Muchos de vosotros os preguntaréis por qué llevo estas gafas. Pues estas gafas me han hecho ver la vida de otra manera y no por su graduación o sus cristales, no, sino porque me han hecho sentir más libre y más segura. Perdón. Mi hermana y yo nacimos con una discapacidad, en concreto con parálisis cerebral. Cuando teníamos tres años, los médicos nos recomendaron que para no quedarnos en una silla de ruedas, hiciéramos deporte. Y como todo el mundo sabe el más completo que hay es la natación. Así que nos pusimos a ello. Al principio, como cualquier niño pequeño, teníamos miedo, nos daba pereza, el agua estaba fría y bueno, nos costaba un poquillo. Pero con el paso del tiempo nos fuimos acostumbrando y se nos fue pasando ese miedo. Cuando teníamos 7 años comenzamos a competir, ya que nuestro entrenador nos veía cualidades, y habló con nuestros padres para poder hacerlo. Al principio, en la competición, nos poníamos nerviosas, sin apenas ilusión propia, siempre para ganar pero por complicidad con el entrenador. Además, íbamos a un centro de rehabilitación donde había para personas mayores y niños. Para los niños hacían actividades durante todas las festividades del año. La que más nos gustaba era el campamento de verano, realizado en un lugar llamado "El bosque de los sueños". En ese campamento había gente con y sin discapacidad. Una de las actividades más chulas de ese campamento eran las barcas: es hacer una pista con papel transparente y unas barcas hinchables en forma de kayak Allí hacemos varias pruebas. Teníamos que conseguir que los chicos con más discapacidad consiguieran divertirse en esta actividad. Yo en concreto ayudé a Ana, la que vemos en la imagen, que, la pobre mujer, solo puede mover la cabeza, necesitaban ayuda para que ella pudiera realizar esa actividad. Yo me ofrecí. Esta actividad le encantó, lo que pasa es que nos costó un poquillo pero al final conseguimos realizar la actividad, con tanta suerte y nos lo pasamos tan bien que al año siguiente volvimos a repetir. Esta actividad lo que nos enseña es que yo puedo confiar en la otra persona y que los demás confíen en ti. Es lo más guay de este campamento. Otra de las actividades muy guays es el karaoke, donde los voluntarios del campamento descargan las canciones más chulas del verano, nos ponen la letra en una sala, esa tarde nos reunimos todos en la sala que vemos en la imagen y nos lo pasamos genial. Cantamos como si fuera el Signstar de la PS, (Risas) pues igual. Acabamos todos llenos de risas, todos nos lo pasamos genial. En esta actividad perdemos el miedo a abrirnos a los demás, perdemos el miedo a abrirnos a los demás y a confiar que no hay que tener miedo a los demás, que lo que hay que hacer es conseguir realizar nuestras metas. También hay que tener en cuenta al voluntariado que realiza esta actividad como Jéssica, que me ayudó. Al enterarme de que era campeona de kárate me ayudó a ponerme las metas y a conseguirlas. Otra de las personas más chachis del campamento es mi compañera Reyes, que seguro que está entre el público. Lo que más me ayudó de esta persona es su forma de luchar, de luchar por lo que quiere. Yo en 2012 conseguí la mínima de 50 m mariposa de natación adaptada. ¿Alguno de Uds sabe cómo se compone la natación paralímpica? Bueno, como es muy normal, no lo sabréis mucha gente. La natación paralímpica se divide en tres grandes categorías: intelectuales, ciegos y a la que yo pertenezco, físicos. Físicos, a su vez, se divide en 10 categorías: de la S1, el que más discapacidad tiene a la S10 el que menos, al que a lo mejor le faltan dos dedos o mueve mal una pierna. Yo, por mi discapacidad en las piernas, pertenezco a la S8. Este año he vuelto a batir mi propia marca tenía 48:16 y en el campeonato de España la conseguí rebajar 6 s y bajé a 42:86. A corto plazo, como todo el mundo sabe, en natación hay muchas pruebas. Y en natación paralímpica tenemos unas mínimas que batir y unos records que conseguir. Yo, a corto plazo, tengo como meta conseguir el 100 mariposa. A largo plazo, como cualquier deportista, tenemos en mente los Juegos Paralímpicos, los de 2016. A mí esta experiencia me ha ayudado a darme cuenta que puedo confiar en mí misma, poniéndome yo misma las metas, luchando por ello y trabajando y esforzándome para conseguirlo. Muchas gracias. (Aplausos)