Como la mayoría de las personas, no soy activista por naturaleza.
En realidad, no hay mucha gente cuyo mayor deseo sea salir a las calles a pelear contra el sistema.
Mi teoría de cambio era "Escribiré mi libro, la gente lo leerá y cambiarán".
Pero no es así como se dan los cambios.
Así que, en cierta forma, me he visto obligado a ir contra mi sentido de comodidad en quien soy.
Parece que es lo que se necesita ahora
y creo que probablemente sea necesario que una gran cantidad de nosotros haga cosas que nos sean un poco difíciles de hacer,
hacer un poco de ruido, estar un poco incómodos,
presionar a otra gente para que este poco incómoda.
Esta es realmente la lucha de nuestra era.
Es oficial: el 2012 fue el año más caluroso en los Estados Unidos, desde que los científicos climáticos empezaron a tomar registros.
El 2012 no fue solamente el año más caluroso que se tenga registrado, sino también el segundo más extremo,
con tornados, incendios forestales, sequías masivas.
El incremento del nivel del mar a causa del cambio climático.
Gases que atrapan el calor, producto de la combustión de petróleo, carbón y gas.
10.9 mil millones de dólares en ganancias, la gente que mira esto dice que el mundo esta patas arriba.
El escuchar tu testimonio me convence aún más de que necesitamos actuar para prevenir un cambio climático cataclísmico.
BP recortó gasto tras gasto y ahora toda la costa del golfo está pagando el precio.
¿Cómo puedes justificar las ganancias récord que estás obteniendo?
Bueno, nuestro negocio es uno de números muy grandes.
Bueno, traigamos a Bill, el es ambientalista, presidente y cofundador de 350.org.
Y mi invitado, Bill McKibben, nuestro ambientalista lider del país.
Empezamos esta cosa, llamada 350.org.
Salimos a las calles y creamos el tipo de movimiento político que cambiará las cosas.
Acabamos de anunciar esta gira en todo el país para desafiar a la industria de combustibles fósiles.
La gente a comenzado a unirse e involucrarse en esta lucha.
Bueno, muchas gracias a todos,
muchas gracias a todos por estar aquí el día de hoy.
Es un gran placer para mi estar aquí esta noche
y uno de mis regalos para mi de estos últimos meses fue,
a pesar de lo exhaustivo en cierto sentido, el viajar por todo el país.
Y una de las cosas grandiosas fue simplemente recordar lo increíblemente hermoso que es este lugar.
Tu sabes que, fuimos a Denver, y fue hermoso, pero el aire estaba lleno de humo, producto de los incendios que seguían quemando en diciembre
después de la mayor temporada de incendios jamás experimentada
y después atravesamos estos maravillosos terrenos agrícolas, de los cuales, aún un 60% seguían declarados en sequía por el gobierno federal.
Pero también vale la pena decir que es terrible tomar un mundo tan hermoso como este
y, en nombre de ganancias descomunales para unas cuantas personas, por un corto tiempo, lo echemos a perder.
Esta noche es el inicio de la última campaña en la que probablemente luche.
No porque me este cansando, sino porque el planeta se está cansando.
En el mundo que hemos construído, donde nuestras instituciones no están trabajando como deberían,
tenemos que hacer más de lo que deberíamos.
Esas noticias no me deprimen.
En cierta forma, me emocionan, porque pienso que sabemos lo que tenemos que hacer.
Pienso que hemos desprendido las capas de la cebolla.
Hemos llegado al corazón de las cosas.
A partir de esta noche, atacaremos directamente a la industria de los combustibles fósiles
Ha llegado el momento en el que tenemos que tomar una postura real, estamos llegando al límite.
El mayor límite al que nos estamos acercando podría ser que se nos está acabando el espacio en la atmósfera donde arrojar los desperdicios de nuestra sociedad,
particularmente el dióxido de carbono, que es el derivado universal de la quema de combustibles fósiles.
Cuando quemas carbón, petróleo o gas, obtienes dióxido de carbono y la atmósfera se está saturando de eso.
Sabemos cuales son las soluciones para arreglar este problema,
cuales son las tecnologías que necesitamos para cambiar los combustibles fósiles por algo más.
Lo que nos está deteniendo de hacerlo es el enorme poder político
que ejercen aquellos que han obtenido y están obteniendo vastas ganancias inesperadas producto de los combustibles fósiles.
Bueno, muchos científicos han hecho grandes esfuerzos para calcular si estamos viviendo de forma sostenible
en el sentido de que si estamos consumiendo recursos del planeta a un ritmo en el que podamos continuar haciéndolo.
La amenaza es esta combinación del cambio climático, escasez de agua y de comida, así como el aumento en los precios de la energía
es tremendamente preocupante para cualquiera que este consciente de las estadísticas, y de la forma en que este asunto podría acabar.
No puedes seguir incrementando tu economía ilimitadamente en un planeta con límites.
Una de las cosas a la que la humanidad está enfrentando es la necesidad
de reducir dramáticamente su huella de carbono en los próximos 40 años.
