado por Julianna
Marguiles en el show de TV "The Good Wife"
una abogada que vuelve a trabajar
después de un paréntesis de 13 años.
Aquí hay una persona real
que tomó una pausa laboral de 13 años.
Ella es Tracy Shapiro, con su familia.
Tracy aceptó escribir un ensayo
para el Today Show
para la gente
que quiere regresar a trabajar
pero le está costando hacerlo.
Tracy escribió que era una madre de cinco
que amaba pasar su tiempo en casa,
pero atravesó un divorcio
y tenía que volver a trabajar,
además ella realmente quería
volver a tener trabajo en su vida
porque le encantaba trabajar.
Tracy hacía
lo que muchos de nosotros hacemos
cuando sentimos que tuvimos un buen día
en la búsqueda de trabajo.
Ella buscaba un puesto
en finanzas o contabilidad.
y había pasado los últimos nueve meses
buscando compañías en línea
muy diligentemente
y aplicando para trabajos sin resultado.
Conocí a Tracy en junio del 2011,
cuando el Today Show me preguntó
si podía trabajar con ella
para ver si la ayudaba
a cambiar las cosas.
Lo primero que le dije a Tracy
es que tenía que salir de la casa.
Le dije que tenía
que buscar trabajo públicamente
y contarle a todos sus conocidos
su interés por volver a trabajar.
También le dije,
"vas a tener un montón de conversaciones
que no irán a ningún lado.
Espera eso, y no dejes que te desaliente.
Habrá un puñado
que al final conducirán
a una oportunidad laboral."
Les contaré lo que pasó con Tracy
en unos momentos,
pero quiero compartirles
un descubrimiento que hice
cuando estaba volviendo a trabajar
después de mi propia pausa laboral
de 11 años fuera de la fuerza laboral,
y es que, la forma en que los demás
te ven está congelada en el tiempo.
Lo que quiero decir es que,
cuando empiezas a contactar con gente
y vuelves a estar en contacto
con las personas del pasado,
la gente con la que trabajaste
o fuiste a la escuela,
van a recordarte como eras
antes de tu paréntesis laboral,
y eso es incluso si tu sentido de ti mismo
ha disminuído con el tiempo,
como nos pasa a muchos de nosotros
mientras más alejados estamos
de nuestras identidades profesionales.
Por ejemplo, podrías pensar de ti mismo
como alguien que se ve así.
Esta soy yo, luego de un día entero
conduciendo en mi minivan.
O aquí estoy en la cocina.
Pero esas personas del pasado,
ellos no saben nada de esto.
Ellos solo te recuerdan como eras,
y es un gran estímulo de confianza
volver a contactar con esa gente
y oír su entusiasmo acerca de tu interés
por volver a trabajar.
Hay una cosa más que recuerdo vívidamente
de mi pausa laboral,
y es que ponía muy poca atención
a las noticias laborales.
Mi formación es en finanzas,
y apenas me mantenía al tanto
de las noticias
cuando estaba en casa
cuidando de mis cuatro hijos.
Así que tenía miedo de ir a una entrevista
y empezar a hablar de una compañía
que ya no existía.
Así que tuve que volver a abonar,e
al diario Wall Street
y leerlo seis meses de punta a punta
antes de sentir
que tenía una buena idea de lo que sucedía
en el mundo de los negocios otra vez.
Yo creo que los relanzadores
son una gema de la fuerza de trabajo,
y esta es la razón.
Piensen en nuestra etapa de la vida:
para aquellos que tomaron pausas laborales
para cuidar a sus hijos,
tenemos menos o ninguna
licencia por maternidad.
Ya hicimos eso.
Tenemos menos reubicaciones laborales
de esposos o parejas.
Estamos en un tiempo de la vida
más establecido.
Tenemos buena experiencia laboral.
Tenemos una perspectiva más madura.
No tratamos de encontrarnos
a nosotros mismos a costa de un empleador.
Además de que tenemos esa energía,
ese entusiasmo por volver a trabajar
precisamente porque hemos estado
lejos de ello por un tiempo.
Por otro lado, hablé con empleadores,
y estas son dos preocupaciones
de los empleadores
acerca de contratar relanzadores.
La primera es, a los empleadores
les preocupa que los relanzadores
sean tecnológicamente obsoletos.
Ahora, les puedo decir,
estando yo tecnológicamente obsoleta
en un punto,
que es una condición temporal.
Yo había hecho mis análisis financieros
hace tanto que usaba Lotus 1-2-3.
No sé si nadie pueda recordar eso,
pero tuve que aprender a hacerlo en Excel.
Realmente no fue tan difícil.
Muchos comandos son los mismos.
Para mí el PowerPoint
fue mucho más desafiante,
pero ahora uso PowerPoint todo el tiempo.
Le digo a los relanzadores
que los empleadores esperan de ellos
que tengan un buen conocimiento
de software básico de gestión de oficina,
y que si no son muy rápidos,
es su responsabilidad conseguirlo.
Y lo hacen.
La segunda preocupación que empleadores
tienen acerca de los relanzadores
que les preocupa que los relanzadores
no sepan lo que quieren hacer.
Le digo a los relanzadores que necesitan
hacer el trabajo duro
de descubrir, si sus intereses
y habilidades cambiaron
o no cambiaron
mientras estuvieron en pausa laboral.
Eso no es trabajo del empleador.
