El peor enemigo del cáncer es el microentorno de un cuerpo sano | Adriana Albini | TEDxVarese

Históricamente, las investigaciones del cáncer se han centrado principalmente en las células cancerígenas. Sin embargo, la célula nunca está sola, sino que existe dentro de un microambiente en nuestro cuerpo, que se encuentra sano, en su mayoría. Una idea para el futuro es ayudar al cuerpo a prepararse para combatir el cáncer desde adentro, utilizando el microentorno del tumor como objetivo. Esto puede lograrse gracias a nuevos descubrimientos, como los nutracéuticos, que contienen ingredientes naturales tomados de los alimentos y que se usan con fines medicinales.

Esta charla es de un evento TEDx, organizado de manera independiente a las conferencias TED. Más información en: http://ted.com/tedx

Imaginen el futuro.

Para mí, el fututo es una vida
sin cáncer en un cuerpo sano.

Les voy a hablar
del microentorno del tumor,

y les voy a explicar
lo que es un microentorno.

Les comento que por mucho tiempo

la investigación del cáncer
se ha enfocado en la célula cancerígena.

Es una célula que mutó en el organismo,

y que empieza a proliferar.

Esta célula tiene una mutación genética
y se ha estudiado de manera individual.

Pero no está sola. Está en nuestro cuerpo,

que está sano en su mayoría,
y vive en un determinado entorno.

Piensen en un entorno.

Hay diferentes tipos,

y nuestros sentimientos
cambian según sea el ambiente.

Por ejemplo, este es el mar.

Ahora vemos un ambiente
más espectacular, las montañas.

Y este es el campo, algo más pacífico.

La célula cancerígena, de alguna forma,
está rodeada de un entorno,

y es diferente,

cambia conforme el entorno cambia.

Así que esta es la historia
de una pequeña célula cancerígena

que empieza en un epitelio
sano y luego hace una mutación.

La célula mutada empieza a crecer
pero sigue siendo pequeña,

y finalmente muere
en forma de tumor pequeño

si no interactúa con su entorno.

Y como el entorno del tumor
ocupa un espacio pequeño,

recibe el nombre de "microentorno".

Y está conformado
por células sanas del cuerpo,

por ejemplo, por las células
inflamatorias, inmunes y endoteliales

que forman los vasos
sanguíneos y los fibroblastos.

Y al interactuar con el organismo,

nuestro cuerpo se corrompe por el cáncer

y empieza a favorecer
el desarrollo de esta enfermedad.

Para el futuro, la idea es
ayudar al cuerpo a prepararse

para luchar contra el cáncer
desde adentro.

Lo primero que se ha estudiado
dentro del microentorno

es la capacidad de una célula tumoral
de estimular los vasos sanguíneos,

el medio de transporte de la sangre,

para nutrir a este primer grupo
de células transformadas.

A esto se le llama "angiogénesis".

Básicamente, lo que vemos
es un tumor pequeño,

capaz de reclutar capilares
de los vasos sanguíneos existentes.

Y comienza a nutrirse
de estos capilares "robados"

para poder invadir
el cuerpo y hacer metástasis.

En respuesta a esto,
se han creado terapias,

desde los primeros estudios,
como los de Judah Folkman o Gulino,

para combatir la angiogénesis.

Y también se han desarrollado medicamentos
que ahora se usan para tratar el cáncer,

como el cáncer de colon,

combatiendo la angiogénesis.

De este modo, se puede sofocar al tumor

y evitar que obtenga alimento
para, de este modo, matarlo de hambre.

Esta es la primera acción
en contra del microentorno.

Otra forma es a través de la prevención.

Estos son los resultados de investigación
que obtuve con un equipo,

para hacer la prevención a tiempo

y evitar que el tumor
forme esos vasos sanguíneos.

Pero, como pueden ver, el microentorno,
por ejemplo en las montañas,

o en el bosque, no es solo una célula.

No solo son células endoteliales,
sino que hay muchos habitantes.

Y, como pueden ver en esta imagen,

hay muchas células inflamatorias,

macrófagos, neutrófilos y mastocitos.

Hay fibroblastos y células epiteliales
normales, no transformadas.

Esto es de un artículo de revisión.

Todas esas células
se encuentran en el tumor,

y pueden cooperar con él.

Así que, en definitiva,
son todas células objetivo.

Volvamos a imaginar el entorno del tumor.

Esta es la célula tumoral,

y esos son los linfocitos
que deberían matarla.