Y nos referimos a una reducción del 80 o 90 % en países ricos.
Ya no estamos más en el punto de detener el calentamiento global.
Es demasiado tarde para eso.
Estamos en el punto de tratar de evitar que se convierta en una completa y absoluta calamidad.
No deberíamos tener que estar aquí esta noche.
Si el mundo trabajara de alguna forma racional, no tendríamos porque estar aquí.
Hace 25 años nuestros científicos empezaron a advertirnos sobre el cambio climático.
Yo jugué mi pequeña parte en eso al escribir el primer libro para el público general sobre todo esto en 1989,
un libro titulado El Fin de la Naturaleza.
Si el mundo hubiera trabajado como debería, nuestros políticos hubieran puesto atención a esas advertencias, hubieran trabajado,
y hecho las cosas pertinentes que en ese entonces hubieran sido suficientes para llevarnos por el largo camino a donde necesitábamos dirigirnos.
No lo hicieron. Y es por eso que estamos en el apuro en el que nos encontramos.
Esta es la mayor emergencia a la que la humanidad se ha enfrentado desde que abandonó las cavernas.
No hay nada más grande.
Todos estos temas son importantes: inmigración, cuidado de la salud y educación.
Pero esto se trata realmente del cambio físico de nuestro planeta.
Todos hemos estado diciendo que necesitamos salvar el planeta.
Pero mientras pienso en eso, me doy cuenta que el planeta va a estar aquí por mucho tiempo.
Lo que esta en juego ahora es la civilización en sí misma.
Nuestro climatólogo más importante, Jim Hansen,
hizo que su equipo en la NASA hiciera un estudio para determinar cuanto carbón en la atmósfera era demasiado.
Es posible que el documento que publicaron sea, hasta la fecha, el documento científico más importante del milenio,
menciona que ahora sabemos suficiente para saber cuanto es demasiado.
Cualquier cifra de carbón en la atmósfera superior a 350 partes por millón
es incompatible con el planeta donde se desarrolló la civilización y al cual la vida terrestre está adaptada.
Estas son palabras fuertes para ser usadas por científicos.
Más fuertes aún si consideramos que hoy día, en la atmósfera tenemos 395 partes por millón de dióxido de carbono.
Y va aumentando aproximadamente 2 partes por millón por año.
Todo lo congelado en la tierra se está derritiendo.
La gran capa de hielo del ártico se ha reducido en más de la mitad,
los océanos son 30% más ácidos de lo que eran hace 30 años
debido a que la química del agua de mar cambia al absorber carbón de la atmósfera.
Y porque el aire tibio contiene más vapor de agua que estando frío,
la atmósfera es aproximadamente 5% más húmeda de lo que era hace 40 años.
Este es un cambio asombrosamente grande.
Hay más energía entrando y siendo absorbida por la tierra de la que esta siendo enviada al espacio,
lo cual es exactamente lo que esperábamos porque al agregar gases del efecto invernadero a la atmósfera, ésta atrapa el calor.
Ahora podemos medirlo, y esas son las bases que podemos usar para probar que los impactos provocados por los humanos
en la composición atmosférica son la principal causa del cambio climático que estamos presenciando.
Así que empecemos a trabajar.
A esto lo llamamos "Saca la cuenta" y por un momento, haremos algunas cuentas.
Solo tres números, ¿ok?
Escribí sobre ellos en un artículo para la revista Rolling Stone el año pasado.
Una pieza que, extrañamente, se volvió viral.
Era el tomo con Justin Bieber en la portada,
pero esto es lo extraño del asunto:
Al día siguiente, recibí una llamada del editor diciéndome lo siguiente:
"Tu artículo ha obtenido 10 veces más 'me gusta' en Facebook que el de Justin Bieber."
Parte de eso es, sin duda, el resultado de mi mirada más o menos conmovedora, tu sabes.
Pero principalmente, es porque hemos logrado exponer éstas cuentas
de una manera tan clara que la gente necesitaba entender
mientras atravesábamos lo que resultó ser el año más cálido que Estados Unidos ha experimentado jamás.
Antes de llegar a esos tres números, es aquí hasta donde hemos llegado hasta ahora:
Hemos quemado suficiente carbón, gas y petróeo para aumentar un grado la temperatura del planeta.
¿Qué es lo que ha causado esto?
Hubo un día del último mes de septiembre en el que el titular del periódico decía lo siguiente "Hemos perdido la mitad de la capa de hielo polar"
Literalmente. Quiero decir que si Neil Armstrong estuviera allá en la luna hoy en día,
y mirara hacia abajo vería únicamente la mitad del área del hielo del ártico.
Hemos tomado una de las mayores características físicas de la tierra y la hemos destrozado.
¿Empezamos a trabajar con estos números?
Son tres, y son fáciles.
El primero es "2 grados".
Esto es lo que el mundo ha dicho sería lo más seguro dejar que el planeta se calentara.
En términos políticos, es en lo único en lo que alguien está de acuerdo.
Algunos de ustedes podrán recordar aquella cumbre climática en Copenhague.
