Lo que los niños son capaces de hacer para conseguir un reconocimiento, sigue siendo todavía para mí fascinante. Es tan fascinante como cuando era un chaval. Hay mucha gente que vive en las calles de San Francisco. Muy a menudo cuando estaba haciendo graffiti, me sentía en contacto con otras personas. que se mueven en la misma zona, y, a cualquier momento de la noche. A veces tienes que correr o dejarte pillar, y encontrarte en unos arbustos, y allí hay siempre alguién. Siempre había una presencia de otras personas que hacian algo. o viviendo o sobreviviendo de alguna manera en las calles, o en los alrededores de la ciudad, en definitiva eran personajes fantasticos... Estas circonstancias eran muy acogedoras era como si estuviera corriendo tan rápido como pudiera, dejando mi bicicleta abandonada en un arbusto, me saludaba diciendo:" ven aquí, por aquí, no hay problema..." "Nadie te va a ver por aquí." ( RISAS) Lo que demuestra inmediatemente que el bienestar de una ciudad, se mide por sus etiquetas. Es una forma directa de competencia con la publicidad, creo. Sigue siendo una de las últimas cosas que creo que no ha sido, todavía, corrupto, (RISAS)...para mí. Es todavía lo que hacía cuando era adolescente. Todavía lo hago de vez a cuando. Tiene que ser la tormenta perfecta. Hay algo que es incómodo por lo que es emocionante. Hay que estar fuera de apuro y salirse con la suya. La satisfacción de sus recuerdos, lejanos en el tiempo, pero que perduran, entre todos los demás. Se acaba de tener una vida, y que iría y se fue, y entonces que era. ¿Usted tiene esta memoria? Es complicado recrear e un estudio.