¿Qué pasaría si pudieramos
tomar una píldora o una vacuna,
y, al igual que salir de un resfriado,
pudiéramos sanar
nuestras heridas más rápido?
Hoy, si tenemos una operación
o un accidente,
estamos en el hospital semanas
y a menudo con cicatrices
y dolorosos efectos secundarios
debido a nuestra incapacidad
para regenerar órganos sanos e ilesos.
Trabajo para crear materiales
que ordenen a nuestro sistema inmune dar
las señales para regenerar nuevos tejidos.
Así como las vacunas ordenan a
nuestro cuerpo combatir las enfermedades,
en su lugar, podríamos ordenar
a nuestro sistema inmune
formar tejidos y sanar
más rápidamente las heridas.
Regenerar partes del cuerpo
de la nada puede parecer magia,
pero hay varios organismos que
pueden alcanzar dicho objetivo.
Algunas lagartijas pueden
regenerar sus colas,
La humilde salamandra puede
regenerar por completo su brazo,
e incluso nosotros, los humanos
podemos regenerar nuestro hígado.
después de perder más de la mitad
de su masa original.
Para hacer que esta magia esté
más cercana a la realidad,
estoy investigando cómo nuestro cuerpo
puede curar heridas y formar tejido.
a través de instrucciones
del sistema inmune.
Desde un rasguño en la rodilla
hasta esa molesta sinusitis,
nuestro sistema inmune
defiende nuestro cuerpo del peligro.
Soy inmunóloga,
y al usar lo que sé sobre
el sistema de defensa de nuestro cuerpo,
pude identificar a los actores clave
en nuestra lucha por sanar
nuestros cortes y contusiones.
Cuando examinamos los materiales
que se están probando
por sus habilidades para ayudar
a regenerar el músculo,
nuestro equipo notó que tras tratar
un músculo lesionado con estos materiales,
había una gran cantidad
de células inmunitarias
en ese material
y en el músculo circundante.
Así que, en este caso,
en vez de que las células inmunes
vayan hacia la infección
para combatir las bacterias,
se van hacia una lesión.
Descubrí un tipo específico
de célula inmune,
la célula T auxiliar,
presente dentro de
ese material que implanté.
y absolutamente crítico
para la curación de heridas.
Al igual que cuando
eramos niños y rompíamos el lápiz
e intentábamos pegarlo de nuevo,
nos podemos curar,
pero puede que no sea
de la manera más funcional,
y tengamos una cicatriz.
Así, si no tenemos
estas células T auxiliares,
en lugar de músculo sano,
nuestro músculo desarrolla
células de grasa en su interior,
y si hay grasa en nuestro músculo,
no es tan fuerte.
Usando nuestro sistema inmune,
nuestro cuerpo podría regenerar
sin estas cicatrices.
y parecerse a lo que era
antes de lesionarnos.
Estoy trabajando para crear materiales
que nos dan las señales
para formar nuevos tejidos
al cambiar la respuesta inmune.
Sabemos que cada vez que se implanta
un material en nuestro cuerpo,
el sistema inmune responderá a eso.
Esto abarca desde los marcapasos
hasta las bombas de insulina
y los materiales que usan los ingenieros
para tratar de formar nuevo tejido.
Así que cuando pongo ese material,
o andamio, en el cuerpo,
el sistema inmune crea
un pequeño entorno de células y proteínas
que puede cambiar la forma
como nuestras células madre se comportan.
Ahora, al igual que el clima afecta
nuestras actividades diarias,
como salir a correr
o quedarse dentro y ver un programa
de televisión completo en Netflix,
el entorno inmunológico de un andamio
afecta la forma en que nuestras
células madre crecen y se desarrollan.
Si tenemos las señales equivocadas,
es decir, las señales de Netflix,
obtenemos células de grasa
en lugar de músculo.
Estos andamios están hechos
de una variedad de cosas diferentes,
desde plásticos hasta
materiales derivados naturalmente,
nanofibras de espesores variables,
esponjas que son más o menos porosas,
geles de diferentes rigideces.
Y los científicos pueden hacer
que los materiales.
envíen diferentes señales
a lo largo del tiempo.
En otras palabras, podemos orquestar
este espectáculo de células de Broadway
dándoles escenario, señales
y accesorios adecuados
que pueden modificarse
para diferentes tejidos,
al igual que un productor
cambiaría el conjunto
de "Les Mis" en comparación con
"La pequeña tienda de horrores".
Estoy combinando tipos
específicos de señales
que imitan cómo nuestro cuerpo responde
a lesiones para ayudar a regenerarnos.
En el futuro, podríamos ver
una curita a prueba de cicatrices,
Un relleno muscular moldeable
o incluso una vacuna para curar heridas.
No nos despertaremos mañana
y podremos curarnos como Wolverine.
Probablemente tampoco el próximo martes.
Pero con estos avances,
y mejorando nuestro sistema inmune para
ayudar a generar tejido y curar heridas,
podríamos empezar
a ver productos en el mercado.
que trabajan con el sistema de defensa de
nuestro cuerpo para ayudarnos a regenerar,
y tal vez algún día ser capaces de seguir
el ritmo de una salamandra.
Gracias.
(Aplausos)