Había solamente un número en el acuerdo voluntario final de dos páginas que la gente firmó.
Solamente un número: 2 grados.
Cada firmante se comprometió a asegurar que la temperatura no aumentara más de 2 grados.
La Unión Europea, Japón, Rusia, China, países que ganan su dinero vendiendo petróleo como los Emiratos Árabes Unidos,
los más conservadores, recalcitrantes, renuentes países de la tierra.
Incluso los Estados Unidos.
Si el mundo cree oficialmente algo acerca del cambio climático, es que 2 grados es demasiado.
El segundo número que los científicos han calculado es
cuanto carbono podemos verter en la atmósfera y seguir teniendo oportunidades razonables de mantenernos debajo de esos 2 grados.
Ellos dicen que aproximadamente unas 565 giga toneladas.
1 giga tonelada son 1000 millones de toneladas.
No es una oportunidad perfecta, las posibilidades son menores que la ruleta rusa, sabes.
Suena como se debe - es mucho, 565 mil millones de toneladas de dióxido de carbono.
El problema es que a le facha vertimos 30 mil millones cada año con un aumento de hasta 3% al año.
Saca la cuenta y estamos aproximadamente a 15 años de rebasar ese límite.
Esas son noticias serias.
Pero el número aterrador es el tercero.
El tercer número era el importante, y el nuevo
y vino de un equipo de analistas financieros en el Reino Unido.
Lo que hicieron fue sentarse con todos los reportes anuales, reportes financieros y otras cosas
para determinar con cuanto carbono la industria mundial de combustibles fósiles mundial ya contaban en sus reservas
y esta cifra resultó en 2795 giga toneladas de carbono.
5 veces más de lo que los gobiernos más conservadores de la tierra piensan que sería seguro verter en la atmósfera.
Ni siquiera se acerca a la cifra segura.
Osea, es 5 veces más.
Una vez que conoces ese número, entonces puedes entender la esencia de este problema.
Lo que la industria de combustibles fósiles esta haciendo, es condenarnos a un futuro en el que no podremos sobrevivir, en el que la humanidad no puede sobrevivir.
Y sabemos esto porque justo al final de 2012
escuchamos esto simultáneamente de tres diferentes fuentes conservadoras:
El Banco Mundial, la Agencia Internacional de la Energía, Price Waterhouse Cooper, difícilmente una un grupo de hippies.
Todos ellos nos dijeron que si no hacíamos otra cosa diferente a la que estábamos haciendo, sí seguíamos usando esas reservas,
nos dirigimos hacia unos 4 a 6 grados celsius de calentamiento.
Estos números muestran, y quiero ser absolutamente claro en esto, que esas compañías son una fuerza canalla, son criminales.
No son criminales en contra de las leyes del país. Ellos dictan la mayoría de esas leyes.
Son criminales en contra de las leyes de la física.
Sí llevan a cabo su plan de negocios, el planeta se desploma.
Contamos con todos los ingenieros y empresarios que necesitamos.
Lo que nos detiene, por encima de todo lo demás es el simple hecho de que la industria de los combustibles fósiles hace trampa.
Son los únicos, de todas las industrias a quienes se les permite verter sus desperdicios gratuitamente.
Nadie debería poder contaminar de forma gratuita.
Tu no puedes, yo no puedo. No podemos salir de aquí y tirar basura gratuitamente. Si lo haces, te multan.
Si tienes un negocio pequeño, no puedes simplemente tirar la basura a la calle,
tienes que pagar para que la recojan y se la lleven lejos, o te multan.
Las únicas personas que pueden contaminar gratuitamente son esos mega contaminadores cuando se trata de carbono: El gran petróleo, El gran carbón.
Si te dan una multa de $25 dólares por tirar basura, entonces estás pagando $25 dólares más
que lo que todos los contaminadores industriales han pagado en 150 años por el carbón que están tirando.
Así de loco es todo este asunto.
Es casi como definimos nuestra civilización.
Tienes que limpiar lo que ensucias, a menos que seas la industria de los combustibles fósiles.
En ese caso, puedes verter carbono en la atmósfera gratuitamente
y esta es la ventaja que nos impide obtener la energía renovable al ritmo que la necesitamos.
Deberíamos interiorizar esta externalidad.
La única razón por lo que no lo hemos hecho es porque eso significaría poner en riesgo las ganancias récord de la industria de combustibles fósiles
y por lo tanto, han luchado en cada oportunidad para evitar que eso suceda.
Se trata de compañías sin escrúpulos.
Hace algún tiempo, realizaban funciones sociales útiles.
Por mucho tiempo, el motor de los Estados Unidos eran los combustibles fósiles, como el petróleo y el carbón, que se usaban para echar a andar trenes, automóviles y la industria.
A mediados de 1900s, nos dimos cuenta que habían consecuencias.
Si le das un vistazo a industrias como la del carbón ahora, hicimos un reporte con la escuela de medicina de Harvard
que nos mostró que si ellos hubieran pagado un precio por lo que nos están haciendo
lo que estamos pagando indirectamente por esa electricidad, ese carbón, costaría, en cualquier lugar, 3 o más veces su costo actual.
