La victoria del débil sobre el equipo favorito. El cobro de un penalti de última hora que gana el torneo. Los montajes de entrenamiento de alto rendimiento. A mucha gente le encanta glorificar la victoria en el campo de juego, animar al equipo favorito, y practicar deporte. Pero he aquí una pregunta: ¿Deberíamos estar tan obsesionados con los deportes? ¿Es practicar deporte realmente tan bueno para nosotros, como parece? ¿ o es simplemente un pasatiempo divertido y entretenido? ¿Qué dice la ciencia al respecto? Primero, está confirmado que el ejercicio es bueno para nuestro cuerpo y mente, y eso es definitivamente cierto. El ejercicio tiene todo tipo de beneficios para la salud, en especial para los jóvenes, como el fortalecimiento óseo, la limpieza del colesterol malo de las arterias y la disminución del riesgo de derrame cerebral, presión arterial alta y diabetes. Nuestro cerebro también libera sustancias químicas al entrenar, como las endorfinas. Estas hormonas naturales, que controlan la respuesta al dolor y el placer en el sistema nervioso central, puede llevar a sentimientos de euforia denominado también, euforia del corredor. El aumento de las endorfinas y la actividad física constante, en general, pueden agudizar su atención y mejorar tu estado de ánimo y memoria. ¿Significa eso que obtendremos tantos beneficios cinco días en el gimnasio como unirnos a un equipo y competir? Bueno, aquí es donde se pone interesante: porque resulta que, si se puede encontrar un deporte y un equipo que te guste, los estudios muestran que hay todo tipo de beneficios más allá de los beneficios físicos y mentales del ejercicio. Algunos de los más significativos son los beneficios psicológicos, tanto a corto como a largo plazo. Algunos provienen de la experiencia comunal de estar en un equipo, por ejemplo, aprender a confiar y depender de los demás, a aceptar ayuda, para dar ayuda, y trabajar juntos hacia un objetivo común. Además, el compromiso con un equipo y hacer algo divertido también puede hacer que sea más fácil establecer un hábito regular de ejercicio. La participación en el deporte escolar también se ha demostrado que reduce el riesgo de padecer depresión hasta en cuatro años. Mientras tanto, tu autoestima y confianza pueden incrementarse. Hay algunas razones para ello. Uno se encuentra en el entrenamiento. Solo mediante el trabajo y el trabajo en habilidades, sobre todo con un buen entrenador, refuerzas una mentalidad de crecimiento en ti. Es cuando uno dice, "Incluso si no ahora puedo hacerlo, puedo mejorarme practicando para lograrlo con el tiempo". Esa forma de pensar es útil en todos los ámbitos de la vida. Y está el aprendizaje a través del fracaso, uno de los beneficios más transformadores, a largo plazo, de la práctica de deportes. La experiencia de llegar a aceptar la derrota puede aumentar la resiliencia y la autoconciencia necesaria para gestionar los estudios, la vida social, y los obstáculos físicos. Así que incluso si tu equipo no gana todo el tiempo, o nunca, hay un beneficio real para tu experiencia. Ahora bien, no todos disfrutan de todos los deportes. Tal vez uno es muy competitivo, o no lo suficientemente competitivo. Puede demorar encontrar un deporte que encaje con tus puntos fuertes. Es completamente normal. Pero si inviertes algo de tiempo buscando, podrás encontrar un deporte que se adapte a tus necesidades individuales, y si lo haces, hay muchísimos beneficios. Serás parte de una comunidad de apoyo, construirás tu confianza, ejercitarás tu cuerpo, y se alimentará tu mente, por no hablar de la diversión.