Enseñar con empatía | Anna Spertini | TEDxSiena

Esta charla fue presentada en un evento TEDx que utiliza el formato de la conferencia TED, pero organizada de manera independiente por una comunidad local.

Para mayor información, visita el sitio http://ted.com/tedx

Anna Spertini, traductora, intérprete y profesora de lenguas, se dedica desde hace más de 18 años a la traducción y a los métodos de enseñanza innovadores, con particular atención a la formación de los niños y de los adolescentes. Es también una "mamá Suzuki" y sigue a su hijo en el aprendizaje del violín con este método innovador, que requiere la presencia constante de los padres en el proceso de aprendizaje.

Actualmente colabora en un proyecto de investigación que cuenta con la participación de universidades italianas y extranjeras para la definición de una nueva metodología de enseñanza que favorezca el bienestar de los estudiantes y de sus padres, no sólo en el momento del desempeño artístico o intelectual, sino también en el momento del estudio.

Buenas tardes y gracias por la invitación

Me llamo Anna Spertini, soy profesora,

enseño a niños y adolescentes.

Y he pasado los últimos
cinco meses de mi vida

estudiando las microexpresiones faciales
y las emociones relacionadas con ellas.

Aquí, esta, por ejemplo,
es una expresión de alegría sincera.

Esta, sin embargo, es la expresión
que hacen mis conocidos

cuando les cuento como pasé el verano.

Hay una cierta incomodidad,
da una cierta impresión

porque efectivamente
las microexpresiones faciales

a menudo están relacionadas
con el descubrimiento de las mentiras.

Esto también gracias a una serie
de televisión de hace algunos años.

Pero las personas, no saben,

que aplicando estas técnicas
a otro sector, como el de la educación,

podemos conseguir una mayor
comunicación con los estudiantes

y también una mayor
conciencia de sí mismos.

También soy mamá.

Mi hijo se llama Alessandro,
tiene 9 años,

y estudia el violín con el método Suzuki.

El método Suzuki es un método innovador
en la enseñanza de la música,

reconocido universalmente

y también llamado
"método de la lengua materna".

Fue creado en el siglo pasado
por Shinichi Suzuki

que es un violinista y profesor japonés

y el fundamento principal de este método

es que todos pueden aprender
de su entorno.

Así que cuando creas
el ambiente justo y estimulante,

también estimulas las mismas
situaciones en el alumno,

y así promueves el aprendizaje.

La condición esencial del método Suzuki

es la participación
de al menos uno de los padres

durante el proceso de aprendizaje

y de hecho el éxito
de cada programa Suzuki

está precisamente basado
en la buena calidad

del llamado "triángulo Suzuki"

que se forma por la relación
de colaboración

entre profesor, padres y niño.

Esta es una clase de violín

de la escuela Suzuki de Siena.

El maestro de violín de mi hijo
se llama Alessio Nacuzi

generalmente envía correos
electrónicos a los padres

para apoyarlos en su función
de padres Suzuki

para que puedan ayudar a sus hijos

con el aprendizaje del violín en casa.

La primavera pasada, Alessio envió
un correo electrónico a todos los padres

que, entre otras cosas, contenía un enlace

al sitio web de Paul Ekman.

Paul Ekman es un investigador
que ha dedicado

toda su vida a la investigación
de las microexpresiones faciales

y de las emociones relacionadas con ellas.

Visito el sitio web y veo de inmediato

que hay una gran cantidad
de información interesante

no sólo para el trabajo que realizo,
sino también como mamá,

para ayudar a mi hijo
con su estudio del violín.

El material es mucho y
también es bastante costoso,

así que le pregunto a Alessio
si es posible compartir el gasto.

Alessio acepta y así compartimos también
los momentos de estudio.

pasamos todo el verano estudiando

y al final del verano

logramos conseguir
el FACS Coders Certificate.

Este es un certificado
que generalmente obtienen

las personas que trabajan como expertas

con la policía o con los tribunales.

Pero nosotros lo queremos aplicar
a la educación

porque estamos convencidos de
que nos dará resultados sorprendentes.

Y en este proceso he podido
conocer mejor a Alessio.

Conozco algunos detalles de su vida,
y cómo llegó a Siena,

y así descubro que,

como Paul Ekman, ha dedicado toda su vida

al estudio de las
microexpresiones faciales.

Alessio ha dedicado toda su vida
no sólo a la música y al violín,

sino también a la investigación de un
método didáctico único en su género.

Imaginen, de hecho,

se toman diferentes herramientas
y técnicas de comunicación,

normalmente utilizadas en áreas
especializadas,

y se aplican a la educación.

El efecto es inmediato:
entre profesores y alumnos

se crea una comunicación
y una empatía profunda;

los resultados se logran
en un tiempo mucho más rápido

y con un bienestar subyacente estable.

El maestro Alessio Nacuzi
está convencido de que es posible,

a través del uso de diferentes métodos,

como el método Suzuki,
el Mental Training, el NLP Coaching,

el método Feldenkrais, el LAB Profile,

conseguir una situaciónpor la cual

en el momento de la actuación
y, por lo tanto, del concierto

el niño se encuentre en una
situación de cero estrés

y por lo tanto un bienestar subyacente
estable.

Muchas universidades
extranjeras e italianas

resultaron estar interesadas en
la investigación de Alessio.

Entre estas también el
Colegio Real de Londres,

y obviamente también el
Grupo Paul Ekman

que ha donado
parte del material de estudio.

Y el siguiente paso es:

¿cómo hacemos para definir
el nivel de estrés de los niños?

Existe una prueba fácil y confiable

que se llama prueba del cortisol en
la saliva.

Consiste en tomar una pequeña
muestra de saliva

del sujeto, en el momento
de la presentación,

en este caso, en el momento del concierto,

para medir precisamente
la cantidad de cortisol.

Cuando esta hormona,

que es producida por
la glándula suprarrenal,

está presente en gran cantidad,

indica una condición de estrés.

Alessio Nacuzi en sus años de experiencia

ha aplicado este método en
muchos niños, sus alumnos.

Y ha visto que, efectivamente,
se puede aplicar, se puede hacer,

y ahí están los resultados.

Yo soy testigo entusiasta de esto

porque he visto que mi hijo,

con tan sólo dos años
de estudio del violín,

ahora es capaz de tocar,
de memoria, más de 50 piezas,

incluyendo también piezas muy complejas.

Así que piensen en lo que podría ser

si se aplicara un método de este género
a otras materias,

como las matemáticas,
la historia, las lenguas extranjeras.

Tendríamos una manera, finalmente,
de dar la posibilidad a nuestros hijos

de aprovechar al máximo este
aspecto del aprendizaje

que los acompañará el resto de sus vidas.

Y llegamos, así,

a la expresión de alegría sincera
que les he mostrado al principio.

Imaginen a sus hijos felices de aprender,

que les motivará mucho al hacerlo.

E imaginen también la suya, su felicidad,

cuando se den cuenta de lo que
han hecho por ellos.

Gracias.

(Aplausos)