Tendrían que cerrar sus negocios, y eso es simplemente, una bancarrota financiera y moral.
Cuando una empresa de servicios públicos quema carbón, que es la fuente de energía más barata, no están pagando el precio completo.
Las externalidades, el costo adicional para la sociedad, para la salud humana, para el medioambiente,
no están incluídos en los gastos del negocio.
Subsidiamos la industria de combustibles fósiles.
Les estamos pagando para que continúen contaminando y esto quiere decir todo tipo de cosas:
quiere decir, exenciones de impuestos, prestamos, es el hecho de que tengamos a nuestros ejércitos protegiendo sus oleoductos y rutas comerciales.
Los estas ayudando a dominar la industria y a impedir que sus competidores, como las energías renovables, compitan.
Lo que necesitamos es un campo de juego justo.
Podríamos usar ese dinero público, dinero de los contribuyentes para hacer la transición al uso a energías renovables.
De vez en cuando, fingen estar viendo la luz.
Hace diez años, BP anunció que sus iniciales ahora significarían "más allá del petróleo" (Beyond Petroleum), cambiaron su logotipo
y pusieron páneles solares en algunas gasolineras, e invirtieron una pequeña cantidad de dinero, una miseria, en investigación solar y eólica.
Incluso eso les resultó demasiado, y hace tres años vendieron esas divisiones
y dijeron que de ahora en adelante, se concentrarían en sus negocios principales.
lo que significó, basicamente, destruir el Golfo de México.
¿Por qué están tan obsesionados con los hidrocarburos?
Porque estas son las empresas más rentables de la historia de la humanidad.
El año pasado, las cinco principales empresas petroleras ganaron 137 mil millones de dólares.
Eso es 375 millones de dólares diarios.
Es muchísimo dinero.
Obtuvieron 6.6 millones de dólares en exenciones de impuestos diariamente.
Gastaron $440,000 dólares al día cabildeando al congreso.
Rex Tillerson, director de Exxon, ganó $100,000 dólares al día.
El que, por cierto, es uno de mis temas favoritos
es los que dicen que los científicos climáticos hacen sus hallazgos porque lo que buscan en realidad es obtener becas.
El único problema que esas compañías tienen ahora
es que los científicos están observándolos en tiempo real, mientras ellos atestan este golpe, que se esta volviendo más difícil negar.
De hecho, están empezando a medio admitir lo que está pasando.
El verano pasado, por primera vez, el Gerente General de Exxon, Mr Tillerson, oferció un discurso en el que dijo que sí, que es verdad
que el calentamiento global existe.
Es claro que habrá un impacto, así que no estoy discutiendo que el incremento en las emisiones de dióxido de carbono van a tener un impacto.
Tendrá un impacto caluroso.
Pero tomando en cuenta que la única forma de parar eso sería dándole un golpe a las ganancias de la compañía.
trató de cambiar de tema inmediatamente.
Es un problema de ingeniería, y cuenta con soluciones de ingeniería.
¿En serio? ¿En qué tipo de soluciones de ingeniería estabas pensando?
Cambios en los patrones de climáticos que causan el desplazamiento de las producciones agrícolas, nos adaptaremos a eso.
Mira, con todo respeto, esto es una locura.
No podemos desplazar las producciones agrícolas.
Producciones agrícolas son lo que la gente en Vermont llama granjas.
Ya tenemos granjas en todos los lugares de la tierra donde hay suelo decente.
Es verdad que Exxon ha hecho todo lo posible para derretir la tundra,
pero eso no quiere decir que simplemente puedas hacer que Iowa se mude para allá arriba y empezar de nuevo.
No hay suelo.
Si las compañías de combustibles fósiles quieren cambiar, de esta forma es como sabremos que hablan en serio:
1: Necesitan dejar de cabildear en Washington.
2: Necesitan dejar de explorar en busca de nuevos hidrocarburos.
La primera regla de los hoyos es que cuando estas en uno, dejas de cavar, ok.
Y lo tercero que necesitan hacer es salir a trabajar con el resto de nosotros
para encontrar una forma de convertirse en compañías de energía, no compañías de combustibles fósiles
y encontrar, junto con el resto de nosotros, la forma de mantener el 80% de esas reservas bajo suelo.
Lo que realmente hace esto casi patológico
es el hecho de que cuando ya tenemos casi cinco veces más la cantidad de carbono que podemos posiblemente quemar,
quiero decir, solamente Exxon gasta: 100 millones de dólares al día en exploración de nuevos hidrocarburos.
En este punto, ya estamos tocando fondo. Osea, ya tenemos arenas petrolíferas, estamos produciendo shale gas,
estamos provocando fracturas hidráulicas, estamos removiendo las cimas de las montañas, estamos haciendo perforaciones en aguas profundas,
estamos desarmando la tierra en busca de los últimos pedacitos de gas, petróleo y carbón.
Me he dado cuenta que cuando me siento deprimido, el mejor antídoto, por mucho, es la acción, y creo que eso funciona para la mayoría de las personas.
