Un asombroso 83 % de los estadounidenses
sufre estrés a causa de su trabajo,
y casi uno de cada dos
lucha por ser feliz.
De hecho, yo soy una de ellos.
¿Y Uds.?
Estoy aquí hoy para ayudarles con eso
enseñándoles una cosa y solo una:
cómo reír sin ningún motivo.
(Risas)
¿Por qué?
Porque cuando reímos,
nuestros cuerpos liberan muchos químicos
y neurotransmisores positivos
que estimulan nuestros cerebros,
nuestro sistema inmunológico
y sistemas nerviosos.
De hecho, cuando reímos,
el flujo sanguíneo aumenta un 50 %.
Por eso se sonrojan nuestras mejillas.
De hecho, la risa puede quemar calorías.
Si riesen 15 minutos al día,
cada día del año,
podrían perder hasta 2.2 kg..
Estos beneficios del yoga de la risa
me generaban curiosidad,
pero todavía no sabía
qué esperar de mi primera clase.
La instructora comenzó
dándonos antecedentes
acerca de cómo el yoga de la risa
comenzó en 1995 por un doctor en India.
Él encontró que nuestros cuerpos y mentes
no pueden discernir las diferencias
entre risa falsa y verdadera.
Así que no necesitamos
un cómico ni un catalizador
para obtener los auténticos
beneficios de la risa.
Así que dije: "Inclúyame".
Y así empezamos.
Comenzamos con la respiración
pranayama de yoga,
y entonces todo comenzó
a ponerse incómodo.
Tenía que reír sin ningún motivo.
La instructora podía
percibir mi nerviosismo
entonces me miró y dijo:
"Ida, fíngelo hasta que te salga".
¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja!...
(Risas)
Incómodo.
Pero funcionó.
Me quitó la presión de encima.
Me mostró que no debía preocuparme
por lo que la gente pensara
o por cómo me sentía.
El objetivo final es una vida sana.
Tuve que creer que merezco ser feliz,
y que merezco reír.
Y Uds. también.
Así que eso es lo que vamos a hacer hoy:
fingámoslo hasta que nos salga.
Vamos a reír sin ningún tipo de motivo,
porque la ciencia dice que
entre 45 y 90 segundos,
tu cuerpo empieza a liberar
todos esos neurotransmisores positivos,
y transcurridos dos minutos,
esa risa falsa se torna real.
Así que allá vamos.
¿Quién está listo para reír?
(Vivas) (Aplausos)
Muy bien. Necesito que se pongan de pie.
Que la sangre circule.
De acuerdo.
Las principales técnicas
del yoga de la risa son dos:
la primera es la respiración.
La clave está en llenar
nuestro diafragma,
aumentando la cantidad de oxígeno
y ayudando a que circule la sangre.
La segunda es, por supuesto, la risa.
Hay que centrarse en la risa
profunda desde el vientre.
Esto va aumentar la circulación
de nuestros sistemas linfáticos
y va a impulsar los
sistemas inmunológicos.
Así que para calentar,
quiero que todos respiren hondo,
levanten sus manos hacia el techo,
y exhalen con un "Hwoo" pronunciado.
Sáquenlo fuera. ¿Listos? ¡Ya!
IA: ¡Hwoo!
(Audiencia) ¡Hwoo!
IA: Buen trabajo. Bien. Otra vez.
Respiren hondo, llenen los pulmones.
Esta vez van a reír mientras
exhalan ¿Listos? ¡Ya!
(Audiencia) e IA: ¡Ja, ja, ja, ja, ja!...
Una vez más, respiren hondo,
llenamos los pulmones.
Desde el fondo del vientre, ¡libérenlo!
¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja!...
Buen trabajo. Bien.
Ahora estamos templados.
Para el primer ejercicio
del yoga de la risa,
vamos a hacer algo llamado
"el teléfono de la risa".
Hablar por nuestros celulares
es algo que hacemos a diario,
pero hoy vamos a hacerlo más divertido.
Quiero que finjan haber escuchado
lo más gracioso de sus vidas.
Saquen sus falsos celulares.
No hay forma correcta
ni equivocada de hacerlo.
Solo diviértanse.
Inspiren profundo y rían.
(Audiencia) e IA: ¡Ja, ja, ja, ja, ja!...
Alguien está escuchando
historias realmente divertidas
aquí mismo, esto es bueno.
Para nuestro segundo ejercicio
de yoga de la risa,
vamos a hacer uno de mis favoritos:
"el apretón de manos de la risa".
Darnos la mano es algo
que hacemos a diario,
y que nos ayuda a relacionarnos.
Pero hoy lo amplificaremos
y conectaremos con la risa también.
Quiero que le den un apretón de manos
a las personas contiguas.
Pero tienen que mirarlos
a la cara y reírse.
¿Preparados?
inspiren hondo y ríanse.
¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja!...
¡Choca esos cinco!
¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja!...
(Aplausos)
Gracias.
Veo que le están tomando
el gusto, esto es genial.
Para nuestro último ejercicio,
voy a dejar que Uds. decidan
acerca de qué reírnos.
Quiero que tomen un momento
y reflexionen sobre algo
que los haya estresado últimamente.
Vamos a tomar eso,
y lo utilizaremos como ayuda
memoria para recordarnos
que no siempre podemos cambiar
los resultados de la vida,
pero podemos cambiar cómo
reaccionar ante ellos.
Así que, ¿qué los ha
estresado últimamente?
Adelante. Sáquenlo fuera.
(Diversos comentarios de la audiencia)
Todos tienen un montón
de cosas que los estresan,
pero han repetido la factura del celular,
así que vamos a elegir eso.
Quiero que saquen
esa excesiva factura del celular
con todos esos recargos por
itinerancia y gastos adicionales.
Vamos a tomarnos
un minuto para recordarnos
que si bien no podemos cambiar
esa loca factura del celular,
podemos perdonarnos,
podemos reírnos un rato,
y podemos divertirnos con ello.
Así que respiren hondo.
Y ríanse de la factura del celular.
¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja!...
(Aplausos)
Gracias.
No sé si se dieron cuenta o no,
pero se han reído por casi 5 minutos,
y no les he contado ningún chiste.
De niños, nos reímos
unas 300 veces al día,
pero solo unas 30 cuando adultos.
Espero haberles enseñado
lo fácil que es volver a reírse,
estar más livianos y más felices,
y reír.
Está en sus manos hacer
de su historia una más feliz.
Uds. deciden.
Gracias.
(Aplausos)
(Vivas)