(Cana del Louisiana) (Las novelas de Jonathan Safran Foer tienen mucho que aprender de la poesía) La gente habla a menudo sobre la muerte de la literatura. Se ha hablado de ello desde el momento en que apareció el primer trabajo literario, pero hay mucho más que decir y esto ha sido impulsado mediante la disminución de los lectores, por lo que parece ser una apatía creciente, o incluso una ansiedad o una pérdida de confianza en la literatura, y la tendencia hacia las pantallas, todo pasa por una pantalla y lo que eso significa para los libros que no funcionan muy bien en pantalla, No es que no se pueda leer un libro en una pantalla perfectamente, pero no se puede leer un libro en la misma pantalla en la que se tiene el correo, el calendario y los mensajes. Los libros no pueden competir con esa clase de medios. Así que nos preguntamos si la gente leerá libros. Y creo que sigue habiendo, y siempre habrá cosas que sólo la literatura puede hacer, sólo la literatura puede comunicar. No creo que la literatura sea necesariamente mejor, sea lo que sea lo que eso signifique, que el cine, la danza o la música. De hecho, personalmente suelo sentirme más atraído por el cine y la danza que por la literatura, pero sé que hay momentos en mi vida en que siento la necesidad de literatura, y sólo literatura. Así, por ejemplo, la madre de mi mejor amiga falleció hace aproximadamente una semana. Y fui a visitarla a Washington DC. Yo vivo en Nueva York. Me preocupaba qué iba a decir y cómo iba rellenar lo que pensaba que serían silencios incómodos e incluso dolorosos. Y llevé unos poemas, unos 20 poemas. Se los leí y conversamos sobre ellos. Y en ese momento, cuando los dos juntos, sobretodo ella, por supuesto, pero juntos, afrontábamos aquello, el momento más grande de la vida, que es la muerte, nos apoyamos en la poesía. Y creo que los poemas, las historias y las novelas son una gran ayuda en el momento preciso en que lo que más necesitamos es la palabra, en esos momentos nefastos, urgentes o existenciales. Las novelas están pensadas para ser leídas durante el transcurso de muchas horas o días pero incluso una única historia toma media hora para leer. Y no estaba seguro, en este caso, cuál sería su nivel de energía así que quería que fuesen más bien cortas. Pero aun cuando este es el caso, también es verdad que la poesía es la forma de literatura más densa y en cierto modo, está en su forma más pura. No creo que las novelas sean peores que la poesía pero sí que creo que las novelas tienen mucho que aprender de la poesía en cuanto a lo que es posible, a cómo de directo se puede ser, cómo de concentrado puede ser el lenguaje, y cuán evocador y resonante. A veces creo que las novelas cometen el error de parecerse demasiado a su propia descripción. Si alguien dice: "¿De qué va este libro?" Mi sueño es escribir una novela con la que alguien tuviese que decir: "Supongo que podría decirtelo, pero no lo entenderías. Tienes que leerla." Para mí, eso es una buena novela. Una novela que es su propio resumen, simplemente una versión extendida de su resumen, está demasiado cercana a la televisión. Creo que las novelas todavía pueden hacer algo que la poesía también hace en cuanto a ser algo inefables o misteriosas o no ser demasiado accesibles, pero a mayor escala. Toda mi vida me he sentido más atraído a las artes visuales que a la literatura. Incluso cuando siento que no puedo recordar por qué quería ser escritor, no acudo a los libros, sino a la pintura o a la escultura. Para mí, las diferencias se han enfatizado demasiado, la diferencia entre un músico, un escritor, un artísta, un bailarín. Los hemos clasificado, segregado, para que haya muy poca superposición. Pero de hecho, todas son personas que quieren hacer cosas que se podría decir que no tienen ninguna utilidad. Todo en esta vida tiene una utilidad. La persona que hizo la cámara con la que estamos grabando esto, la hizo para que pudiese grabar algo así. Y una televisión o un ordenador en la que alguien está viendo algo se hizo pensando en unas funciones específicas. Un puente se hace para que la gente pueda pasar de una masa de tierra a otra. Pero las novelas y los cuadros y las canciones en realidad... Pueden tener un efecto en el mundo, pueden ser políticos, pueden entretener, pueden ser objetos con los que se comercializa, pero no se hicieron realmente por esas razones, se hicieron porque sí. Y creo que cualquiera que hace algo porque sí, ya esté intentando publicarlo o simplemente esté intentado reorganizar ramitas en el suelo porque te gusta, los que hacen eso son artistas. Y, porque vivimos en un mundo en el que tenemos que tener un trabajo y en el que se espera que crezcamos con nuestro trabajo, y porque nos gusta tener una respuesta a la pregunta "¿A qué te dedicas?" Si conoces a alguien en una fiesta, o... te preguntan "¿A qué te dedicas?" Nos incomoda no tener una respuesta. Pero la verdad es que las distintas formas de arte son mucho más parecidad que diferentes. Cuando no estoy trabajando en un libro, soy alguien que se mueve por el mundo y ve cosas bonitas e intenta recordarlas, aunque normalmente no lo consigue, y oye chistas e intenta recordarlos pero normalmente no lo consigue etcétera, y tiene ideas que desaparecen. Pero cuando estoy escribiendo, guardo