El problema con el cambio climático es que parece demasiado grande para que cualquiera de nosotros lo asuma.
Y en efecto lo es.
Es solamente cuando trabajamos con otras personas, tantas como sea posible, cuando tenemos alguna esperanza.
Por eso es que invierto mi tiempo tratando de construir movimientos. Creo que es la única oportunidad que tenemos.
Cualquiera puede involucrarse. SIempre hay cosas que hacer, y más que hacer todo el tiempo. Así es como son los movimientos.
Nosotros empezamos 350.org en 2008 y cuando digo "nosotros" me refiero a mi y a siete estudiantes universitarios de Middlebury College.
Teníamos el profundo deseo de tratar de hacer algún tipo de organización mundial
sobre el primer problema realmente mundial al que este planeta se ha enfrentado jamás.
Y nos extendimos por todo el planeta
y durante el siguiente año más o menos, encontramos gente de todo el planeta que se interesó en trabajar con nosotros.
Les pedimos a todos que tomaran un día, y este fue nuestro primer día de acción en el otoño de 2009.
Les preguntamos ¿Te unirías a nosotros por un día?
¿Harías algo ese día para tomar este número tan importante, 350,
y dirigirlo hacia el torrente de información del planeta?
Durante las próximas 48 horas, empezaron a llovernos montones de fotos por minuto.
Antes de que terminara, habíamos logrado 5200 demostraciones en 181 países.
CNN lo llamó el día de actividad política más extenso en la historia del planeta.
Ciudades en todo el mundo se reunieron este día para buscar soluciones al cambio climático.
Lugares en todo el planeta.
Cientos de activistas ambientales se reunieron en Edimburgo.
Hemos hecho desde entonces más de estas grandes jornadas de acción.
Trabajamos en todos los países, excepto Corea del Norte.
Hemos tenido alrededor de 20,000 manifestaciones.
Y hemos hecho cosas más directas:
encabezado la lucha contra el oleoducto Keystone XL,
organizado la mayor acción de desobediencia civil en treinta años.
Ahora la batalla se centra en si la administración del presidente Obama
debería aprobar un oleoducto que divide a los Estados Unidos.
Transferiría las arenas petrolíferas de Alberta, Canadá al Golfo de México.
El tipo de petróleo que el oleoducto transportaría es mucho más tóxico.
De los más contaminantes de todos los combustibles fósiles.
Este oleoducto ha probado ser muy controversial
para el gobierno federal decidir si le da luz verde o no, al proyecto Keystone XL.
Las arenas petrolíferas, además de ser destructivas en sí mismas, son una manera simbólica de desarrollar
una forma de crecimiento de la economía que simplemente no puede ser sustentada.
Ahora mismo, una compañía llamada TransCanada, ha hecho una solicitud para construir un nuevo oleoducto
para acelerar el envio de petróleo desde Cushing hacia las refinerías más sofisticadas en el sur en la Costa del Golfo
y hoy instruyo a mi administración a cortar el listón rojo,
romper las barreras burocráticas y hacer de este proyecto una prioridad.
Fue en agosto cuando la gente empezó a vetar esta propuesta en su totalidad.
No nos daremos por vencidos hasta que la idea completa de Keystone XL este muerta y enterrada.
Las arenas petrolíferas son un punto crucial de nuestra adicción a los combustibles fósiles.
El hecho fundamental es que mientras que los combustibles fósiles sean la forma más barata de energía, estos continuaran siendo usados.
La solución es empezar a ponerle un precio a las emisiones de carbono.
Nosotros, los americanos no deberíamos tener que sacrificar nuestras tierras y nuestra agua para cumplir con las expectativas de TransCanada.
Estamos aquí, en este momento porque este es nuestro momento de protestar pacíficamente a favor del siglo 21.
Presidente Obama, haz lo correcto.
Estamos en el momento cumbre en la historia de este movimiento ambiental en Estados Unidos.
Si te vas a arriesgar a ser arrestado, vas a estar formándote en este lado de la acera.
Cuando presencié los actos de desobediencia civil frente a la Casa Blanca,
gente diciendo que no iban a permitir que se construya el oleoducto Keystone,
que no iban a permitir que nos comprometiéramos a un plan energético basado en combustibles fósiles.
Ustedes saben, la gente que fue arrestada frente a la Casa Blanca,
no todos ellos se auto identificaban como ambientalistas.
Ellos eran granjeros y ganaderos, gente de comunidades indígenas, líderes de negocios,
eran abuelos, madres y padres.
Estamos empezando a ver realmente una expansión del grupo de personas que están luchando en esta lucha,
pero tenemos mucho más que hacer al respecto.
He sido obligado a hacer cosas que nunca imaginé que haría:
pararme en un escenario frente a miles de personas, ir a la cárcel.
Probablemente no podamos detener todos los oleoductos, las minas, una a la vez.
También vamos a tener que jugar, tu sabes, a la ofensiva.
Pensamos que algo que le interesa mucho a la industria de los combustibles fósiles es el dinero, así que iremos tras ello.