Es la responsabilidad del relanzador
demostrarle al empleador
que pueden aportar algo valioso.
En 2010 empecé a notar algo.
Había estado siguiendo
programas de regreso al trabajo desde 2008
y en 2010, empecé a notar
el uso de oportunidades
de trabajo pago a corto plazo,
se llamara pasantía o no,
pero una experiencia
similar a una pasantía,
como forma para que
los profesionales vuelvan a trabajar.
Vi a Goldman Sachs y a Sara Lee
empezar programas de pasantía
de reincorporación corporativa.
Vi a un ingeniero,
un candidato poco común para regresar,
aplicar para el nivel de entrada
de un programa de pasantías en el ejército
y luego conseguir un trabajo permanente.
Vi a dos universidades integrar pasantías
a la mitad de programas
de educación ejecutiva.
Así que escribí un reporte de lo que veía,
y se convirtió en este artículo
para la Harvard Business Review
llamado "El pasante de 40 años."
Tuve que agradecer a los editores
por ese título,
y también por la ilustración
donde pueden ver al pasante de 40 años
entre todos los pasantes universitarios.
Y entonces, cortesía de Fox Business News,
llamaron al concepto
"el pasante de 50 años."
(Risas)
Y el mes pasado, salió una película,
llamada "El pasante",
que nos trajo al pasante de 70 años.
(Risas)
Robert De Niro interpreta
a un jubilado de 70 años
que sale del retiro
para convertirse en pasante para el CEO
de una compañía de rápido crecimiento,
interpretada por Anne Hathaway.
No he visto muchos pasantes de 70 años.
Pero esas pasantías poco comunes
no pasan solo en las películas.
Cinco de las más grandes compañías
de servicios financieros
tienen programas de pasantías de reingreso
para profesionales de finanzas,
y en este punto,
cientas de personas han participado.
Estas pasantías son pagas,
y las personas que promueven
roles permanentes
poseen salarios competitivos.
Y ahora siete de las más grandes
compañías de ingeniería
pilotan programas de pasantías
de reingreso para ingenieros
como parte de una iniciativa
con la Society of Women Engineers.
Ahora, ¿por qué las compañías
están adoptando pasantías de reingreso?
Porque la pasantía permite al empleador
basar su decisión de contratación
en una muestra real de trabajo
en lugar de series de entrevistas,
y el empleador no tiene que tomar
esa decisión de contratación permanente
hasta que el periodo de pasantía termine.
Este periodo de pruebas
remueve el riesgo percibido
que algunos gerentes asocian
a contratar relanzadores,
y están atrayendo a excelentes candidatos
que se convierten en grandes empleados.
Piensen en cuán lejos hemos llegado.
Antes de esto, a la mayoría
de los empleadores no les interesaba
contratar relanzadores en absoluto,
pero ahora,
no solo se desarrollan programas
específicamente
con los relanzadores en mente,
sino que no se puede aplicar
a esos programas
a menos que se tenga
una brecha en el currículum.
Esta es la marca de un cambio real,
de verdadero cambio institucional,
porque si podemos resolver
este problema de los relanzadores,
podemos resolver el de otros
transicionistas laborales también.
De hecho, un empleador me dijo hace poco
que su programa
de regreso al trabajo para veteranos
está basado
en su programa de pasantías de reingreso.
Y no hay razón por la cual no pueda haber
un programa de pasantías para jubilados.
Tal como en la película "El pasante".
Diferentes áreas, mismo concepto.
Así que déjenme decirles
qué pasó con Tracy Shapiro.
Recuerdan que le dije
que tenía que contarle
a todos sus conocidos
sobre su interés en volver a trabajar.
Bien, una conversación crítica
con otro mentor en su comunidad
llevó a una oferta de trabajo para Tracy,
que fue un trabajo contable
en un departamento de finanzas.
Pero era un trabajo temporal.
La compañía le dijo
que existía la posibilidad
de que se convirtiera en algo más,
pero no había garantías.
Esto fue en otoño del 2011.
Tracy amaba esta compañía,
y amaba a su gente
y la oficina estaba
a menos de 10 minutos de su casa.
Así que aunque ella tenía
una segunda oferta de trabajo
en otra compañía
para un puesto de tiempo completo,
ella decidió tomar la oportunidad
con esta pasantía
y esperar lo mejor.
Bien, ella terminó superando
sus propias expectativas,
y la compañía no solo le hizo
una oferta permanente
a principios del 2012,
sino que la hicieron
incluso más interesante y desafiante,
porque sabían que Tracy podría manejarlo.
Avanzando a 2015,
Tracy fue promovida.
Pagaron para que ella obtuviera
su MBA por las noches.
Ella incluso contrató a otro relanzador
para que trabajara para ella.
El trabajo temporal de Tracy
fue una prueba,
tal como una pasantía,
y terminó siendo algo beneficioso
tanto para Tracy como para su empleador.
Ahora, mi meta es traer
el concepto de pasantía de reingreso
a más y más empleadores,
pero mientras tanto,
si quieres volver a trabajar
después de un paréntesis laboral,
no dudes en sugerir un arreglo
de pasantía o similar
a un empleador que no tenga un programa
formal de pasantías de reingreso.
Sé su primera historia de éxito,
y puedes ser el ejemplo
para más relanzadores por venir.
Gracias.
(Aplausos)