Pero no lo hacen,

pues el tumor tiene la capacidad
de enseñarles a ser aliados

en lugar de enemigos.

¿Por qué sucede esto?

Porque, de alguna manera, las células
tumorales inducen a las células buenas

a convertirse en células malas
para ayudar al tumor.

Lo hacen con las células inmunes,
en un proceso llamado "polarización".

Por un lado, tenemos macrófagos
tipo 1, que son buenos,

son antiangiogénicos, anticáncer.

Y por el otro lado están
los macrófagos tipo 2,

que de alguna manera son
capaces de ayudar al tumor a crecer.

Esto sucede porque los tumores
no inventan nada,

sino que utilizan lo que hay
en nuestro historial genético.

Y este es el principio
de la sanación de heridas.

Cuando nuestro cuerpo se daña,

los linfocitos acuden a ayudar
a combatir a los enemigos,

a luchar contra la herida, contra el daño.

Y luego reclutan otras células inmunes,

como los neutrófilos y macrófagos,
células efectoras del sistema inmune.

Y una vez que combatieron a los enemigos,

tienen que crear tejido nuevo
para formar la cicatriz.

Y así ocurre este fenómeno
que hace que las células crezcan.

El tumor tiene un mecanismo similar.

Existe una herida que no sana.

Así que se nos ocurrió,
junto con Michael Sporn,

investigador estadounidense reconocido
por inventar un tipo de prevención,

utilizar el microentorno
del tumor como un blanco

para ayudar a nuestro cuerpo
a luchar contra los tumores desde adentro.

También descubrimos,
junto con nuestro equipo,

en especial con Antonino Bruno,
un joven investigador,

pues el futuro está
en los científicos jóvenes,

y junto con mi esposo, Douglas Noonan,

quien es profesor en la Universidad
de Insubria en Varese,

que hay ciertas células
a las que llamamos "asesinos naturales".

Estos asesinos naturales deberían
atacar a las células tumorales,

pero descubrimos que, en los tumores,
algunas de esas células se polarizan

y los ayudan a crecer.

No matan a las células cancerígenas,
ya no son capaces de hacerlo.

Pero las alimentan, y hacen
que crezcan más rápido.

Y podemos reeducar a esas células
para que vuelvan a ser buenas

y ayuden a combatir el tumor.

¿Cómo se puede lograr?

Son células inflamatorias,

y la epidemiología ha demostrado
que los medicamentos antinflamatorios

puede combatir la inflamación
y prevenir los tumores.

Un medicamento muy sencillo y económico
que ha podido hacerlo es la aspirina.

Numerosos estudios muestran

que una aspirina al día
reduce el riesgo de cáncer.

Otro dato interesante es
que la aspirina proviene de una molécula

que se encuentra en la naturaleza,
más precisamente en las plantas.

Es el ácido salicílico,
que se obtiene del sauce.

Y hay muchas plantas
o derivados fitoquímicos

que son capaces de prevenir un tumor.

¿Qué es la prevención?

¿Qué es quimioprevención?

Michael Sporn, a quien mencioné
antes como mentor y colaborador,

la definió de esta manera:

"El uso de agentes específicos
para revertir, suprimir o prevenir

el proceso carcinogénico
de un cáncer invasivo".

Ahora se pueden elaborar aspirinas
a partir de muchas plantas,

especialmente de derivados
de los alimentos dietarios.

Esto es muy interesante

pues sabemos que nuestra dieta
nos ayuda a mantenernos saludables.

Yo soy química, y en las plantas
podemos encontrar,

por ejemplo, genisteína de la soya,
silibinina, quercetina de las manzanas,

resveratrol del vino tinto,
galato de epigalocatequina del té verde,

y hasta cúrcuma de especias como el curry.

También retinoides,
como el licopeno de los tomates,

betacaroteno del damasco o las zanahorias.

Todas estas son moléculas buenas
que ayudan a nuestro cuerpo a estar sano

y evitan que nuestras células buenas
se transformen en malas y ayuden al tumor.

Este es un campo nuevo,
que ha existido por algunos años,

que se llama "nutracéutica".

¿Qué es un nutracéutico?

Aquí pueden ver una pastilla
que contiene frutas y verduras.

Es un término que deriva
de "nutrición" y "farmacéutico".

Este término se aplica a productos
que no son alimentos

y, además de ser nutritivos,
también pueden ser terapéuticos.