¿Nos quieres quitar nuestro planeta y nuestro futuro?
Nosotros te vamos a quitar tu dinero.
Vamos a tratar de empañar tu marca.
Esta industria se ha comportado tan imprudentemente que ha perdido su licencia social, su barniz de respeto.
Necesitamos que estos tipos sean considerados criminales contra las leyes de la física.
Necesitamos quitarles un poco de su poder, y lo vamos a hacer de muchas formas.
Una herramienta, la primer herramienta, es la desinversión.
Le vamos a pedir o exigir a instituciones como universidades o iglesias que vendan sus acciones de esas compañías.
La lógica no podría ser más simple:
Si esta mal dañar el clima, esta mal lucrar con ese daño.
Ese argumento funcionó magnificamente una vez en la historia de los Estados Unidos.
Se ha presentado dispersos incidentes violentos en el vecindario multiracial de Athlone.
Las autoridades respondieron con fuego sin antes lanzar una advertencia.
Estudiantes organizados, comprometidos y vociferantes instaron a la universidad a rechazar las inversiones provenientes de Sudafrica.
Eso es lo que sucedió durante la lucha contra el Apartheid sudafricano.
En 155 universidades, la gente convenció a sus respectivas juntas directivas a vender sus acciones.
Cuando Nelson Mandela salió de prisión, uno de sus primeros viajes fue a los Estados Unidos
y no fue primero a la Casa Blanca, al primer lugar que se dirigió, fue a Berkley a agradecerles a los estudiantes de la Universidad de California
que habían forzado la venta de acciones manchadas con dinero del Apartheid valuadas en 3 mil millones de dólares.
Esto es lo que demandamos:
1: No a nuevas inversiones en compañías de combustibles fósiles.
2: Que se comprometan firmemente durante los próximos cinco años a reducir la intensidad de sus posiciones actuales.
No es irrazonable. Es difícil, pero no irrazonable.
Te daré una noticia:
La primera universidad del país en vender todas sus acciones de compañías de combustibles fósiles
fue una universidad en Maine llamada Unity College, con 13 millones de dólares en sus reservas.
Y en este punto, ninguno de esos 13 millones de dólares esta invertido en combustibles fósiles en ningún lugar.
La desinversión es realmente una de las estratégias más obvias para nosotros.
Cuando ves a otras instituciones y su conflicto entre desinvertir o no,
se reduce a un simple hecho: voluntad.
El alcalde de Seattle dijo "Pasé la tarde con mi tesorero
y estamos tratando de encontrar la forma de sacar los fondos de ciudad de las compañías de combustibles fósiles"
Bienvenidos todos a nuestro evento de esta noche: Desinvertir de los combustibles fósiles,
una plática con estudiantes de Barnard, Columbia, the New School, NYU y Hunter College.
Los estudiantes están pidiendo que se de esa desinversión.
El hecho de que tengamos 250 movimientos en diferentes campuses de todo el país
significa que hemos desafiado severamente esa apariencia de respetabilidad social.
Ellos entienden, al igual que las organizaciones religiosas y ciudades que están haciendo esto,
lo que significan esos números.
No es consistente con la razón de existir de esas instituciones
el que ellos continúen invirtiendo en algo dedicado a la destrucción de la civilización.
Le estamos pidiendo a la administración de NYU cancelar su inversión en la industria de los combustibles fósiles.
Podemos re invertir en nuestra anticuada infraestructura y hacer que nuestros edificios sean más eficientes en materia de energía.
La gente siempre busca la solución inmediata, en lugar de la solución definitiva.
Cómo es que esta campaña encaja en en el proyecto más grande
es que esta es solo una de las formas en las que hacemos las cosas.
Estas son el tipo de soluciones que la universidad debería estar conduciendo
y deberían estar diciendo "vamos a tomar el dinero que está acumulado en nuestras reservas
que ahora mismo está sin hacer nada o haciendo daño
y despojaremos de ese dinero a los causantes de este problema y se lo daremos a quienes están resolviendo este problema.
Si no sabes lo que es malo, tienes un 'excusa'
pero una vez que sabes lo que es malo, tienes la responsabilidad moral de retirarle tu energía.
Estamos participando en la destrucción de nuestro propio mundo, aunque no lo queramos
porque la industria de combustibles fósiles esta tan profundamente enlazada en tantos aspectos de la vida americana.
Ellos dependen de nuestra cooperación para continuar con lo que están haciendo. ¿Pero qué si decimos que no?
El trabajo de desinversión es una parte de eso, y tiene la ambición
de hacer que cientos, miles de instituciones en los Estados Unidos se conviertan en aliados, en lugar de ser adversarios.
Nosotros, como personas personas comunes, tenemos muchísimo poder.
Si eres miembro de una iglesia, entones tienes la habilidad de trabajar con tu congregación
para asegurarte de que tu iglesia no este invirtiendo en compañías de combustibles fósiles.