todas esas cosas para poder usarlas y reorganizarlas. No hay nada que provenga de la nada. Creo que hay una cierta idea de que los libros o el arte, hacer arte es un acto mucho más románticamente creativo de lo que es, como si la inspiración llegase y de repente, algo aparece pero no es así en realidad. Esa no ha sido mi experiencia para nada. Se trata de estar atento a lo que te rodea y empezar a conocer lo que te gusta y lo que te es útil y después reunes esas cosas en vez de todo lo demás, coleccionar esas cosas y después descubrir cuál es la organización que más te gusta a ti. No hay nada objetivo al respecto. No tiene que darse el caso de que a otra persona le vaya a gustar, pero sí que es como hacer un collage solo que con el mundo entero como almacén de cosas que organizar. Desde luego en el arte, creo, las cosas más importantes ocurren a nivel del subconsciente. Cuando empiezo a escribir un proyecto, no me lo planteo así. De hecho, y digo esto no como una broma o para menospreciarme, pero no me planteo muchas cosas. Es muy.... Estoy muy abierto a cómo me siento cuando estoy trabajando en ello, ¿qué es lo que me parece interesante, lo que me parece curioso? Pero nunca pienso en el uso potencial que algo tendrá. Como decía antes, hay una cualidad del arte que es inútil, pero de una buena manera. Esto es el mayor cumplido que podría decir. Y si empezase a pensar en lo que podría conseguir psicológicamente o a buscar un significado o una catársis, esto sería otro tipo de utilidad, de la misma manera en la que intentar hacer algo que pudieses vender por dinero es una utilidad No quiero decir que estas dos cosas no puedan ser algo bueno en tu vida, pero no creo que constituyan una buena obra de arte. No son un buen comienzo. Don DeLillo dijo una vez: "Nadie escribe su primer libro. Simplemente ocurre". Llega un punto en el que miras la impresora y están saliendo las páginas. Y piensas: "Madre mía, ¡no me lo puedo creer!" Eso es lo que yo creo. Es decir, quizás es algo diferente si empiezas más tarde en la vida, y has estado incubando una idea durante mucho tiempo pero la mayoría de personas, cuando escriben su primer libro, llega un momento en el que se dan cuenta de que tienen un libro entre las manos. Y el segundo libro es diferente porque entonces, tienes algo a lo que estás respondiendo, tienes tus propias expectativas. Si publicaste tu primer libro, tienes las expectativas de todo el mundo. Así que encontré el segundo libro algo más difícil por eso, pero había empezado el segundo libro antes de que se publicase el primero. Así que de alguna manera, fui capaz de escapar algunas de esas trampas. Pero después de haber escrito dos novelas, escribí una obra de no ficción sobre comer animales, sobre la ganadería. Y creo que no es una coincidencia que decidiese seguir en una dirección diferente porque empezaba a sentir el peso del momento. No quería hacer una tercera cosa de lo mismo que ya había hecho dos veces anteriores. No quería tomar una decisión sobre el futuro sólo por lo que había hecho en el pasado. Así que, quizás exageradamente, me resistí a eso y decidí alejarme e intentar algo nuevo. Creo que hay muchas maneras de hablar sobre las elecciones en el arte. Y es un error pensar que la manera en la que hablamos de arte, retrospectivamente como críticos, que es muy útil e interesante, pero es un error que ese sea el mismo lenguaje que el de la creación. Alguien dijo una vez, no recuerdo quién, quizás fue Oscar Wilde, no me acuerdo, dijo: "Sólo hay dos tipos de objetos en el mundo: los que nos fascinan y los que no nos fascinan". Y algo puede ser fascinante de una manera totalmente sencilla y atraernos por cualquier razón. Nos gusta. Es para nosotros. Si algo no es fascinante, si es mundano, y no es que lo odiemos, pero no tiene un gran efecto en nosotros. Y por supuesto, cada uno tiene su propia idea de lo que es fascinante. Y en cierto modo, la escritura se basa en hacer esa pregunta una y otra vez, es esto fascinante o no. Algo fascinante puede ser algo muy doloroso. No tiene por qué ser feliz y precioso. Puede ser muy feo, puede ser algo divertido, puede ser algo serio, trágico, cómico. Creo que fascinante simplemente significa, en cierto modo, que es auténtico y excepcional para ti. Es decir, la gente me suele preguntar, por qué escribo sobre la familia tan a menudo. Me parece una pregunta muy extraña. Ni siquiera sé qué responder porque para mí la respuesta es obvia. Nadie le pregunta a J.K. Rowling por qué escribe tanto sobre magos. Para mí, eso es raro. Es una elección extraña la que tomó y requiere una explicación porque nadie conoce a un mago, nadie se relaciona con magos, nadie se desvela por la noche por su relación con los magos, pero todo el mundo tiene una familia. Incluso aquellos cuyas familias están ausentes. Quizás, especialmente aquellos cuyas familias están ausentes. Estos son los temas principales de la vida y han sido los temas principales de la literatura desde el Génesis. Así que supongo que siempre voy a escribir sobre la familia. La familia es especialemente importante para mí pero ya sea en forma de suegros y yernos, o en forma de parejas casadas en una comedia, que no conozco. (Canal de Louisiana) (Con el apoyo de Nordea Fonden) (louisiana.dk/channel)