Existe otro término, que es
"alimentos funcionales",

y son los alimentos

que, además de ser esenciales
para la vida diaria y la nutrición,

también son buenos para fines medicinales.

Hemos realizado numerosas
investigaciones en este campo.

Tengo más de 330 publicaciones,
y muchas tratan este tema.

El estudio más reciente
se hizo en lúpulos de cerveza.

¿Por qué?

Porque para que la cerveza
llegue a un buen estado,

se le agregan lúpulos.

Los lúpulos también le dan el sabor,
que es muy conocido,

pero también evitan
que la cerveza se eche a perder.

Y, así como con muchas otras plantas,
podemos aislar propiedades y usarlas.

Hemos estudiado un polifenol
derivado de la cerveza ,

con propiedades antioxidantes
y antinflamatorias,

llamado "xanthohumol".

Como química, y en colaboración con otros
químicos de la Universidad de Pisa,

con Armando Rossello y su equipo,

hicimos una modificación,

como la que se hizo
con el ácido salicílico del sauce,

y creamos nuevos xanthohumoles
que tienen mayor biodisponibilidad

y que pueden funcionar
como la aspirina de la cerveza.

Esto se puede usar
para hacer un medicamento,

seguramente de baja toxicidad y natural.

De igual manera, hemos hecho otro estudio
a partir de un producto que desechamos.

Sabemos que el aceite de oliva
es un producto de la dieta mediterránea,

muy bueno para la salud.

Pero los polifenoles son
solubles en su mayoría,

así que, al elaborar el aceite,
tiramos junto con el agua

muchos componentes buenos
para nuestra salud.

Por ello, en colaboración
con una fábrica en la Toscana,

creamos extractos a partir
del agua desechada de las olivas.

Cuando se hace el aceite,

se desecha el agua utilizada,
lo cual es un problema para la naturaleza,

pues no es bueno tirarla.

Podemos filtrarla, concentrarla

y crear alimentos funcionales
a partir de esos desechos.

Esta es una forma muy económica
de obtener polifenoles.

Ambos descubrimientos han sido patentados,

y pueden convertirse
en productos para el futuro.

También, cuando prevenimos a tiempo,
se pueden usar componentes no tóxicos.

Hablamos de restricciones
calóricas, factores dietéticos.

Este es un estudio que publicamos
en una reconocida revista de oncología

con un amigo estadounidense, William Li,

donde explicamos que podemos
usar derivados dietarios

para prevenir la angiogénesis,

y que cuanto antes empecemos,
menos moléculas tóxicas se usarían.

Cuando el tumor empieza a extenderse,

entonces se tendrán que usar
más medicamentos tóxicos,

pues se tiene que combatir
una masa más grande.

La prevención ha adquirido
un nuevo concepto llamado "intercepción".

Se puede tratar de evitar
el cáncer, pero cuando ya existe,

se puede interceptar,
bloquearlo donde se encuentre.

Podemos evitar el uso
de medicamentos costosos.

Y para reducir el riesgo de cáncer

podemos seguir
las siguientes recomendaciones.

No fumar.

Mantener un peso saludable.

No consumir mucho alcohol.

Tratar de ingerir alimentos
saludables como frutas, verduras,

bebidas sanas, jugo de frutas, especias...

Evitar infecciones.

Hacer ejercicio.

El deporte es muy importante.

Se puede prevenir el cáncer
tan solo con hacer caminatas.

Estar al pendiente del entorno,

y hacerse chequeos regulares y formales.

Este es un artículo sobre
prevención e intercepción

publicado con Andrea deCensi,
Alberto Costa y Franco Cavalli.

Para finalizar, el cáncer
es una conspiración

entre "chicos buenos"
que se volvieron malos.

El microentorno puede
ser "quimioprevenirse"

para que no ayude al tumor
a crecer y avanzar.

Podemos mantener sano
a nuestro microentorno

haciendo ejercicio,

tomando medicamentos
de baja toxicidad, antinflamatorios,

o, por ejemplo, siguiendo
una buena dieta mediterránea.

Esta es mi visión del futuro,
un ambiente sano,

en el que podamos soñar
con una vida feliz y saludable,

y que ayude a las células inmunológicas.

Hay muchas terapias nuevas
en el campo de la inmunología

que reevalúan el potencial
de las células inmunológicas.

Estas células pueden combatir
el tumor y evitar que avance.

Así que, desde mi punto de vista,
el futuro es tener un cuerpo sano,

que luche contra el cáncer
o directamente prevenga su aparición.

Gracias.

(Aplausos)