Si eres estudiante de algún campus universitario, no solamente tienes la oportunidad, sino que pienso que tienes la responsabilidad
de trabajar con tus compañeros de estudio para asegurar que tu institución de educación superior
no este invirtiendo sus fondos en las compañías que están destruyendo tu futuro en este planeta.
Hemos enviado un mensaje, un mensaje muy claro, a las grandes compañías de petróleo y energía
de que vamos a hacerlos responsables, y de que vamos a desinvertir, si no empiezan a hacer cambios ellos mismos.
No hay nada, y con eso me refiero a nada, radical en lo que estamos hablando aquí.
Todo lo que pedimos cuando hablamos del cambio climático
es un planeta que funcione de la misma forma en la que lo ha hecho en los últimos 10,000 años,
un planeta que funcione de la misma forma en que funcionaba el planeta en que nacimos.
Esa no es una exigencia radical. Si lo piensas, es simplemente una exigencia conservadora.
Los radicales trabajan en compañías petroleras.
Si te levantas en la mañana para ganar tus $100.000 dólares al día,
y estas dispuesto a alterar la composición química de la atmósfera,
entonces estas involucrado en un acto más radical que cualquiera que se presente ante ti.
Y nuestro trabajo es determinar como vigilar ese radicalismo, como detenerlo,
como impedir que eche a perder todo lo bueno de este planeta.
Y estas son las buenas noticias, ya que te he estado dando varias malas noticias, aquí van las buenas noticias:
Hay muchas cosas que podemos hacer.
La solución a largo plazo al cambio climático es muy clara.
Necesitamos dar el salto al uso de energía renovable, y necesitamos hacerlo rápidamente, lo que será difícil.
Será lo más difícil que hayamos hecho desde nuestra preparación para luchar en la segunda guerra mundial, o algo así
pero no es, bajo ninguna circunstancia, imposible.
Cuando me siento un poco abrumado por todas las cosas que necesitamos hacer,
Vuelvo a leer la historia económica de la Segunda Guerra Mundial.
Fue una cuestión de meses, sabes,
lo que tardó la industria automotriz de Estados Unidos en empezar a producir aviones y barcos.
No tomó décadas para reestructurar la economía industrial de Estados Unidos. No tomó años.
Se logró en cuestión de meses.
Y si pudiéramos hacer eso ahora
entonces, podríamos, con certeza, reestructurar la economía energética del mundo en la próxima década.
Y esto va a requerir que tomemos algunas decisiones difíciles.
Va a requerir un cambio real, en la forma en que obtenemos nuestra energía, y en la la forma en la que nos movemos.
Pero las buenas noticias es que contamos con las soluciones.
Tu sabes, tenemos la manera.
Sabemos lo que necesitamos hacer para lograr un mundo donde no estemos quemando tantos combustibles fósiles.
¿Por qué deberíamos construir un oleoducto de 1000 millas transportando casi un millón de barriles de petróleo
de la fuente de combustible con más emisiones de carbono del planeta
cuando la energía eólica es mucho más barata y mucho más limpia?
¿Porqué tenemos que hacer perforaciones en el Ártico cuando sabemos que la energía solar puede satisfacer nuestras necesidades de energía en todo el país?
¿Porqué causar fracturas hidráulicas a nuestros campos y a nuestras cuencas hidráulicas
cuando sabemos que la eficiencia energética ahorraría más energía de la que el gas natural nos puede proporcionar?
Pienso que en la actualidad estamos llegando al punto donde las fuentes extremas de energía son tan malas
que las preguntas y los desafíos van volverse más y más fáciles.
Nuestra economía entera va a depender de como respondamos ante esta crisis.
La competencia entre países será entre aquellos que avancen en el desarrollo de tecnología
y que la vendan a otros, o aquellos que se queden atrás y no aprovechen la oportunidad.
No debemos nunca subestimar nuestro ingenio y determinación.
Si esas personas dicen que no podemos hacer nada al respecto, es porque no saben quienes somos, ni saben lo que podemos hacer.
Pienso que este es el momento de profundizar y decirnos: "esta bien, estamos listos."
Las soluciones están frente a nosotros, y nadie de nosotros, ciudadanos comunes, oficiales electos, líderes religiosos
puede quedarse con la conciencia tranquilla y no hacer nada al respecto.
Todos los grandes problemas que tenemos cuentan con soluciones locales
y la búsqueda de esas soluciones, resulta en un montón de beneficios más
desde el punto de vista ambiental, económico y social.
Estamos en una situación en la que vamos a tener que lograr una economía ecológicamente sustentable para todos
o, a la larga, no tendremos nada para nadie.
Lo más inteligente que podemos hacer para apostar por nuestro futuro y bienestar es invertir en nuestro futuro.
El pasado cuenta con cabilderos muy bien remunerados directamente de las empresas petroleras y del carbón.
El futuro no cuenta cabilderos hasta ahora.
Tenemos que ser tan sofisticados como el sistema que estamos tratando de cambiar.
La legislación que el senador Boxer y yo estamos presentando con el apoyo de las principales organizaciones ambientalistas
se enfoca realmente en la crisis.
Uno de los enfoques principales es ponerle precio a las emisiones de carbono y metano.
Pienso que mucha gente se preguntó, tal vez todavía se pregunta, si nuestro sistema político está dispuesto a realizar esta tarea.
En el sentido general, no se si podamos ganar esta lucha.
Hay científicos que piensan que hemos esperado demasiado tiempo para empezar.
El poder del otro lado es claramente enorme.
Cada cierto tiempo me desanimo.
Hubo un reportero de televisión que estaba más o menos interrogándome, que dijo,
Bueno, esto parece simplemente imposible. Estas en contra de la industria más poderosa del planeta.
Esto parece simplemente una de estas historias de David y Goliat. ¿Qué posibilidades tienes?
Y pensé ¡oh, tienes razón, esto es terrible!
Pero luego pensé, bueno, estamos en una iglesia, tal vez esto sucedió con un propósito, tu sabes,
pensé en que conozco el final de la historia de David y Goliat. David gana a pesar de las posibilidades, esta bien.
No sé si vamos a ganar, pero tenemos una oportunidad real.
Sabemos que la desobediencia civil ha ayudado a lograr grandes cosas.
Ayudó a garantizar el derecho al voto de la mujer.
Ayudó a terminar con la segregación racial.
Y sabemos que no podemos ganarle al cambio climático si seguimos titubeando,
si seguimos hablando de ello sin hacer nada.
Tenemos una catástrofe moral en nuestras manos.
Tenemos que hacer esto porque nuestra democracia ha sido desvirtuada, nuestras leyes han sido subvertidas.
Digo que es un crimen, y no lo digo a la ligera.
Cuando no tienes a que recurrir en nuestra democracia, legal o democráticamente,
tenemos, no simplemente el derecho, sino el deber de romper la ley para mostrar nuestro descontento.
Podemos reconciliarnos como nación. Esto no se trata del partido Republicano o del Partido Demócrata, se trata de la humanidad.
Estamos conectados entre nosotros, y esa conexión debe ser la base para esta especie de gran batalla.
Estamos muy contentos de estar aquí, algunos de nosotros estamos especialmente felices de estar aquí porque ya no estamos en la cárcel
donde pasamos buena parte de ayer en esta demostración contra el oleoducto Keystone XL
y esa es, por supuesto, una de las razones por la que los americanos están descendiendo a esta ciudad esta semana.
Miles de personas marcharon frente a la Casa Blanca
e instaron al Presidente Obama a tomar medidas fuertes para combatir el cambio climático.
En el segundo evento de alto nivel organizado en sólo una semana por grupos como el Sierra Club y 350.org.
Estoy aquí porque tengo la obligación con mis hijos, mis antepasados, con nuestras futuras generaciones.
Si esta oleoducto se construye, será a costa de vidas humanas.
Cuando el desastre ocurra, no va a hacer distinciones de raza, color o credo.
Los magnates de combustibles fósiles, sus abogados, sus asesores políticos, están perdiendo su control sobre la mentalidad de nuestros países.
No vamos a crear una economía de energía limpia mientras un lado este golpeando el otro,
ganaremos cuando todos nos unamos para encontrar soluciones que funcionen para todos nosotros.
Y la buena noticia es que, en este país, cuando finalmente decidimos que vamos a tomar acción
en un asunto moral a la pregunta sobre quienes somos, y a quienes respondemos cuando respondemos explosivamente.
Es la lucha épica de este siglo y vamos a lograrlo.
Si no lo hacemos no tendremos un vigésimo segundo siglo.
Cada vez que se levanta una gran generación, se levanta en base al idealismo.
Se levanta basándose en coraje moral y eso es lo que está sucediendo ahora.
Este es el último minuto del segundo tiempo del partido más importante que la humanidad haya jugado jamás.
La realidad de nuestro movimiento es la siguiente: si fallamos, las consecuencias serán terribles.
Ninguno de ustedes podría estar en un lugar más importante de en el que se encuentran ahora mismo.
Parte de esta lucha en contra de los problemas más profundos a los que nos hemos enfrentado,
muy poca gente en la tierra llega a decir,
"Estoy haciendo lo más importante que puedo estar haciendo en cualquier lugar del planeta en este momento"
pero ustedes, chicos, pueden decir eso porque están luchando en el frente de esta batalla tan importante.
Creo que podemos ganar esta pelea.
Creo que podemos ganarla si actuamos como una comunidad, si no hacemos nada que pueda dañar esa comunidad
y en lugar de eso, construimos juntos esa comunidad de una manera que permita adoptar medidas de gran alcance.
Sabemos el final de la historia.
A menos que re escribamos el guión, esta muy claro el final es un planeta que se calienta sin ningún control.
Así que ese es nuestro trabajo: reescribir la historia.
Todo lo que siempre quise ver, era un movimiento de gente para frenar el cambio climático, y ahora lo he visto.
Hoy, en la mayor manifestación climática de la historia de Estados Unidos,
Hoy se que vamos a pelear esta batalla,
La batalla más fiel en la historia de la humanidad esta aquí y vamos a luchar juntos.